sábado, 11 de mayo de 2019

Santo Tomás de Aquino - Summa Contra Gentiles (Libro IV: Salvación).


Este es el último libro de la Summa Contra Gentiles el cual versará sobre la  salvación. En efecto, muchas cosas se han dicho sobre la salvación a través de las distintas religiones. Todas ellas tienen un modo especial de ver la salvación, o más bien su propia salvación. Podríamos decir de hecho, que la salvación, hablando en términos religiosos, dependerá de cada cultura en la que se este. Sin embargo, desde que lo veremos en el modo que Santo Tomás de Aquino nos dicta.

SUMMA CONTRA GENTILES


LIBRO IV: SALVACIÓN

Pensadores sobre la Santísima Trinidad


La creencia en la Santísima Trinidad es abordada por Santo Tomás de Aquino a través de los distintos argumentos que otros han hecho de ella. Por supuesto, Santo Tomás cree en la divinidad y en la Santísima Trinidad, pero tendrá que probar sus teorías con respecto a otros pensadores. 

Fotino de Sirmio

Este obispo romano del siglo IV nos dijo que el Hijo provenía de María y de la gracia del Espíritu Santo, así como muchos podrán saberlo. Sin embargo, Fotino de Sirmio añade la excepción de que el Hijo fue adoptado por el Padre, en el sentido de que si el Hijo nació de una mortal y del milagro, entonces este no tenía las cualidades del Padre. Por lo tanto, el que es diferente en la Trinidad es el Padre ya que es divino. 

Este pensador también añade que si el Hijo fuera divino, entonces sería absurdo que estuviera en el vientre de María, sufriera fatigas, sintiera dolor, sintiera hambre y todas aquellas cosas que sufrió en vida. Por lo tanto, el Padre es divino pero el Hijo es mortal. 

Refutación:

Santo Tomás de Aquino nos dice que el Hijo de Dios sí es divino y la prueba de ello es su misma resurrección. Sin embargo, esta resurrección no fue por mérito de él mismo (lo divino no necesita mérito) sino que por Gracia divina. 




Sabelio

Otro de los sacerdotes y teólogos católicos controversiales fue Sabelio. Este aceptaba la Santísima Trinidad, aunque no del mismo modo que todos lo hacen. De hecho, Sabelio fundó una especie de doctrina llamada ''modalismo'' que establecía que había un único Dios que se manifestaba de distintas formas:

  • Padre: en el Antiguo Testamento
  • Hijo: en la resurrección
  • Espíritu Santo: en el Pentecostés

Es así que la fe de Sabelio se mantiene durante el tiempo, aunque también fue acusado de herejía en el siglo III por el papa Calixto. 

Refutación:

De ser así como Sabelio dice, entonces la Santísima Trinidad podría ser perfectamente dividida en parte; por lo tanto, ya no estaríamos hablando de algo divino sino que de algo compuesto. Por lo demás, Sabelio estaría separando la importancia de cada uno de los entes de la Trinidad negando así su unidad. ¿Por qué? porque de ese modo ya no podríamos decir que el Padre está en el Hijo ni el Hijo en el Padre. 



Arrio

Quizás, uno de los sacerdotes más polémicos de Roma, Arrio postulaba que el Hijo no era de ningún modo divino. Era tal una creación de Dios, ya que el Verbo se hizo carne y fue creado con anterioridad a todo. Sin embargo, no podemos decir que es Dios Padre debido a que fue creado. 

Refutación

Arrio nos dice también que el Hijo funciona como cierto agente instrumental para Dios, pero esto no es del todo verdadero. Recordemos algunos pasajes de la biblia:

''Por él (el Verbo) todas las cosas existen''
(Colossenses 1:3-7) 

''Su poder purga los pecados''
(Hebreos 1:3)

Siendo este el poder del Hijo, entonces perfectamente podemos decir que también es divino. De hecho, estos también son los poderes del Padre, por lo que serían iguales de acuerdo a Santo Tomás

Santo Tomás de Aquino y la Santísima Trinidad

En la Santísima Trinidad existen tres personas: Padre, Hijo y Espíritu Santo diferenciadas solo por un tipo de relación. En efecto la relación padre e hijo y el Espíritu Santo que representaría el amor entre ellos. 

Se dice que esto es inentendible por medio de la mente, pero no es cierto porque la mente puede entender la unidad de tres personas en una, o con un poder. Así como el hombre puede representar la fuerza de Hércules con una piedra, entonces puede representar el poder de las tres personas de la Santísima Trinidad en una. 

