domingo, 26 de noviembre de 2017

La teoría de la causalidad.

La teoría de la causalidad

Teoría planteada por Aristóteles para explicar la causalidad de los seres de la naturaleza.

Una vez entendida la materia y la forma, ahora se debe proceder a investigar los tipos de causas. Aquí tendremos la definición de cada causa.

Causa material

Esta causa se refiere a lo que está hecha una cosa y por la que sigue siendo. Por ejemplo, el bronce de una estatua y la plata de una copa.

Causa formal

Se entiende como lo que un objeto es. En otras palabras, es la definición de un objeto. Por ejemplo, tal animal es un caballo. 

Causa eficiente

Se refiera a la verdadera fuente de cambio o de reposo de un objeto. Por ejemplo, la causa eficiente de un niño es el hombre, la causa de una mesa es el carpintero.

Causa final

Esta causa se refiere a la existencia de un objeto o para lo cual llegará a ser. Por ejemplo, la causa final de una mesa es para comer sobre ella.

Las causas nombradas anteriormente se dividen en dos grupos: intrínsecas y extrínseca. La primera se refiere a la causa material y formal porque su causa es interior; y la segunda se refiere a la causa eficiente y final porque su causa se debe a algo exterior. 

Desde otro punto de vista, las causas pueden tener aún más sentidos. Pueden verse desde la especie y el género; por ejemplo, el hombre y el médico son causas de la salud; el doble y el número son causas de la octava.

De este modo, surgen dos causas más(2):


  • Causa desde la especie: El médico es causa de la salud
  • Causa desde el género: El hombre es causa de la salud


En todo caso, la idea de estas dos últimas causas es que las dos se refieran a lo mismo. Por ejemplo, que de causas generales surjan cosas generales (del escultor a una estatua) y de causas particulares surjan cosas particulares (un específico escultor a una específica estatua). 

Aquí tenemos un cuadro de las causas:



Estas son al fin, la teoría de la causalidad a la cual se refería Aristóteles. Una idea que perdurará a través de los siglos con algunas modificaciones de otros filósofos. 


Conclusión

La descripción de las causas son importantísimas para comprender la labor del hombre en este mundo es decir ''¿para qué fue hecho?'' Bien podríamos decir que la finalidad de un gato es ser lo más gato que pueda ser, mientras que el ser humano tiene que ser lo más humano que pueda ser. Sin embargo, ¿lo es? el gato lo es todo el tiempo respondiendo a sus instintos naturales, pero el caso del hombre es sumamente distinto ¿Cuál será otro fin del hombre? si es que tiene otro...

sábado, 25 de noviembre de 2017

Avicena - Lógica (Libros I - V: Propiedades de la proposición).

Tal como Aristóteles lo habría hecho en su texto ''El organon'', Avicena hace lo suyo con su libro de lógica basado en los empleos silogísticos del mismo Aristóteles. Uno podría preguntarse porqué los árabes escribieron tanto sobre la filosofía griega aristotélica, y aunque la respuesta es bastante simple, también debemos considerar que los textos de Aristóteles necesitan un nivel de entendimiento muy superior con respecto a muchos otros autores (sobre todo con sus textos de lógica), por lo que la traducción y lo propedéutico de los textos será el mejor método para entenderlos.

Referencias:

(1) El mismo pensamiento tenía Aristóteles, es decir, había un conocimiento pre-existente y uno actualmente existente. 
(2) En palabras de Aristóteles, la definición es aquello que dice la naturaleza de una cosa.
(3) Se entiende mucho mejor en el inglés como la conjunción ''if''. 
(4) Insisto, esto se entiende mucho mejor con el estudio de las oraciones condicionales del inglés.

Definiciones:

(1) Quididad: puede tomarse como un sinónimo de esencia o naturaleza.
(2) Equipolencia: que tiene el mismo valor numérico.

Logica
Observaciones y advertencias 

PRIMER MÉTODO
Los propósitos de la lógica

Pensamiento

Avicena comienza el libro con esta frase:

''La lógica está destinada a dar al ser humano una herramienta canónica la cual lo previene de caer en error en su pensamiento''


El pensamiento como Avicena lo entiende es aquello que resuelve la mente de conceptos que están en la mente a aquellos que no están. El movimiento que se da entre lo que se conoce y lo que no puede ocurrir de manera válida o inválida. Estas últimas muchas veces parecen que son válidas mientras que las válidas no pueden parecer ni ser falsas. 

Capítulo I
Observación: compuestos y simples

Todo lo que es compuesto necesita conocer sus elementos singulares los cuales necesitan conocer a su vez cómo se forman. Es orden debe ser virtuoso y por lo tanto válido para ser consistente. 

¿A qué se refiere con compuestos y simples? los elementos simples de la lógica son las palabras que no son divisibles; por ejemplo, caballo, casa, hombre. En cambio los elementos compuestos son aquellos que se pueden dividir; por ejemplo, el caballo está lejos, la casa es bonita, el hombre es sabio.  

