Ser analógico
Si bien este término se venía señalando desde la filosofía aristotélica y platónica, la verdad es que en la Edad Media se utilizó de manera algo distinta. Podríamos decir que en la Edad Media se entendía al ser analógico como una extensión probable del conocimiento.
Avicena
El primero en utilizarlo fue Avicena quien nos decía que existían dos clases de seres: necesarios y posibles. Los necesarios son y no pueden no ser y los posibles pueden no ser, de ahí la distinción entre Dios y los hombres. En este sentido, el ser posible necesita al ser necesario para existir.
Guillermo de Auvernia
El filósofo francés nos decía que el ser de Dios y el ser de las cosas creadas no son idéntico ni tampoco diferentes sino que análogos; se asemejan y corresponden sin tener el mismo significado.
Santo Tomás de Aquino
El aquinate irá más allá diciendo que el ser de las criaturas y el ser de Dios no se corresponden, ya que este último tiene el ser y la esencia unidos, mientras que el resto de las criaturas pueden tener separada su esencia. En efecto, los seres que son creados tienen su ser y luego su esencia.
Solamente Dios tiene el ser por esencia, pues las criaturas tienen el ser por la mera participación de este. Las criaturas son similares a Dios, pero Dios no es similar a ellas.
De aquí también surgen dos tipos de analogías:
- Atribución: la medicina es sana y sano es el animal; la medicina es causa de la salud del animal
- Proporcionalidad: significado entre el ser de Dios y de las otras criaturas
En efecto, cuando se habla de ''sano'' se habla de muchas formas; como adjetivo y como sustantivo. Para llevarlo a un ejemplo más claro y actual veamos estas dos oraciones:
- El banco del parque está roto
- El banco cerró temprano
Estos dos términos se escriben de idéntica manera, es decir, son iguales en cuanto a su escritura, pero en cuanto a su significado semántico son diferentes. Como diría el estagirita: ''el ser se predica de muchas maneras''. Esto es lo que en lenguaje se llama ''polisemia''.
Crítica a la analogía
Duns Escoto fue el mayor crítico de esta teoría analógica que Santo Tomás de Aquino llevó a conocer. De hecho, Duns Escoto nos dice que el ser no es un concepto llevado por analogía, pues este siempre predica la existencia de algo; por ejemplo, si se dice Sócrates es mortal y Dios es inmortal, ambos tienen un concepto unívoco que es el ser (la palabra ''es''). En efecto, esta se entiende a la perfección como dos seres que existen.
Conclusión
Este concepto del ser visto desde la mirada escolástica es sumamente interesante. Pareciera ser que el concepto va adquiriendo más sofisticación al comienzo, pero luego se va simplificando cada vez más como lo hace Duns Escoto. Vamos dejando de lado cada vez más el legado tomista aristotélico.