La encarnación por los pensadores y por Santo Tomás de Aquino

En las Sagradas Escrituras se puede leer cómo es que el Verbo se hizo carne, es decir, cómo es que Jesús nació y habitó entre nosotros (Juan 2:14). Sin embargo, las interpretaciones de este relato varían de pensador en pensador. 

Entre los maniqueos y otros cismas que se han creado en la Iglesia, todos han dicho algo diferente. Los maniqueos sostenían, por ejemplo, que Jesús no era divino sino que tenía una especie de cuerpo fantasma que le permitía hacer cosas que otros no podían. No obstante, este argumento no sería correcto, ya que Jesús sí sufrió en vida, además de realizar otras accione humanas por lo que el argumento quedaría inválido. Debemos pensar que hasta incluso pereció tal como cualquier mortal.

Santo Tomás de Aquino también nos dice que no es correcto entender la naturaleza de Jesús, diciendo que el Verbo se convierte en carne tal cual, ni siquiera usando la palabra ''convertirse'' que corresponde a las cosas compuestas y terrenales. En este sentido, mucho más apropiado sería decir que el Verbo asume forma humana, pero que no se convierte en humano, es decir, no hay generación en él. 

La necesidad de los sacramentos

La muerte de Jesús es un hecho para los cristianos y es necesario que, lo que dejó su muerte sea enseñado a través de los sacramentos de la Iglesia. Todo lo que el hombre recibe de la religión lo hace a través de lo inteligible, para luego replicarlo en lo sensible. 

Estas enseñanzas son descritas en los siguientes sacramentos:

Bautismo

El hombre es culpable del mal al llevar la carga del pecado de Adán. Este pecado acompañará al hombre a lo largo de su vida, pero es el bautismo el que sana esta ''infección'' y por lo tanto, el bautismo no puede ser repetido. Con el bautismo, el hombre ya es conocedor del bien y en consecuencia sabe que no debe hacer el mal. 

Confirmación

Este sacramento es solo conferido por los obispos que en cierto sentido son los cristianos más formados. Estos parecen ser como militares que van reclutando a los soldados para representar a Cristo en un frente de batalla. Es un compromiso que un cristiano debe cumplir. Este sacramento se hace solo una vez. 

Eucaristía

La eucaristía probará ser el modo en que el hombre se complete espiritualmente. Una vez que cumpla con los requisitos de la Eucaristía (como el ayuno, por ejemplo) entonces podrá decirse que dicho hombre, resarciendose de los obstáculos del cuerpo, está más cerca de la espiritualidad que de la terrenalidad. Este sacramento puede hacerse más de una vez para probar la espiritualidad del hombre. 

Penitencias

Teniendo en cuenta de que el hombre puede volver a pecar en su vida, a pesar de haber recibido el bautismo, la penitencia será aquel incentivo que lo guíe nuevamente por el sendero del bien. 

Extremaunción

En este sacramento, el sacerdote unge a los enfermos sin importar el estado en que se encuentren. Generalmente se aplica a los que estén apunto de morir, pero con el tiempo se ha aplicado a todos. 

Órdenes

Este puede ser uno de los sacramentos más honrosos en la vida de un cristiano comprometido, pues es aquí donde se le inviste de un cargo sacerdotal superior. Se dice mucho de que los sacerdotes o eclesiásticos que tuvieron una mala vida no debieran investir una orden, pero como el hombre no es perfecto ni tampoco alguien que no esté tentado, entonces puede investirse si se arrepiente verdaderamente. 

Matrimonio

Teniendo en cuenta que el hombre no es perpetuo, pero que puede perpetuar su propia especie, entonces será necesario que el hombre tome este sacramento para dejar nuevas generaciones de cristianos. 

Estos sacramentos hacen que el hombre afiance su fe en Dios  y en Jesús, dando una oportunidad a aquellos hombres que perdidos en su fe puedan convertirse y volver a ser hijos de Dios. 


Conclusión

Este es el fin de la Summa Contra Gentiles como la conocemos desde sus cuatro libros. Como podemos ver, este es una defensa a los valores cristianos que sirvió como una guía para los misioneros que querían convertir a otros hombres. Santo Tomás de Aquino deja en este complejo manual la ardua tarea a aquellos creyentes que necesiten no solo reafirmar su fe, sino que también a profesar todos los valores del cristianismo medieval. 