Capítulo II
Advertencia: la necesidad de los lógicos

Hay una cierta relación entre los conceptos y las expresiones que se emplean. Ninguna expresión es ajena al ser humano, al contrario, las expresiones están presentes en todos los hombres. 

Capítulo III:
Advertencia: concepción y asentimiento

Cuando una cosa puede ser conocida como concepto puro; por ejemplo, el concepto de triángulo puede ser al mismo tiempo asentido una vez que es conocido(1). Otras cosas nos son desconocidas por concepción y por lo tanto no deberían tener asentimiento.

Por lo tanto, para que la concepción pueda tener el asentimiento, el hombre necesita primeramente de la explicación y de la prueba que respalde dicha concepción. 

Capítulo IV
Advertencia: la necesidad de los lógicos para conocer la explicación y la prueba

Para encontrar los principios de la explicación se debe recurrir a la definición y para encontrar los principios de la prueba se necesita recurrir al silogismo. Para esto, los lógicos deben empezar por desarrollar los conceptos simples y luego los compuestos. 

Capítulo V
Advertencia: la expresión como signo del concepto

La expresión sirve como matriz al concepto, es decir, la expresión es parte del concepto. Nos indica que será el concepto a desarrollarlo para luego darlo a conocer a quien quiera que se esté hablando.

Capítulo VI
Advertencia: el predicado

El predicado puede entenderse en la siguiente definición:

El triángulo es una figura

Esto no quiere decir que el triángulo tenga la misma realidad que la figura. La verdad es que el triángulo es algo llamado figura, pues todo triángulo es una figura, pero no toda figura es un triángulo. Por lo tanto, el predicado es algo separado del concepto simple. 

Capítulo VII
Advertencia: expresiones simples y compuestas

Expresión simple

La expresión simple puede extraerse de una concepción compuesta; por ejemplo, la palabra ''El sirviente de Dios'' (Abd al-Lāh) puede sonar como una expresión compuesta, pero la palabra ''sirviente'' sería aquella expresión simple que no sería una palabra propia, sino que más bien dependiente.

Expresión compuesta

Para entenderla de mejor manera, la expresión compuesta es también llamada ''frase''. Se divide en dos partes: 

Significación completa: cuando cada parte de la expresión significa algo, sea con un verbo o un sustantivo. 

Significación incompleta: cuando cada parte de la expresión si bien no es inconexa, no aporta mayor significación; por ejemplo, ''en la casa'', ''no un ser humano''. 

Capítulo VIII
Advertencia: expresiones individuales y expresiones universales

Expresión individual

La expresión individual es aquella la cual no puede compartir su esencia con nada más. En otras palabras, la expresión individual se predica de aquello que es esencial; por ejemplo, el nombre ''Zayd'' sería la esencia de lo que conocemos como ''Hombre''.

Expresión universal

La expresión universal es aquella la cual puede compartir su esencia con muchas otras cosas; por ejemplo, si ''Zayd'' es una expresión individual, entonces ''Hombre'' es su expresión universal. 


Capítulo IX
Advertencia: accidente concomitante y accidente separable

Antes de comenzar a definir los tipos de accidentes, primero debemos definir lo que se entiende por esencia que en primera instancia es lo constitutivo de los seres.

Se dice que la esencia es aquel predicado de los sujetos que requiere quididad(2), y que su quididad es parte de él. Por ejemplo, tenemos al sujeto, su quididad y sus componentes:

Sujeto: Zayd
Esencia: hombre
Quididad: humanidad

El concepto de hombre puede modificarse tantas veces se quiera, pero el concepto de quididad es algo inherente al ser humano, por lo que el accidente concomitante sería la quididad y el accidente separado es la esencia. 

Capítulo X
Advertencias: la esencia constitutiva

La quididad puede concebirse como algo unido en el hombre en la realidad, pero también (en algunos casos) se puede concebir en la mente. La esencia puede ser de las dos formas, es decir, o está tanto en la realidad como en la mente; por ejemplo, si la humanidad es una quididad la esencia sería el hombre que es adherida a la quididad. 

Por otro lado, una esencia constitutiva es una existencia constitutiva, sin embargo, bien podríamos preguntarnos ¿cuál es la esencia constitutiva del alma? ¿No es acaso ya una esencia constitutiva? En efecto, el alma es una esencia constitutiva del cuerpo y no tiene existencia concreta (porque no podemos percibir por los cinco sentidos) pero sí tiene una quididad. Por lo tanto, la existencia concreta no es parte esencial constitutiva de la quididad.

Podríamos decir en cierta forma que la quididad no tiene partes o si tuviera sólo podríamos imaginarlas en el alma.

