Sabemos que Boecio es muy conocido por su obra La Consolación de la Filosofía, libro célebre que nace entre el fin del Imperio Romano y el inicio de la Edad Media. Sin embargo, en el ámbito metafísica y lógico, la obra que vamos a emprender es de una importancia capital, sobre todo con su concepto sobre los Universales. Desde Aristóteles, en este blog no hemos escuchado ni hablado sobre la lógica y mucho menos sobre los universales, pero ya es hora de hablarlo directamente.
- Género: ¿qué es el hombre?
- Género: un animal
- Diferencia: ¿cuál animal?
- Especie: racional
Una pregunta de género se contesta con una respuesta de género, y luego la diferencia se responde con la especie.
División y definición
El género puede dividirse tanto en especies como en diferencias. Cuando el género se divide en especie se tiene como resultado el siguiente razonamiento: ''De los animales unos son racionales y otros irracionales. La diferencia radicaría en las palabras ''racional'' e ''irracional''. Por lo tanto, verdaderamente, es la diferencia la que hace que el género se transforme en especie. Podríamos decir que el género es la materia y la diferencia es la forma.
Si queremos llamar a la especie por su propio nombre, la división se hace en especie y no en diferencias. De esto resulta que la definición esté compuesta de varios términos. Claro, si preguntamos ¿qué es el hombre? contestaremos: animal racional mortal.
Definición: animal racional mortal
Sin embargo, bien podríamos quitar el concepto de mortal a la definición y tener al hombre como animal racional. En este caso, la definición estaría completa con la especie ''animal racional'', no habría necesidad de hacer la diferencia con ''mortal''.
De este modo, las divisiones son similares a las definiciones, pues si las divisiones se unen consiguientemente se forman definiciones. No obstante, como las cosas pueden ser unívocas y equívocas, es preferible examinar dichas cosas, siendo las unívocas las del género y las equívocas son las de significado. Pero con todo, es mejor ver los conceptos de unívoco y equívoco y para esto nos es necesaria la definición.
Tipos de diferencias
Hay algunas diferencias que son por sí y otras por accidente. Las transitorias son por ejemplo, estar dormido, estar sentado, estar de pie o estar despierto; las estables, serían los cabellos rizados, los ojos claros, siempre y cuando estos no hayan sido afectados.
En efecto, las transitorias tienen más cercanía con el devenir que aquellas que son estables. Estas dos diferencias pueden ser separadas por el pensamiento. Ahora bien, puede resultar que existan diferencias que no pueden ser separadas por el pensamiento; por ejemplo, que el hombre pueda aprender geometría. Aunque estas diferencias no inhieren totalmente en la sustancia, porque no por no aprender geometría el hombre dejará de ser hombre. De este modo, todas estas diferencias se ponen siempre en la definición de la especie.
Sin embargo, hay cosas que son diferentes pero que no se contraponen, por ejemplo, si decimos ''animal racional bípedo'', las palabras ''racional'' y ''bípedo'' no son en absoluto contrarias. Estas diferencias, que son aquellas que no son contrarias, son las únicas que pueden dividir al género en especie.
Excurso sobre la oposición de las diferencias
Las cuatro oposiciones
Existen cuatro oposiciones:
- Contrarios (bien y el mal)
- Posesión y privación (visión y ceguera)(1)
- Afirmación y negación (Sócrates vive y Sócrates no vive)
- Relación (padre e hijo)
Establecidas estas oposiciones, será necesario ver cómo se divide el género en cada una de ellas, si es que se puede dividir.
Contradicción expresada por afirmación y negación
Boecio nos dice que si bien la primera oposición es la contradicción, esta debe ser establecida en cuanto afirmación y negación. Esta oposición en particular no produce ninguna especie; por ejemplo, si dijera hombre y caballo, ciertamente las dos son especies. Sin embargo, si lo vemos desde el sentido de la afirmación y la negación; por ejemplo, hombre y no-hombre, el no-hombre no es ninguna especie. Esto es porque toda especie necesariamente constituye un ser.
Por lo tanto, la división del género no se puede dar por la negación.
No obstante, cuando se necesita componer la especie se tiene que recurrir a una negación. Pero este procedimiento se debe hacer mediante un nombre simple; por ejemplo, de los números impares, unos son los primos, otros son los no primos.
En consecuencia, cuando la especie no se entiende mediante una sola palabra simple, entonces se deberá recurrir a la negación. De este modo, cuando procedemos a dividir el concepto, es mejor siempre partir por la palabra simple, si es que tiene, de lo contrario, comenzar con la negación. En todo caso, Boecio nos dice que el proceso de dividir el género en negación es más lento que con una palabra simple.