<a href="https://www.freepik.es/fotos-vectores-gratis/vintage">Foto de vintage creado por jcomp - www.freepik.es</a>

domingo, 28 de abril de 2019

Las Leyes Romanas (Parte III: Legis actiones)

Legis actiones

Escritas en los contenidos de la Ley de las XII Tablas, las legis actiones encierran un procedimiento solemne entre dos partes litigantes que se presentan a un magistrado para resolver un conflicto o controversia. 

Si bien estas estaban escritas en la Ley de las XII Tablas, la verdad es que las legis actiones pertenecen al período arcaico del derecho, pues estas pertenecen al antiguo derecho quiritario (también llamado ius civile) que surgió en la época de la monarquía etrusca. 

Procesos por las acciones

Generalmente, de las legis actiones se enumeran al menos cinco que corresponden a dos procesos en los procedimientos que inician las partes y el magistrado. 

  1. Legis actio per sacramentum (o vindicatio): acción de ley por apuesta sacramental, es decir, una pena pecuniaria a aquel litigante vencido.
  2. Legis actio per iudici arbitrii postulationem: acción de ley por petición de juez o árbitro, es decir, se pedía la ayuda del pretor para aclarar una acción de tipo divisoria (una herencia por ejemplo). 
  3. Legis actio per conditionem: acción de ley por intimidación o requerimiento, es decir, se hace comparecer a alguien frente al juez. 
  4. Legis actio per manus iniectionem: acción de ley por imposición de la mano, es decir, aprehensión corporal a causa de alguna deuda. 
  5. Legis actio per pignoris capionem: acción de ley por toma de prenda, es decir, el apoderamiento de bienes de un deudor. 

Estas eran las acciones generalmente conocidas en los actos procesales del derecho arcaico, sin embargo, a cada una de estas correspondía un proceso determinado.

Legis actio declarativa y legis actio ejecutiva

Si pudiéramos clasificar las cinco acciones mencionadas anteriormente, entonces debemos hacerlo en cuanto unas son declarativas (el juez se debe pronunciar en la controversia) y ejecutivas (ejecución de una sentencia ya existente).

Legis actio declarativas:

  • Per sacramentum (o vindicatio)
  • Per iudicii arbitrive postulationem
  • Per condictionem

Legis actio ejecutivas

  • Manus iniectio
  • Pignoris capionem

No obstante, esto no es todo pues las acciones y sus correspondientes procesos tienen contenidas en sí mismas dos fases: In Iure y Apud Iudicem.

Para la legis actio declarativa las fases son las siguientes:

In Iure: se establece el derecho aplicado a la controversia.

  1. Citación
  2. Certa Verba: plantear la controversia
  3. El magistrado elige al juez o los jueces
  4. Litis: una vez obtenido los testimonios por terceros se podrá reconstruir los hechos del conflicto, y esto permitirá continuar a la siguiente fase que es Apud Iudicem

Apud Iudicem: el juez determina si los hechos se aplican al derecho

  1. Síntesis de la causa
  2. Alegatos y pruebas
  3. Sentencia según las XII Tablas

Sin embargo, cuando hablamos de la legis actio ejecutiva solo tenemos una fase que es In Iure.
  1. Echazón de mano (manus iniectio)
  2. Toma de prenda (pignoris capionem)


Podríamos decir en otras palabras que el proceso declarativo tiene la característica constatar un derecho, mientras que el proceso ejecutivo exige el cumplimiento de una obligación, donde un derecho indubitado es reconocido pero no cumplido. 

Conclusión

Las legis actiones representan el comienzo de las leyes formales que más adelante conoceremos. Aquí las hemos descrito de manera somera, pues el detalle que tienen cada una de ellas son enormes y probablemente inabarcables en esta entrada tan pequeña. Solo entendamos que estas son las primeras acciones que se consideran en el proceso judicial en Roma. Luego se tornará aun más complejo con otras estructuras que irán sumándose a medida que avanza la historia. 

sábado, 20 de abril de 2019

La Catedral de Notre Dame (1663)

Catedral de Notre Dame

La Catedral de Notre Dame

Características

Es una de las más famosas catedrales de la Edad Media, distinguida por su tamaño, antigüedad, y arqueología así como también de interés arquitectónico. Su fundación se realizó gracias al papa Alejandro III en el año 1163, y el altar más alto que tuvo fue consagrado en el año 1189. La nave y el coro de la iglesia fueron completados en el año 1240.

Tiene 43 metros de altura, 127 metros de longitud y 48 metros de anchura. Llaman la atención sus gárgolas con formas de quimeras expresando el estilo gótico de la época. 