Capítulo XI
Accidente concomitante no-constitutivo (de la quididad)

El accidente concomitante no-constitutivo es algo que acompaña a la quididad sin ser parte de esta. Por ejemplo, los ángulos, las vértices o los lados de un triángulo. Estas pertenecen al triángulo, pero sólo cuando el triángulo está hecho. 

Tampoco podríamos decir que entre la quididad y el accidente hay un intermedio, porque entonces la quididad tendría accidentes adheridos doblemente. Además, si existieran los intermedios, entonces habría un regreso de accidentes infinitos.

Capítulo XII
Advertencia: accidente no-concomitante

Por supuesto, los accidentes no-concomitantes son aquellos que no necesariamente van unidos; por ejemplo, que el hombre esté sentado, parado, que sea joven o viejo. Los predicados son los accidentes no-concomitantes porque el predicado puede tener cualquier transformación. 

Capítulo XIII
Advertencia: lo accidental

Por supuesto, lo accidental es lo que pertenece a la esencia pero no es constitutivo de ella. Lo esencial es lo que no se separa y lo que es no-concomitante con un accidente. 

Capítulo XIV
Advertencia: lo esencial en otro sentido

Los esencial también puede considerarse como algo que es inherente a un objeto. Por ejemplo, lo par e impar de los números, es decir, estos serían considerados como esencias de los números. Avicena llama a estos accidentes esenciales y para esto hace la diferencia de un cuerpo con la blancura del mismo. 

Capítulo XV
Advertencia: respondiendo a la pregunta ¿qué es esto?

Los lógicos encuentran una especie de dificultad al responder a la pregunta ¿Qué es esto? pues, si queremos responder ¿Quién es Zayd? responderemos que es un animal que sería uno de los géneros más grande que existe para definir. Por lo tanto, para responder correctamente a esta pregunta deberemos acudir a la quididad. Por ejemplo: ¿qué es esto? es un humano, es una criatura, etc.

La pregunta ¿qué es esto? corresponde también a las preguntas ¿cuál es su esencia? ¿cuál es la comprensión de su nombre?

Capítulo XVI
Advertencias: las distintas respuestas para la pregunta ¿qué es esto?

Ahora, podemos responder a la pregunta con una definición correspondiente a la quididad; por ejemplo, ¿qué es esto? es un animal racional (que es la otra forma de decir que su quididad es un ser humano). 


SEGUNDO MÉTODO
Definición y demostración

Capítulo I
Advertencia: respuesta a la pregunta ¿qué es esto? según el género y la especie

Siguiendo la tradición aristotélica Avicena engloba los dos conceptos de género y especie. Por supuesto, genero es lo más general como decir ''animal'', ''planta'' o ''roca'', mientras que lo que se entiende por especie será ''perro'', ''pasto'' o ''guijarro''. 


Capítulo II
Advertencia: los arreglos del género y de la especie

Tanto el género como la especie son finitos, ninguno puede conceptualizarse indefinidamente. Puede uno preguntarse sobre las cosas abstractas que están en el género y la especie, así como los intermedios que existen entre ellos, pero eso no es tarea de los lógicos porque esto corresponde a los metafísicos de resolver. 

Capítulo III
Advertencia: sobre la diferencia

Todos los géneros y especies tienen propiedades constitutivas distintas, por ejemplo, entre los animales tenemos los racionales y los irracionales. Podríamos ir aumentando el espectro si hablamos de plantas y rocas, y podríamos aumentarlo aún más si hablamos de ''seres'' de por sí. Por supuesto, las especies se diferencian aún más entre ellas puesto que son más específicas. 

Capítulo IV
Advertencia: propiedad del accidente común

La diferencia sí es concomitante con el accidente, mientras que la propiedad es un elemento no-constitutivo de la esencia. La propiedad puede entenderse de dos formas; por ejemplo, la capacidad de reír no es constitutivo de la esencia, pero sí lo son los ángulos y los vértices. 

Las propiedades que son mejores son las que están más cerca de la sustancia o esencia; por ejemplo, la propiedad de ser un ser humano, o de tener ángulos y vértices. Los accidentes, por otro lado, son las propiedades que pueden modificarse; por ejemplo, negro, blanco, azul, etc.

Sin embargo, también pueden entenderse de manera conjunta porque ''caminar'' y ''comer'' están entre las propiedades de ser animal, mientras que también pertenece a los accidentes comunes. 

Capítulo V
A tener en cuenta

El género, la especie, la diferencia, la propiedad y el accidente común pueden compartir el predicado en una definición de todos los particulares que caen dentro de él.

Capítulo VI
Advertencia: Descripción de los cinco términos

Género

Es descrito como un predicado universal de cosas que tienen diferentes realidades sobre todo cuando se pregunta ¿Qué es esto?

Especie

Tiene dos acepciones: una es que es un predicado universal de una cosa que no difiere excepto en número en respuesta a la pregunta ¿qué es esto?

Por otro lado, también es un universal del cual el género es predicado de manera esencial.