Boecio nos dice que siempre es mejor proceder con lo afirmativo y luego con lo negativo. Igualmente, será mejor comenzar a hablar sobre las cosas que son definidas y luego de las indefinidas. Si queremos conocer aquellas cosas que son indefinidas, será mejor siempre hacerlo por medio de aquellas cosas que son definidas. Hay que hacer, por lo tanto, la definición partiendo desde lo afirmativo y no desde lo negativo, e incluso explicar lo negativo a través de lo afirmativo.
Posesión y privación
Esta oposición es semejante a la anterior. En efecto, la privación niega de algún modo la posesión, aunque difieren porque la negación puede darse siempre y la privación solo puede darse cuando primeramente hubo posesión. La privación no solo priva sino que también dispone aquello que privó; por ejemplo, la ceguera no solo priva de la luz al ojo sino que el ciego se ve afectado también por esta privación.
Por otro lado, la posesión se asemeja con la afirmación y la privación con la negación. Sin embargo, hay casos en que la privación se expresa de modo afirmativo.
Huérfano
Ciego
Viudo
Y otras veces con una partícula de negación que en este caso sería ''in'' o ''des''.
Infinito
Desigual
Boecio nos dice que de todas maneras y al igual que el caso anterior, debemos poner la posesión primero y luego la privación.
Contrarios
Ahora Boecio se propone investigar si la oposición a los contrarios es del mismo tipo que el de la privación y de la posesión. Esto lo dice a propósito de un ejemplo en cuanto al color blanco y negro. ¿Son estos dos colores efectivamente opuestos? Boecio deja esta discusión para después para enfocarse en la división del género.
Es común que se dividan los géneros en aquellas cosas que son contrarias, se piensa que el género es contrario a la especie. En efecto, todo lo que es contrario tiene una diferencia, y la dificultad de ellos es que no todos tienen una dualidad, unos tienen un término medio. Por ejemplo, tenemos el blanco y el negro y aquello que no es ni blanco ni negro.
Toda división se hace con dos términos. Claro, cuando se dice que de los animales unos son racionales y otros irracionales, lógicamente estamos dividiendo el género. La denominación ''animal racional'' es justamente la que calza con la de hombre. Por lo tanto, digamos que animal racional es ''A''. De la A podemos distinguir que hay mortales e inmortales. Cuando queremos decir la definición de hombre, diremos que A es mortal. Por lo tanto, tendremos dos formas de decir una misma cosa.
Hombre:
- Animal racional mortal
- A mortal
De este modo, toda división tiene que necesariamente ser dicotómica.
Relativas
Recordemos que estas divisiones tienen que ver con las relaciones entre padre e hijo; señor, siervo; doble, mitad; sensible, sentido. Si se observan bien, podemos ver que ninguna de ellas tiene una diferencia fundamental, por el contrario, tienen similitud es la fundamental porque sin ella no podrían existir.
Sin embargo, toda división del género debe hacerse de modo tal que el género se excluya, es decir, no puede estar dividido en partes relativas, sino que en partes fundamentales. En cambio, en la relación sigue existiendo el género y por lo tanto sería una división relativa.
Oposiciones adecuadas para dividir
Cuatro son entonces las oposiciones que existen, y ahora Boecio nos explica aquellas que son adecuadas para dividir.
- Afirmación y negación: cuando sea necesario
- Relación: se excluye la división (no hay una división necsaria)
- Posesión y privación: se toman
- Contrarios: se toman
Esta son finalmente, las divisiones correctas que se deben realizar y su conveniencia.
División del género en especies o diferencias
Viendo las distintas divisiones del género ¿en qué se dividen al final del día ¿en especie o en diferencias? Boecio nos da la definición de división:
''Distribución del género en las especies próximas''
En una primera instancia, podríamos decir que la especie siempre podrá ser la división del género, pero existen ocasiones en que no puede hacerse esta división ya que existen algunas especies que son innominadas (aquellas que no se entienden por palabras simples). Por otro lado, los géneros también tienen clasificaciones:
Sustancia: primer género
Cuerpo: segundo género
Animal: tercer género
Por lo tanto, en el caso de que no exista una especie con nombre simple, entonces los géneros deberán ser divididos por diferencias y no por especies. Sin embargo, la diferencia debe realizarse según el género que posee; por ejemplo, la sustancia se divide en corpórea o incorpórea, pero no en animada o inanimada, pues esta diferencia es la del cuerpo.
Convertibilidad de la división
Es necesario que la definición no sea escasa ni superflua. De este modo, la convertibilidad de la división será más clara y podrá ser convertible consigo misma. Por ejemplo, una conversión de la división puede formarse del siguiente modo:
''La virtud es la mejor posesión del espíritu'' y a la inversa ''la mejor posesión del espíritu es la virtud''.