Una de las campanas pesa 13 toneladas y tiene un diámetro de 260m, y su órgano tiene al menos 8.000 tubos. Tiene cinco teclados de 56 notas, 109 juegos y 111 registros. Contiene como un tesoro la supuesta corona de espinas que usó Jesús de Nazareth. 

Escuela de Notre Dame

Durante el siglo XII y XIII, un importante grupo de compositores y cantantes trabajaron bajo el patronazgo de la gran Catedral parisina de Notre Dame. Fueron los primeros en producir música polifónica para ganar prestigio internacional frente a las otras escuelas de música. 

Incendio en la catedral

El 15 de abril del presente año la catedral de Notre Dame sufre un incendio devastador en su aguja central. El proceso fue el siguiente:

  1. Un proyecto de reparación se llevaba a cabo a las 18:50 en la aguja central. Seguramente, un descuido provocó el incendio de la catedral a partir de ese mismo punto
  2. A las 19:53 se desploma la aguja central de la catedral que tiene 93 metros de alto y  250 toneladas de plomo
  3. A las 20:00 el techo completo colapsa

Hoy en día la visitaban entre 12 y 14 millones de personas al año. Tenía 30.000 visitantes por día. Tenía más de 20.000 celebraciones al año. Tenía 5 misas al día y 7 el domingo.

Conclusión

Se supone que el incendio que ocurrió la semana pasada ocurrió por el proyecto de arreglos que estaban realizando en la aguja central. Lo bueno es que muchos empresarios nacionales e internacionales colaboraron con la reconstrucción, ofreciendo donaciones estimadas en 800 millones de euros. Sin embargo, es preciso preguntarnos qué pasaría si un accidente de tamaña envergadura ocurriera en Chile, haciendo el símil con la Catedral de Santiago. El arzobispado de Santiago nos dice que no existe presupuesto fijo para la mantención de dicha Catedral. Es importante mantener estos edificios que no están ahí para asombro superficial del hombre, sino que más bien para mostrar el ingenio y la espiritual de los hombres de la Edad Media. Aquellos que intentaron dejar una gran huella que trascendiera a todos los tiempos. 

Fuente: Diario El Mercurio con fecha 17/04/2019

<a href="https://www.freepik.es/fotos-vectores-gratis/ciudad">Foto de ciudad creado por kstudio - www.freepik.es</a>

Santo Tomás de Aquino - Summa Contra Gentiles (Libro III: La Providencia) (1263)




Este sería el tercer libro de la Summa Contra Gentiles el cual trata un tema interesantísimo entre los amantes de la filosofía: el mal. En efecto, un servidor de Dios no puede estar alejado del problema del mal que en cierto sentido es un concepto muchas veces difícil de aterrizar en nuestras mentes. El maestro religioso de otro tiempo ya nos había dado algunas pistas de lo que era el mal; San Agustín de Hipona diría que el mal no es una sustancia, no es un ser y por lo tanto, es total ausencia del bien. ¿Estará de acuerdo con esto el aquinate? Veámoslo en los siguientes apuntes de filosofía


SUMMA CONTRA GENTILES


Argumentos sobre el mal

El mal como ser

Muchos filósofos (entre ellos San Agustín) han asegurado que el mal es una especie de ausencia, de falta de algo. Sin embargo, otros filósofos aseguraban que el mal en verdad existía.

Es verdad que puede decirse que el bien y el mal son contrarios, y si posicionamos el bien con lo que es verdadero, con lo que existe, entonces tendremos que decir que el mal es falso y que no existe (siguiendo la lógica de San Agustín). No obstante, si el bien es contrario al mal, entonces el mal es una privación o negación pura; esto significa que el mal verdaderamente es algo; de otra manera, no podríamos decir que el mal es lo contrario del bien puesto que es ausencia.

Como dice el estagirita, los contrarios no pueden basarse en un no-ser. El bien y el mal son géneros de las cosas y por lo tanto tienen una existencia. En efecto, estos otros filósofos aseguraban que el mal es una cosa real porque tiene la capacidad de actuar. Si hay mal en el mundo, entonces no puede decirse que el mal es ausencia: todo lo contrario, el mal existe y es real.

El mal como privación

Santo Tomás de Aquino coincide con San Agustín de Hipona de que el mal es una privación. En efecto, para que el mal exista este debe sustentarse en el bien porque el bien otorga la existencia. Por lo tanto, aquello que es malo es malo porque tiene una especie de privación de la perfección.  

En este sentido, podríamos decir que el mismo mal procede del bien ya que el bien tendría la esencia de la existencia de todas las cosas; por lo tanto, el mal depende del bien para existir. 