Diferencia

Es el predicado universal de una cosa en respuesta a la pregunta ¿qué cosa es en su sustancia?

Propiedad

Es descrito como un universal de un estado no-esencial del cual cae en una sola realidad. 

Accidente común 

Es descrito como un universal de un estado no-esencial que cae en una sola realidad, pero también en otras. 

Capítulo VII
Advertencia: definición

La definición es una frase que significa a la quididad de una cosa. Es imposible que una definición no esté compuesta de género o diferencia, puesto que estos dos son la esencia de cada término(2)

Por ejemplo, la palabra ''ser humano'' ya hace distinción de muchas otras cosas sin tener nada más adicional, sin embargo, si yo quiero hacer más diferencias puedo ampliar el espectro debo recurrir a la definición diciendo: ''el ser humano es un animal mortal y racional''.

Capítulo VIII
Advertencia: engaño y consideración

Las definiciones deben estar acotadas a lo esencial y no puede existir en ellas ni brevedad (o más bien reducción) ni prolongación. Cualquiera de estas dos que se encuentre en una definición puede ser tomada como engaño. 


Capítulo IX
Descripción

Las descripciones están hechas de géneros, accidentes y propiedades que entregan mayor información sobre un concepto. Puede existir una descripción sin género, pero sería una descripción incompleta por lo que necesitamos un género sin importar qué descripción sea. 

La mejor descripción siempre comenzará definiendo el género y después los accidentes como añadidura. 

Capítulo X
Advertencia: errores que surgen de la definición y la descripción

Es absurdo que se utilicen metáforas o conceptos figurativos en las definiciones. Este puede ser uno de los errores más frecuentes, aunque si se utiliza en la poesía no habría problema. Avicena presenta aquí los errores típicos de definición:

Por contrariedad

También ocurren errores en la identificación de una definición cuando se quieren usar contrariedades por ejemplo, en la definición de un número par como ''lo que no es impar''.

Por supuesta semejanza

Cuando se quiere usar metáforas para comparar dos cosas que en un sentido figurado podrían servir; por ejemplo, ''el fuego es el elemento que nos recuerda el alma''.

Por sí misma

Cuando se quiere definir algo por propiedades; por ejemplo, ''el movimiento es transferencia'' o ''el ser humano es un ser racional''.

Por aproximación

Cuando se trata de definir algo con un concepto que es un poco más semejante; por ejemplo, ''dos es un número par''. Aquí se nos puede conducir a confusión porque primero se debe resolver qué es lo par. 

Por negligencia (o repetición)

Cuando derechamente se trata de definir algo de manera errónea; por ejemplo, ''El número es una pluralidad formada de un grupo de unidades'' o ''El ser humano es un animal corpóreo''. En el primer caso, ''un grupo de unidades'' es  a su vez una pluralidad, por lo tanto, es innecesario mencionarlo. En el segundo caso, ''animal corpóreo'' ya es todo tipo de ser por lo que es innecesario mencionarlo.

TERCER MÉTODO
Proposiciones asertivas

Estas son las proposiciones con las que directamente se sabe que es verdad y qué es mentira. Los tipos de proposiciones son tres:

Predicativa (1era)

Este tipo de proposiciones se notan por su afirmación y negación; por ejemplo, ''el ser humano es animal'' o ''el ser humano no es animal''. Por supuesto de estas dos una es la mentira. 

Condicional (2nda y 3era)

Aquellas proposiciones que surgen cuando se añade la conjunción ''y'' por necesidad, o también puede añadirse la conjunción ''o'' para dar opción. 

Luego tenemos otra condicional que Avicena llama ''condicional conectiva'' y Aristóteles llamaría ''proposición hipotética''. 

Frente a estas también habría una cuarta proposición que sería la llamada ''proposición disyuntiva''. Esta se forma por la conjunción ''Si''(3).

Capítulo II
Afirmación y negación

La afirmación y la negación comparten algo en común que sería el objeto de la verdad. Por ejemplo, una afirmación verdadera sería decir el hombre es un ser humano y una negación verdadera sería decir el hombre no es una piedra. 

También está la afirmación conectiva que se formaría por medio de los condicionales. Por ejemplo:

''Si ganara la lotería, me compraría una casa''

La primera parte de la oración, es decir, ''si ganara la lotería'' es el antecedente de la oración mientras que ''me compraría una casa'' sería el consecuente de la oración(4). La negación conectiva se entendería del mismo modo pero en negación.

También existe la condicional disyuntiva en su manera afirmativa y negativa; por ejemplo, ''sea este número par o impar''.

Capítulo III
Advertencia: singularidad, indefinición y definición

Singularidad

Si una proposición es predicativa y su sujeto es particular, a esto es lo que llamamos ''singularidad'' sea afirmativa o negativa. Por ejemplo, ''Zayd es escritor'' o ''Zayd no es escritor''.

Indefinición

Sucede cuando la universalidad o particularidad de un sujeto no está clara; por ejemplo, ''el ser humano está perdido''.