Los géneros se dividen de variadas maneras
Como podemos inferir, la división del género puede darse de muchas maneras, un círculo en semicírculos; los números, en pares e impares.; los triángulos en equilateros, etc.
De alguna forma, el género es la unión de muchas especies que muestra la concordancia sustancial entre ellas. El género sería el unificador de las especies.
Excurso sobre la división de las especies
Por medio de la división del género podemos encontrar la definición. En efecto, al dividir el género y encontrar las especies, podemos definir correctamente los seres. Por eso es necesario estudiar la definición en sí misma.
De lo que no hay definición
¿Hay algo de lo que no puede haber definición? los seres superiores no tienen definición porque no los puede abarcar un género, o en otras palabras, no existen géneros superiores. Esto también ocurriría con los seres más inferiores, los individuos, estos ya carecen de diferencias específicas.
No hay definición en:
- Los seres superiores
- Los individuos
En cambio, aquellas cosas intermedias que tienen tanto género como especie pueden caer dentro de la definición.
Regla de la definición
Las instrucciones para dividir el género son las siguientes:
- Tomar el género
- Dividir las diferencias del género
- Añadir la diferencia al género
- Ver si esa diferencia unida al género puede ser igual que la especie que se ha propuesto circunscribir con la definición
Si la especie es menor, entonces la diferencia que se añadió al género se pone a la vez como género, y la dividimos en sus otras diferencias, y luego juntamos todas estas diferencias con el género superior. Si se igualó la especie, entonces se alcanzó la definición d la especie.
Todas las diferencias se deben juntar y si estas más el género son iguales a la especie que se define, entonces ahí encontraremos la definición.
La definición de nombre
Para explicar este de mejor manera, Boecio recurre a usar un ejemplo con la palabra nombre. Esta palabra pareciera tener muchas especies a las que el mismo filósofo llama ''individuos''. Define nombre de la siguiente manera: el género de la voz.
Una voz que se divide en unas con significado y otras no. La voz significativa no tiene nada que ver con el nombre, pues es el nombre el que significa. El procedimiento es, por tanto, tomar la diferencia que sería ''significativa'' y la une al género para que finalmente quede así: ''voz significativa''. Ahora se procede a comprobar si el género y la especie coinciden en el nombre, es decir, si ''voz'' y ''significativa'' constituyen un nombre.
No obstante, Boecio llega a la conclusión de que no, pues un una voz puede ser significativa y no ser un nombre. En efecto, ciertas voces como las interjecciones, las cuales expresan dolor y otras pasiones.
Luego, esta voz significativa puede dividirse en dos: aquellas que son impuestas por el hombre y aquellas que son por naturaleza. Sin embargo, esta última no tiene nada que ver con el nombre, mientras que la voz creada por el hombre sí tiene vínculo con el nombre. Después, se une la diferencia ''significativa'', ''por imposición'' al género voz y se define:
''Nombres es una voz significativa por imposición''
No obstante, Boecio nos dice que esto no equivale a la definición de nombre. Esto porque los verbos también son voces significativas por convención y no son nombres.
En consecuencia, Boecio procede a dividir la diferencia de ''por imposición'' encontrándose con dos divisiones: imposición por tiempo y sin tiempo. Como podemos saber, los nombres son los que no tienen tiempo mientras los verbos son los que sí tienen tiempo. Por lo tanto, la definición cambia estableciéndola así:
''Nombre es una voz significativa por imposición sin tiempo''
Pero a Boecio sigue pareciéndole que esta no es en absoluto una definición correcta de nombre. Esto porque la definición dada es más bien un conjunto de nombres y no un nombre, lo cual ya no se vuelve nombre sino que oración.
Ahora, Boecio se propone dividir la palabra ''sin tiempo'' para encontrar que se divide en ''significar algo por separado'' y ''significar algo en conjunto''. Obviamente, Boecio se inclina por la primera y la definición quedaría así:
''Nombre es voz significativa por convención sin tiempo, que
no tiene ninguna parte que signifique por separado e independientemente''
Veamos la razón de cada separación:
Voz: separación del nombre de otros sonidos
Significativa: separación de aquellos nombres no significativos
Imposición: separación de las voces por naturaleza
Sin tiempo: separación de los verbos
No significan nada por separado: separación de la oración
En esta última hay que aclarar que la oración sí tiene sentido cuando se la separa y analiza palabra por palabra, en cambio, el nombre debe estar dentro de una oración.
El género como todo y parte
El género es un todo en la división, pero una parte en la definición, porque la definición es la unión de las partes en un todo. La división del género, en todo caso, es muy similar a la del género; por ejemplo, la palabra ''animal'' que es un género, a su vez es el todo de la palabra ''hombre''. Ahora bien, puede haber más de un género en una sola palabra; por ejemplo, los géneros animal, mortal y racional, pueden reunirse en la palabra ''hombre''.