La felicidad

La felicidad para Santo Tomás de Aquino es un fin y no un medio, por lo tanto, todas la cosas que sean un medio para el hombre, no corresponden a la felicidad.

Es imposible que la felicidad del hombre se concrete a través de lo corporal. A estas ''felicidades'' corporales se les llaman sexo y comida. De hecho, el sexo no es un fin en sí mismo, así como tampoco lo es la comida. El coito es para procrear y la comida para la preservación del cuerpo. Cualquier exceso o disminución del justo medio de estos placeres derivará en la infelicidad. Por lo tanto, la felicidad no está en ninguno de ellos. 

La felicidad tampoco se encontrará en los honores o en la posesión del poder del mundo. Tampoco está en las virtudes morales como bien se podría pensar en el hombre. Para Santo Tomás de Aquino la moral se define de la siguiente manera:

''A través de ella, el medio es preservado en las pasiones internas y en consideración a las cosas externas''

Sin embargo, siendo la moral un medio para preservar otras cosas, entonces el bien moral no puede ser un fin. Sin embargo, tampoco se encuentra en la razón, a pesar de que esta nos ayuda a alcanzar ciertos fines, pero justamente por esto es que no es la felicidad ya que sería otro medio para alcanzar un fin. 

Finalmente, Santo Tomás de Aquino nos dice que de hecho, el fin último como lo es la felicidad no se encuentra en este mundo: se encuentra con Dios. Todo lo de este mundo es un medio para encontrar a Dios en la otra vida. 

Participación en Dios

Por lo dicho anteriormente se puede argumentar que no se puede tener participación en Dios, pero esto puede no ser preciso. Recordemos las historias de la biblia donde algunos profetas podían ver la revelación de Dios a través de los ángeles y otras visiones. Aquellos que contemplan la verdad de todas las cosas, entonces aquellos serán felices.

Al mismo tiempo, Dios gobierna a todos los seres sean generales o particulares. En este sentido, como la causa de todos los seres es Dios, entonces Dios estará en todos ellos. 

Esto no es solo una descripción de qué es la felicidad, sino que podríamos decir que también es una ley. Dios no solo manda a amarlo a él sino que también al prójimo lo que implica que, todos aquellos que tengan el mismo fin deben amarse entre ellos. En este respecto, el hombre está obligado a tener la fe, no hay ninguna justificación para que no siga la fe. 

Matrimonio

El sexo como un acto simple es castigado por Dios porque es considerado pecado. El matrimonio, en cambio, es un acto natural del hombre con la mujer. En efecto, el hombre que tiene sexo desperdicia el semen que se supone es orientado a concebir una criatura. Este acto superficial va contra la naturaleza, al contrario del matrimonio que obedece los preceptos naturales, es decir, para lo que el hombre está hecho. 

Sin embargo, la unión carnal por sí misma no es pecado. Por supuesto, estas son las inclinaciones que Dios puso en el hombre, por lo que llamarlas un ''mal'' no sería correcto. Si el fin del acto carnal es solo la satisfacción, entonces ahí sería pecado. 

Conclusión

En este texto (que es gigante), vemos las tres aristas contempladas por Santo Tomás de Aquino como el mal, la felicidad y la presencia. En efecto, todo esto está conectado en cuanto a que nos debemos alejar del mal para alcanzar la felicidad, pero que dicha felicidad solo está para quienes se acercan a Dios. Estas ideas prevalecerán en la Alta Edad Media para luego culminar poco a poco durante la historia. Sin embargo, estas no pueden rechazarse simplemente, al contrario, hay que acogerlas y pensarlas y repensarlas. 

<a href="https://www.freepik.es/fotos-vectores-gratis/luz">Foto de luz creado por bedneyimages - www.freepik.es</a>

viernes, 19 de abril de 2019

Las Leyes Romanas (Parte II: La Ley de las XII Tablas).

La Ley de las XII Tablas fueron las primeras leyes escritas en Roma.
Fueron hechas en bronce y fueron escritas en latín

La Ley de las XII Tablas

En la entrada anterior habíamos estudiado el concepto de mores maiorum que correspondían a aquellas leyes basadas en la costumbre de los ancestros. Tendrían que pasar algunos años y algunas gestas políticas para que pudiéramos conocer la construcción de la conocida Ley de las XII Tablas que hablaremos a continuación. 