Definición

Sucede cuando acotamos una oración, sea esta universal o particular; por ejemplo, ''todo ser humano es un animal''.

Capítulo IV y V
Advertencia: juicio de la proposición indefinida

Ya vemos que no es necesario que una universalización tenga cantidad, pùes el sólo hecho de decir ''ser humano'' ya aplica a una universalidad sin necesidad de tener que indicar un número. Por lo tanto, la proposición indefinida no necesita número.

También existe indefinición y definición en las proposiciones condicionales, además de tener particularidad y universalidad; por ejemplo ''Cada vez que el sol sale, comienza un nuevo día'' puede tomarse en su acepción universal, así como otras en particular. 

Capítulo VI
Advertencia: proposiciones condicionales y predicativas

Las oraciones predicativas son analizadas desde sus partes., mientras que las proposiciones condicionales son analizadas como un todo; de hecho, dentro de las proposiciones predicativas se encuentran las condicionales si es que están en conjunto. 

Capítulo VII
Advertencia: equipolencia(2) y positividad

Pongamos un ejemplo práctico con una partícula negativa: ''Zayd no ve'' aquí tenemos en cierto modo una positividad dentro de la negación. Al mismo tiempo, esta misma afirmación podemos volverla no-positiva ''Zayd no está no viendo'' lo que quiere decir que sí ve. 

Esta no-positividad es lo que se llama ''equipolencia'', por ejemplo, lo equivalente a ciego es no-vidente. Si es usa la palabra no-vidente en una oración entonces ocurrirá la equipolencia con la palabra ''ciego''.

Capítulo VIII
Advertencias: proposiciones condicionales

Las condicionales disyuntivas y conectivas pueden estar compuestas de proposiciones condicionales, predicativas o ambas; por ejemplo, ''Cuando el sol está afuera, es de día. Entonces, cada vez que el sol está afuera es de día; y si no, no es de día''. Aquí hemos creado una oración condicional conectiva, compuesta de una condicional disyuntiva.

Capítulo IX
Advertencias: disposiciones que acompañan proposiciones

La disposición en la proposición puede verse reflejada en la siguiente oración:

''El ser humano no es otra cosa que una criatura racional''

El concepto de ser humano no significaría nada más que ''criatura racional'' y que no merece otro significado. Por lo tanto, la expresiones como ''sólo'', ''excepto'' o ''únicamente'' sin las disposiciones que a veces sirven a las proposiciones. Sin embargo, esto nos puede llevar a error si aplicamos a otras cosas; por ejemplo, decir ''hombre no es más que una palabra''. 

CUARTO MÉTODO
Modos de la proposición

Capítulo I
Advertencia: importancia de la proposición

Las condiciones para que se de una proposición son las siguientes:

  1. Existencia necesaria de lo que se está hablando (el hombre es animal).
  2. Existencia no necesaria de lo que se está hablando (el hombre es escritor).
  3. Inexistencia necesaria de lo que se está hablando (el hombre es piedra).
En resumen, tenemos tres conceptos que nos pueden ayudar a entender una proposición: necesariedad, posibilidad e imposibilidad. Estas condiciones de la proposición Avicena las llama ''materias'' en el sentido de que las proposiciones tuvieran cuerpo.

Capítulo II
Advertencia: diferencia entre una proposición absoluta y otra necesaria

Las proposiciones son absolutas cuando consideran una afirmación o una negación completa de lo que se está hablando. A partir de esto, las proposiciones pueden distinguirse de la siguiente manera:

  1. Necesidad: absoluta duración de una cosa. 
  2. Duración: puede existir independiente de la necesidad.
  3. Temporalidad: puede ser tanto necesaria como dependiente. 

Por otro lado, la necesidad puede estar conectada con lo que existe perenne (como dios o el tiempo), o puede estar relacionado con la condición (por ejemplo, decir que el hombre necesariamente tiene cuerpo).  

Capítulo III
Advertencia: los modos de la posibilidad

Por posibilidad se entiende lo siguiente:

  1. Negación de la imposibilidad en sentido general.
  2. Negación de la imposibilidad en la existencia.
  3. Negación de cualquier tipo de posibilidad.
  4. Negación de la necesidad futura.

Se debe identificar bien lo que puede y no puede existir, ya que la equivocación podría conllevar una proposición universal. Cuando algo es probable hay menos riesgo de equivocarse. 

Capítulo IV
Advertencias: condiciones para los modos

La necesidad no previene a la posibilidad, pues para que algo sea necesario debe ser posible. Si es así, entonces la necesidad condicional también estará dentro de la posibilidad. La necesariedad puede ser afirmada y negada por medio de la posibilidad. 