Las diferencias también son todos y las divisiones que resultan de ellas en especies son partes. En la división, tanto el género como la diferencia son partes y si la especie es definida, la especie es el todo.
4 La División del Todo
Vamos ahora con la más importante división después de la del género: la del todo.
Tipos de todo
Existen varios tipos de todo
- Continuo: como una línea
- No continuo: el pueblo o un rebaño
- Universal: hombre, caballo, etc.
En este último, estos son todos respecto de sus partes, y de ahí que se considere que el hombre es tanto un todo como una parte si se pone en el pueblo. Por otro lado, también hay un todo en cuanto a las facultades del alma, por ejemplo, la facultad de saber, la facultad de vegetar, etc.
Divisiones del todo continuo
La división del todo continuo no es de gran complejidad, Boecio nos pone el ejemplo del cuerpo del hombre que puede dividirse en partes semejantes (huesos y carne) y desemejantes (manos y pies).
Sin embargo, no toda división ocurre en el acto sino en el alma y la razón.
- División en acto: el vino mezclado con agua
- División en razón: el vino y el agua (esto porque una vez mezcladas no puede separarse)
La división también puede darse tanto en la materia como en la forma.
Divisiones del todo discontinuo y el universal
Divisiones del todo potestativo
Cuando se habla del todo potestativo se refiere a las capacidades que tiene el alma. En efecto, unas capacidades están en el animal y otras en las plantas. La que está en los animales una es racional y otra es sensible. En estas divisiones el alma no es género sino más bien el todo, pero no respecto de la cantidad sino que de la capacidad o algún poder. Esto porque dichas capacidades están en la sustancia del alma, sin embargo, cada alma tiene sus propias facultades, por lo que no podríamos llamar al alma como un género, sino que como un todo.
5 La División de la voz
La división de la voz se hace de tres maneras
Esta puede dividirse en varias significaciones, pero fundamental mente tres:
Ejemplo de las primeras dos podría ser la palabra ''perro'' tanto como especie de animal o una persona que ha traicionado a otra.
El modo es distinto pues sus significaciones dependen de la modalidad en que se entiende. En efecto, la palabra infinito puede entenderse desde la medida, la pluralidad o la especie.
- Medida: el mundo es infinito
- Pluralidad: el cuerpo puede dividirse infinitamente
- Especie: figuras infinitas (el círculo)
Veamos las dos principales en detalle.
Resolución de la equivocidad y la ambigüedad
En cuanto al equívoco, siempre será procedente realizar una división tal que lleguemos hasta una definición exacta (como se hizo anteriormente). En cuanto a la ambigüedad, esta puede darse en el latín de dos maneras:
''Hominem comedere panem''
(el hombre come pan)
En latín puede leerse al revés y sintácticamente podría hacerse, pero semánticamente es aborrecible. Claro, el pan no tiene la calidad de comer al hombre, por lo tanto, ocurre el proceso de desambiguación cuando damos cuenta de las propiedades de cada palabra.
Por otro lado, el equívoco siempre se da en una parte solamente de la oración, mientras que la ambigüedad se da con la oración completa. Ahora bien, esta equivocidad puede dividirse aún más, pues podemos decir: ''hommo vivit'' (el hombre vive) que puede referirse tanto a un hombre verdadero como pintado. Para legar a la verdad se debe dividir este hombre como animal racional y decir:
''El animal racional mortal vive'': verdadero
''La similitud del animal racional mortal vive'': falso
El significado también cambia si se le añaden partículas más pequeñas como artículos o adverbios.
Las ambigüedades también pueden dividirse para alcanzar una aclaración a través de la adición o la disminución. Por ejemplo,
- ''audio graecos vicisse troianos'': oigo griegos venciendo troyanos
- ''audio quod graecos vicisse troianos'': oigo que los griegos vencieron a los troyanos
Por lo tanto, la división de la voz difiere de la voz en género en que la primera debe dividirse entre dos elementos que pueden subdividirse.
6 División de los accidentes
Un ejemplo de división puede considerarse cuando se hace una diferenciación directamente opuesta: un cuerpo blanco y un cuerpo negro. Por lo tanto, la división de los accidentes son verdaderos contrarios unos con otro, se debe tener cuidado de dividir y no encontrar contrarios, pues ahí se estaría dividiendo más bien el género.
Conclusión
En la conclusión que escribe Boecio, este nos dice que el proceso de división no es propio de él sino que ya otros filósofos como los peripatéticos ya lo habían intentando. Luego de dividir los distintos tipos de palabras,é se hace esta división? básicamente como un tema importantísimo de la época, un tema que no fue abordado del todo en el Órganon de Aristóteles, pero de profunda importancia porque se propone analizar si la división de estos conceptos es secundum se (según ella misma) o per accidents.