Orígen de las XII Tablas

Como ya sabemos, el mores maiorum era este conocimiento de los ancestros. Los únicos que sabían de estas reglas eran los patricios que utilizaban todas las ventajas de este acuerdo tácito sin escritura. Los tribunos de la plebe comenzaron a exigir más claridad con respecto a estas costumbres de derecho, pero los patricios se resistían. La plebe amenazó con dejar la ciudad de Roma lo que significaría una pérdida tremenda, ya que ellos eran la fuerza laboral del territorio. Los patricios finalmente accederían a dichas peticiones.

Alrededor del año 450 a. C., el decenvirato (magistratura extraordinaria que dispone del poder consular) redactó una nueva ley compuesta de 10 tablas. Se dice que estas tablas fueron inspiradas por la Constitución de Solón de Grecia, pero muchas fuentes descartan esto. 

En el año 449 a. C., el segundo decenvirato completó los últimos dos códigos y es ahí cuando se promulga la Ley de las XII Tablas.

Las leyes en las XII Tablas

Contenido de la Ley de las XII Tablas

Aquí dejamos el título de cada tabla que fue diseñada:

  1. Procedimiento: cortes y juicios
  2. Juicios continuados y robo
  3. Deudas
  4. Derechos del pater sobre la familia
  5. Leyes de tutela y herencia
  6. Adquisición y posesión
  7. Derechos de tierras y crímenes
  8. Agravios y delitos
  9. Ley pública
  10. Ley sacra
  11. Suplemento I: matrimonios
  12. Suplemento II: leyes


Todos estos títulos pueden verse expresados por el concepto de lex (ley en latín), que está dividido en dos:

  • Lex pública: todo lo relacionado con la res pública (Cosa pública o, en términos actuales, República).
  • Lex privata: todo lo relacionado con particulares. 

La lex pública se formaliza mediante el concepto de rogatio que emana del magistrado al populus reunido en los conocidos comicios. La lex sería un acto del magistrado como propuesta a los tribunos de la plebe aunque su consentimiento o aprobación no es indispensable. 

Por otro lado, aparte de las leges publicae tenemos también los plebiscita (plebiscitos) que son emanados del pueblo mismo; sin embargo, estos con el tiempo se mezclaron con las leyes públicas.

Lex y Ius

Perfectamente podríamos preguntarnos cuál es la diferencia entre lex y ius. Si atendemos a la etimología veremos que ''lex'' significa ley y ''ius'' significa derecho, pero estas tienen sus diferencias donde el ius puede ser afectada por la lex. 

El ius lo elaboran los juristas para determinar las conductas correctas o justas y las conductas incorrectas e injustas. En cambio, lex es un acto de potestad que proviene de un mandato imperativo el cual debe ser obedecido por los ciudadanos. En este sentido, la lex es dictada por un magistrado y acatada por los comicios. 

Clasificación de las leyes

De acuerdo con Ulpiano (jurista del siglo IV d. C.), las leyes se puede clasificar de tres formas:

  1. Perfectas (perfectae): impone nulidad del acto prohibido
  2. Menos que perfectas (minus quam perfectae): pena o multa que no requería nulidad
  3. Imperfectas (imperfectae): no imponían sanción alguna

Cabe destacar que estas eran leyes públicas que no podían afectar a las leyes privadas. Por lo tanto, el magistrado no podía elaborar leyes que afectaran a un particular. No obstante, más tarde se crearía lo que se llamó privilegium para aquellas personas que necesitaban protección en contra de los acreedores de una herencia. Por ejemplo, una persona podía acudir al príncipe o a un magistrado cuando veía peligrar su herencia a causa de herederos con malas intenciones. 

Posteriormente al privilegium, un nuevo ius fue creado para proteger a estas personas: el ius singulare que era contrario al ius commune. No obstante, con el tiempo el ius singulare fue desechado, incorporando sus características al ius commune sobre todo en los comienzos de la Edad Media; y por lo tanto, en el corpus iuris civilis.

Laicización de las leyes

Con la promulgación de la lex Aebutia en el año 130 a. C., la creación de las leyes ya no queda a manos de los conocedores pontífices, sino que más bien de los conocedores del ius: los jurisprudentes. 

Conclusión

Parece ser que las leyes romanas comienzan a ser un poco más lógicas y ordenadas que las leyes griegas. Es increíble ver que estas leyes nacieron del clamor del pueblo para que los patricios dieran a conocer ese conocimiento privilegiado solo por algunos. La creación de las XII Tablas marcó un hito en la historia romana tal como lo recordaría Marco Tulio Cicerón, quien decía que estas eran aprendidas de memoria por los niños en las escuelas. Sigamos viendo las leyes romanas durante el desarrollo del Imperio Romano y después de otros personajes que las utilizaran como si fueran suyas...