Capítulo V
Advertencias: afirmación universal

Entendamos la afirmación universal de la siguiente manera:

Todo C es B. Esto no quiere decir que la universalidad de C es B, sino que C calificará a B como si fuera una sustancia externa. Puede calificarla para siempre o sólo por un tiempo. También, debido a la posibilidad, podríamos decir que B puede ser C, así como también puede existir un absolutismo cuando se dice ''C es B en todo momento incluso hasta el momento primero de su existencia''. 

Capítulo VI
Advertencias: negativo universal

Tengamos el mismo ejemplo del capítulo anterior pero negativamente. 

''Ningún C es B''. Esto quiere decir que nada que sea descrito como C puede ser B ni nada como B puede ser descrito como C. Sin embargo, esta proposición también tiene una cierta duración (sea de siempre o temporal) por lo que no es absoluta. 

Una negación absoluta sería decir ''Todo C no es B'' o ''B es negada de toda C''. Estas dos proposiciones no hacen distinción de tiempo. Ahora, Avicena nos dice que aún mejor es la negación de decir ''Nada de C es B'' lo cual sería un negativo absoluto. 

Capítulo VII
Consejo: modo absoluto y predicado

Exista lo absoluto del modo y lo absoluto de la predicación. El primero se entiende como aquello que es probable pensar; por ejemplo, cuando se dice que ''todo ser humano es blanco'', pero esto no puede ser un predicado. Cuando se dice ''Todo animal se un ser humano'' también hablamos de un modo absoluto y por lo tanto tampoco puede ser predicado. Lo que sí puede ser predicado sería decir ''Todo ser humano es animal''. 

Capítulo VIII
Advertencias: proposiciones particulares y su modo

Veamos ahora una proposición particular:

''Algún C es B''. En realidad, muchas diferencias no existen en esta proposición pues es absolutamente lo que es. Es completamente verdadera sin ningún reparo, como si las tienen las universales. 

Capítulo IX
Implicación de la proposición modal

Las implicaciones de las proposiciones se ven en las palabras ''por necesidad'' o ''posibilidad''. 

En el primero ''por necesidad'' es equivalente a decir ''es imposible que esto no...'', mientras que la frase ''por necesidad esto no...'' es equivalente a decir ''no es posible que esto...''.

Capítulo X
Engaño y consejo

Hay quienes dicen lo siguiente

''Si la necesariedad en la existencia es posible de ser, y si lo posible de ser es posible de no-ser, entonces lo necesario en existencia es posible de no-ser''

Luego dicen:

''Si la necesidad en la existencia no es posible de ser, y si lo que no es posible es imposible de ser, entonces necesariamente es imposible de ser''

El problema está en que siendo la existencia algo que existe necesariamente, con este silogismo se vuelve algo que es posible de no-ser. El tema es que la necesidad que es posible en existencia, no necesariamente implica imposibilidad, de hecho la posibilidad indica eso mismo de lo que es ''posible''; por lo tanto, cuando se habla de necesariedad de ser no adopta una esencia imposible.

Lo posible siempre estará del lado de lo positivo antes que de lo negativo. 

QUINTO MÉTODO
Contradicción y conversión en las proposiciones

Contradicción

La contradicción se da entre dos proposiciones, una que niega y la otra que afirma. Tanto lo falso como lo verdadero están en las proposiciones y se debe despejar la falsedad de aquella proposición. Sólo hay oposición entre las dos cuando se niega lo verdadero.

Las partes que una proposición debiera tener son las siguientes:

  1. Sujeto y predicado
  2. Condición y relación
  3. Parte y entero
  4. Potencia y acto
  5. Lugar y tiempo

Las contradicciones y falsedades siempre se dan en las proposiciones universales; por ejemplo:

PU1: ''Todos los seres humanos son escritores''
PU2: ''Ningún ser humano es escritor''

Pero cuando se da una proposición que no es universal sino particular, entonces tenemos una perspectiva distinta:

PP: ''Algunos seres humanos son escritores''
PP: ''Algunos seres humanos no son escritores''

Ahora podemos comparar los dos tipos de proposiciones y probar que las particulares pueden estar equivocadas. 

PU1: ''Todo ser humano es animal''
PP1: ''Algunos seres humanos son animales''

PU2: ''Todo ser humano es escritor''
PP2: ''Algunos seres humanos no son escritores''

PU3: ''Todo ser humano es una piedra''
PP3: ''Algunos seres humanos no son piedra''

Esta ha sido la demostración para probar que en toda proposición puede haber falsedad. Claro, es más probable caer en en falsedad en una proposición universal que una particular. 


Capítulo I
Advertencias: contradicción entre proposiciones absolutas y proposiciones concretas

La contradicción surge cuando tenemos dos proposiciones como las siguientes:

PU1: Todo C es B
PP1: Algún C es B

La proposición particular es contraria a la proposición absoluta o universal. Una de las dos tiene que ser la verdadera si se aplicaran en oraciones. Más aún, para que la contradicción sea aún más notoria, a la PU1 se le añadiría ''siempre''; por ejemplo, ''Todo C es siempre B''.

