Creo que en ninguna entrada hemos tenido el título de un capítulo tan controversial como el que acabamos de tener aquí. No obstante, este título no deja de ser interesante pues es de lo más importante saber de dónde proviene la ignorancia humana. Es la primera obra de Roger Bacon y ya nos llena de curiosidad saber el por qué de que el hombre sea ignorante. Está bien, muchos filósofos lo han explicado, pero no desde esta perspectiva de la Edad Media. Veamos lo que nos trae este filósofo inglés.
Opera Majus
Parte I: Causas de la ignorancia humana
Capítulo I y II: La sabiduría
La verdadera sabiduría implica métodos de adquirir conocimientos, la aplicación de dicho conocimiento a cosas importantes; el gobierno de la iglesia, la conversión de los paganos y la condenación de los malvados.
Por supuesto, estos objetivos no son fáciles de cumplir por lo que se presentan 4 razones para su incumplimiento:
- Desvalorización de la autoridad
- Influencia del hábito
- Prejuicio popular
- Falso concepto de la sabiduría
Se comenzarán explicando las primeras tres causas de ignorancia.
Capítulo III: Desvalorización de la autoridad y la influencia del hábito
Puede ser que las tres primeras causas puedan liderar a la verdad algunas veces, pero las probabilidades pueden estar en contra para aquellos que los utilicen. Bacon nos dice lo importante que es no caer en estos errores, pues uno en un millón puede acertar guiándose por ellos.
Puede ser que la desvalorización de la autoridad y la influencia del hábito puedan ser acertadas algunas veces, pero siempre se debe uno asegurar.
Puede ser que la desvalorización de la autoridad y la influencia del hábito puedan ser acertadas algunas veces, pero siempre se debe uno asegurar.
Capítulo IV, V, VI, VII y VIII: Prejuicio popular
De todas las causas de los errores, esta puede ser bastante dañina. Esto se basa en que hasta los más grandes sabido de la antigüedad han podido cometer errores gravísimos. Uno de ellos como sabemos fue el gran Aristóteles cuyas teorías han sido descartadas progresivamente, incluso en los tiempos de Bacon.
Bastaría ver esto en los grandes pensadores musulmanes de la Edad Media. Avicena corrigió a Aristóteles; Al-Ghazali corrigió a Avicena; y Averroes corrigió a Al-Ghazali. Aquí mismo se demuestra que el conocimiento no tiene un dueño sino que se va actualizando constantemente.
Capítulo IX: Falso concepto de la sabiduría
Si la anterior era dañina, esta es mucho más dañina que la anterior. Este se refuerza aún más con una autoridad igual de equivocada, pues ahí el hombre toma seguridad de su propio conocimiento (que en realidad es falso).
Para evitar esta causa de ignorancia, el hombre necesita urgentemente adquirir conocimientos de la naturaleza y comprenderla.
Capítulo X: El reconocimiento de la ignorancia
En la ignorancia deben entenderse y distinguirse dos cosas:
- Presuposición del conocimiento
- Consolidación de la ignorancia
Una cosa es lo que puede alcanzar la ciencia y la fe, pero existen rincones desconocidos del mundo donde ni la fe ni la ciencia pueden llegar. Para esto, Bacon se basa en la ignorancia que reconoce límites, es decir, en la paradoja que formulaba Sócrates:
''Solo sé que nada sé''
Bacon nos dice que si un niño puede reconocer sus propios límites de su conocimiento, entonces este niño es el más sabio entre todos los sabios. El filósofo cree firmemente que los sabios o grandes exponentes de la filosofía no son necesarios para entender el mundo; de hecho, el mismo Bacon dice que ha conocido mucho más de hombres desconocidos que de filósofos connotados.
Capítulo XI, XII, XIII, XIV: Conocimiento de los filósofos
Bacon dice que el demonio se multiplica por mil por cada hombre que no asume su ignorancia, es decir, que la concede abiertamente. Lo importante siempre es ver el conocimiento de los demás filósofos, es decir, reconoce la ignorancia no quiere decir que no vaya en busca del conocimiento. Un hombre debe ir tras el conocimiento, pero debe buscarlo en las fuentes de los filósofos, aplicando un criterio de investigación.
En efecto, los Padres de Iglesia y los filósofo griegos o musulmanes no eran infalibles. Por ejemplo, el mismo San Agustín de Hipona reprochó muchas cosas a San Jerónimo. También hay que considerar que muchos latinos y muchos árabes no conocieron todos los escritos de la Antigua Grecia.
La Iglesia también comete un grave error si ignora la filosofía, pues esta cede un amplio terreno de conocimiento para todos los cristianos. Bacon nos dice que la Iglesia sólo enseñó el griego porque es parte de las antiguas escrituras, pero recalca que esta también debe aprender las ciencias antiguas.
Capítulo XIV: Exhortación a la filosofía
A partir de que la ignorancia comienza sin ver las fuentes del conocimiento, entonces la exhortación es a leer dichas fuentes. La Iglesia debe por tanto considerar la filosofía como fuente de conocimiento, pero al mismo tiempo Bacon dice que no se le malentienda. Él no dice que se deje las cosas santas sino que se integre la filosofía a la Iglesia.
Conclusión
Verdaderamente es una parte bastante corta sobre la ignorancia del ser humano. Tiene mucho sentido común, aunque no hemos visto algo así en ninguno de las entradas de este blog, de hecho, lo que más hemos visto es la descripción del conocimiento más que la ignorancia de este. Interesante que el filósofo Bacon hay investigado aunque sea a un nivel inicial la ignorancia del ser humano, ya que es importante para el estudio de la epistemología.
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