<a href="https://www.freepik.es/fotos-vectores-gratis/fondo">Foto de fondo creado por photoangel - www.freepik.es</a>

sábado, 13 de abril de 2019

Las Leyes Romanas (Parte I: Mores maiorum)



Las Leyes Romanas (Parte I: Mores maiorum)

En las entradas anteriores vimos el importante desarrollo de las leyes griegas por distintos autores, entre ellos filósofos, trágicos y sofistas. Es hora de que avancemos en el tiempo y veamos la importancia que tuvieron las leyes romanas, que incluso tienen vigencia hasta hoy. 

Mores maiorum

El concepto de ius

En los tiempos más remotos, ius se entendía como ''derecho'' en contraste a la palabra iniuria que significaba  ''tuerto'', pero eso no nos lleva al significado de ius como un acto eminentemente judicial. 

Primitivamente, el ius era considerado un acto de violencia que se representaban en dos tipos:

Vindicatio: apoderamiento de una cosa
Manus iniectio: apoderamiento de un deudor

Podríamos decir que vindicatio deriva de un derecho real (derecho sobre la cosa), mientras que manus iniectio es un derecho personal (derecho sobre una persona). Esto quiere decir que el derecho se concibió primero como una especie de acto de violencia pública. 

Más tarde, este conjunto de reglas pasará a llamarse ius civile o ius quiritium, más conocido como Derecho Quiritario, el cual solo aplicaba a los ciudadanos romanos, no a los extranjeros. 

La costumbre de los ancestros

El conjunto de reglas más antiguo de Roma podemos decir que es el mismísimo Mores Maiorum que significa ''la costumbre de los ancestros''. Estas eran las reglas de la comunidad arcaica de Roma, que también sobrevivieron al inicio de la República e incluso hasta el Imperio. 

Los jueces de aquella época se guiaban por antecedentes de casos anteriores para dictaminar sentencia. Por lo tanto, antes de proseguir un juicio los jueces debían preveer todo lo que vendría a continuación en base a los casos que tenían. En el mores maiorum nada era escrito, es decir, todo era de carácter verbal a partir de los ancestros que comunicaban su sabiduría a los más doctos. Este código se sustentaba en los siguientes principios:

Fides (fe): referida a la fe que se tenía a los dioses y a los ancestros romanos.
Pietas (piedad): piedad que profesaban los dioses tanto a la patria como a los ciudadanos. 
Religio (religión): la unión entre mortales y dioses que establecía una especie de moral. 
Dignitas (dignidad): el ideal del ciudadano romano de apoyar al Estado en diferentes magistraturas.
Auctoritas (autoridad): luego de tener dignitas, el ciudadano romano recibía prestigio y estima. 

Estos jueces que llevaban a cabo las enseñanzas del mores maiorum eran los conocidos pontífices, quienes eran miembros de un antiguo colegio sacerdotal que anunciaban las sentencias de manera oracular, es decir, por designio de los dioses. En pocas palabras, podríamos decir que los romanos tenían prácticamente leyes sostenidas por unos cuantos. 

Nuevas necesidades

Entre el pueblo romano comenzaron a surgir nuevas necesidades en el ámbito político. Los tribunos de la plebe exigían derechos para todos los ciudadanos como tal, y que estos no fueran solo conocimiento de los patricios (quienes conocían las leyes). En este sentido, la sabiduría jurídica (iuris prudentia) era exigida para ser mostrada desde otro tipo de medio: el escrito. 

¿Esto significaría el fin del mores maiorum? No, en efecto, la Ley de las XII tablas solo sería receptora de las costumbres del mores maiorum. El concepto de mores maiorum cambiará  a lo largo de los años, pero se mantendrá dentro de la palabra ''costumbre'', y formará las bases de las leyes romanas por algunos siglos más. La creación de la Ley de las XII Tablas fue realizada en el siglo V (450 a. C.).

Conclusión

En esta breve entrada he querido ver el concepto de mores maiorum que siempre nos es muy desconocido, debido a la poca evidencia que nos dejaron los hombres de aquellos tiempos. Es fascinante pensar que antes de que existiera el derecho como tal primero estaba ya instalado el concepto de costumbre. Me parece muy interesante también que los romanos hayan decidido tener una ley escrita, así como también lo decidieron los judíos. Recordemos a los fariseos y a los saduceos que discutían sobre la escritura de la Torá, la cual obviamente fue escrita debido al apoyo que recibieron los saduceos. 