Por otro lado, debemos recordar que la proposición ''Todo C es B'' será verdadera cuando toda B sea C en todo tiempo y lugar, porque si B llegara a ser algo que no es C, entonces la proposición sería falsa. Tendríamos que decir bajo ese respecto un absoluto particular que sería decir ''Algún C es B''.

Capítulo III
Advertencias: otras contradicciones

Ahora tenemos aquellas otras proposiciones que son por necesidad; por ejemplo, ''por necesidad, todo C es B'' que tendría su contrario ''No por necesidad todo C es B'' por supuesto, entre estas proposiciones funciona el factor probabilidad que puede confundir. 

Capítulo IV
Advertencias: conversión de proposiciones absolutas

Conversión es tomar el predicado y hacerlo sujeto, o tomar el sujeto y hacerlo predicado, manteniendo lo verdadero o lo falso de la proposición. 

Por ejemplo, muchos pueden decir que todo ser humano ríe, pero no se puede decir que lo que se ríe es un ser humano. Veámoslo más teóricamente.

''Nada de C es B''. Supongamos que esto es verdadero y que su contrario sea ''Algún C es B''. Digamos ahora que está D que será igual que B y C al mismo tiempo, así deberíamos decir que Algo de C es B, puesto que dentro estaría D. 

Una proposición absoluta sólo puede convertirse en una proposición general que sea capaz de recibir necesidad. Por ejemplo, si tenemos el concepto de respiración podemos entenderlo sin predicado, pero el predicado necesitará de un sujeto siempre. Lo otro también sería que una proposición absoluta general pueda convertirse en una particular; por ejemplo, si decimos que ahora algunos ríen (particular) podemos decir que el resto no ríe (absoluto). 

En resumen, cuando queremos hacer una conversión y decir ''Ninguna A es B'' podría ser un error decir ''Ninguna B es A'', puesto que B puede ser tomada como particular y A como general. 

Capítulo V
Advertencias: conversión de las proposiciones necesarias

Un negativo universal necesario se convierte en sí mismo, por ejemplo, si B fuera negada necesariamente de toda C, y si fuera posible encontrar alguna B la cual es C y suponiendo que esto es así; entonces alguna C es B. 

Sin embargo, esto no es posible porque se están afirmando dos cosas contrarias: la negación necesaria y la posibilidad de una proposición. 

Por otro lado, la proposición negativa particular no tiene conversión por lo siguiente: ''Por necesidad no todo animal es un ser humano'' en esta oración no habría nada que cambiar y por lo tanto no hay conversión. 



Conclusión

Podríamos decir que ésta es la primera introducción a la lógica de Aristóteles. En todo caso, en mi opinión, Avicena explica de manera más concreta y práctica lo dicho por Aristóteles en el organon. Por lo demás, hemos estado viendo la lógica desde lo más particular hasta lo más general porque en los próximos libros veremos que la segunda parte de la lógica trae la composición de los silogismos. Por ahora tengamos en cuenta todas las definiciones y conceptos del libro presente. 

viernes, 24 de noviembre de 2017

Avicena - El Libro de la Curación (Física) (Libro IV: Movimiento y accidente).

Una vez vista las propiedades de los seres, falta analizar los accidentes del movimiento y los accidentes en general. Debo decir que es tremendamente necesario haber revisado los libros anteriores sobre el movimiento para tener una mejor perspectiva de lo que se hablará en el presente libro. Cabe destacar que este el ''último libro'' (el resto de los libros no se han recuperado) de este tratado más físico que filosófico de Avicena. De todos modos, esto ha sido lo que ha inspirado la Edad Media durante la historia de su pensamiento. 

 El Libro de la Curacion

LIBRO IV: ACCIDENTES Y MOVIMIENTO

Capítulos I y II: Movimiento como numéricamente uno


Movimiento como uno

Hay tres formas en que el movimiento se entiende:

Número: Parménides y Platón decía que el Uno no era sometido a movimiento, pero esto ya se ha rebatido con la existencia del instante. Avicena dice además que el movimiento es uno con respecto a un sujeto que se mueve a cierta distancia y tiempo.

No obstante, el movimiento puede ser numéricamente uno pero también puede ser más; por ejemplo, el calentamiento sería un sólo movimiento, pero comparado con otro calentamiento (más rápido o más lento) entonces podrían considerarse dos simultáneamente, es decir, sólo puede ser más de uno por comparación pero no por sí mismo. 

Capítulo III: Movimiento como genero y especie

Sabemos que hay un género y especie en cada cosa; por ejemplo, la nieve y la hoja de bloc tienen el color blanco como género (blancura), pero también tienen una blancura específica. En el movimiento, la especie es mucho más notoria debido a su comienzo y su término; por ejemplo, el movimiento rectilíneo y el movimiento circular. 