<a href="https://www.freepik.es/fotos-vectores-gratis/viajes">Foto de viajes creado por yanalya - www.freepik.es</a>

Entendimiento activo

Santo Tomás de Aquino decía que el entendimiento activo
era una luz que Dios encendía en el hombre. 

Entendimiento activo

Los filósofos que hemos visto últimamente se han referido al problema del entendimiento activo. ¿Qué es el entendimiento activo? en este blog, en las lecturas que dimos a Aristóteles, pudimos sacar algunas conclusiones y nociones de qué era el entendimiento activo. Hoy vamos a clarificar qué se entiende por entendimiento activo y entendimiento posible. 

Explicación

Aristóteles

El estagirita hace una distinción entre dos tipos de entendimiento:

  • Entendimiento potencial: tiene en potencia el ser todos los objetos
  • Entendimiento real: el que produce todos los objetos

¿Por qué dividir el entendimiento en dos? recordemos que Aristóteles solía dividir y categorizar tanto los seres como las cosas en dos conceptos: género y especie, lo que también equivaldría a potencia y acto. Para él, el entendimiento no carecería de esta división. 

Aristóteles nos dice además que el entendimiento real es inmortal y eterno. Es en este punto donde se plantea el problema que más tarde discutirán sus sucesores. Veamos algunos de ellos. 

Concepto de entendimiento posteriores a Aristóteles

Alejandro de Afrodisia


Uno de los más grandes comentaristas de Aristóteles postulaba la idea de que aquel entendimiento activo era el mismo Dios, siendo el entendimiento en potencia ese que pertenece al ser humano

Esto hace que una interrogante aún más grande sobresalga: ¿acaso el alma humana no es inmortal? En efecto, si el humano es parte del entendimiento posible y no del real (que lo tiene Dios), entonces no podremos hablar de la inmortalidad del alma. Esto plantea además que el alma del hombre solo estaría supeditada a los sentidos y no a la razón o la psiquis. 

Esta crítica la mantendrán Al Kindi, Al-Farabi, Avicena, Avempace y Maimónides. En todo caso, Avicena estaba de acuerdo en esta crítica solo en parte, ya que para el filósofo árabe, una vez que el hombre muere este se une al entendimiento activo de Dios, a través de la separación del alma con el cuerpo. 

Averroes

El filósofo musulmán Averroes viene a plantear otra solución al concepto. El entendimiento posible (material) estaba separado del alma humana, ya que este sería meramente una disposición del entendimiento activo (real). En este sentido, el hombre tendría como conocimiento una especie de especulación sobre las formas universales que son obstruidas por la materia, y el entendimiento posible. El hombre puede alcanzar la verdad partiendo desde la especulación hasta llegar a formas más abstractas. 

San Alberto Magno y Santo Tomás de Aquino

Estos dos hombres, maestro y alumno, reflexionan sobre las tesis de Alejandro de Afrodisias y de Averroes, criticándolas desde el punto de vista filosófico y cristiano. Por un lado, ambos filósofos dicen que tanto el entendimiento posible como el entendimiento activo están juntos. El entendimiento activo sería una especie de luz que Dios enciende en el ser humano para que este pueda comprender las cosas divinas. En tanto, el entendimiento posible será aquel que lo ayude a comprender las cosas de la naturaleza. 

Si el entendimiento activo fuera una sustancia separada, entonces el hombre no podría comprender las cosas divinas sino que más bien las comprendería la sustancia, lo cual se considera absurdo. El hombre puede comprender las cosas divinas y por lo tanto, el entendimiento activo está en él.

Conclusión

Cabe que este problema ya no es tema de discusión en los grandes debates filosóficos, de hecho, se considera uno de los problemas del aristotelismo que solo podría discutirse poniéndose en ese contexto y conociendo los libros del estagirita. El tema del entendimiento activo fue poco a poco quedándose atrás en la filosofía moderna, para posteriormente desaparecer entre los más sabios como concepto a plantear. Sin embargo, no por esto debemos descartar el conocimiento que nos entregan sobre el entendimiento porque ¿quién sabe? Algún filósofo puede impresionarnos poniendo nuevamente sobre la mesa estos temas de interés espiritual y filosófico, como ya tantos otros lo han hecho. 

<a href="https://www.freepik.es/fotos-vectores-gratis/fondo">Vector de fondo creado por Layerace - www.freepik.es</a>

Abbagnano, N (1993). Diccionario de filosofía. Fondo de Cultura Económica. Ciudad de México: México.