En este sentido, la especie del movimiento se identifica cuando se habla de un comienzo y un término, mientras que el movimiento en sí mismo sería el género. Incluso, el movimiento podría considerarse uno como género en la velocidad, por ejemplo, ya sea que dos objetos se mueven a velocidad distinta, los dos recorrerán la misma distancia. 


Capítulo IV: El movimiento como uno solo

Existen aquellos que dicen que el movimiento puede ser dividido en pasado y en futuro. Sin embargo, Avicena considera que esto es falso, porque, si bien no es divisible en ellos, el movimiento está entre ellos. Además, el movimiento no puede ser concebido como uno sólo si no ha terminado. 

Podríamos decir también que el movimiento como uno solo se compara a lo que es la forma en comparación con la potencia. Por ejemplo, todo lo que sentimos es aquello que se percibe por la materia, mientras aquello que percibimos por la mente es la forma; así, la luz cuando la sentimos estaría en materia, y si se apagara, en nuestra mente quedaría impreso el ''recuerdo'' de la forma de la luz.

Capítulo V: Los movimientos que están y no están en concierto

Para analizar los movimientos que están y no están en concierto se deben analizarlos a partir de la velocidad y de los accidentes. Veámoslo desde los accidentes:

Cantidad

Hay dos tipos de cantidades: cantidad de forma y cantidad de potencia. Se da la cantidad de forma cuando los dos movimientos coinciden el uno con el otro, además de tener un punto de término igual. Luego se da la cantidad de potencia cuando dos magnitudes no coinciden en su medición, por ejemplo, el movimiento circular no coincide con el rectilíneo. No obstante, en este último ejemplo debe existir cierta igualdad ¿cómo entendemos esa igualdad? con respecto a que los dos tienen una trayectoria que recorrer, si esta trayectoria coincide entonces son iguales aunque el uno sea más corto que el otro. 

Cualitativa

En la cualidad se da cuando hablamos de que algo sanó más rápido que otra cosa, o cuando algo tiene más filo que otra cosa (un cuchillo con respecto a una piedra, por ejemplo). Todo lo que tenga que ver con el ''movimiento'' de alteración tiene que ver con la cualidad. 


Capítulo VI: Los distintos movimientos


Hay tres tipos de movimientos según Avicena: locomoción, alteración y aumento. La locomoción es el simple movimiento rectilíneo o circular de un punto hacia otro. La alteración se ve reflejada en el proceso de cambiar de blanco a negro.   El aumento (y la disminución) se ve reflejada en el proceso de engrandecer y empequeñecer. 

La otra forma en que difiere un movimiento de otro es a través de la naturaleza (se mueve por sí mismo) y de la fuerza (otro más la mueve).  

Los movimientos pueden ser contrarios en un sentido: es cuando este tiene un punto de partida y punto final, por ejemplo, negro y blanco son contrarios y son dados por el movimiento, mientras que el proceso de pasar de negro a blanco (el movimiento mismo) no es contrario a ningún otro tipo de movimiento. Por lo tanto, los movimientos contrarios son aquellos que conducen necesariamente a contrarios (de blanco a negro y viceversa).


Capítulo VII: La contrariedad del reposo con respecto del movimiento

Nos es obvio que el reposo es contrario al movimiento, ya que en el reposo no hay tiempo. El reposo tampoco depende de un punto de partida ni de un punto final, así como tampoco está sometido al cambio de alteración como de blancura a negrura, o frío y caliente. 

Sin embargo, el reposo si puede ser considerado como arriba o abajo mientras esto no involucre un cambio; por ejemplo, un objeto puede estar arriba en reposo, o abajo en reposo. Por otro lado, el reposo se considera como la corrupción del movimiento, ya que lo altera, lo saca del estado de su naturalidad. Finalmente, el reposo también es absoluta privación de movimiento. 


Capítulo VIII: ¿El movimiento es sólo continuo o necesita reposo?

Tenemos entonces dos visiones: unos que permiten la continuidad en el movimiento, y otros que dicen que el movimiento sólo puede ser posible con el reposo. 

Parece obvio que cuando una piedra es lanzada y choca con algún otro objeto, este se detiene para luego tomar otra dirección;: por ejemplo, cuando uno arroja una piedra (movimiento directo) a la pared, una vez que choca la piedra se cae (movimiento descendente) ¿habrá reposo en ese cambio de movimiento o es algo continuo?

Para contestar esta pregunta necesitamos entender el concepto de inclinación. Esta es definida por Avicena como la falta de movimiento que se presenta en el instante. Si hablamos del ejemplo de la piedra chocando en la pared, existiría un instante en donde la piedra cambia de dirección: ahí está la inclinación. 

Podría pensarse que hay dos instantes, uno en que la piedra choca y otro donde procede la inclinación, pero si esto es así, entonces el movimiento es continuo porque dos instantes necesitan de tiempo para existir. 

El mismísimo Aristóteles postulaba su teoría llamada (en el mundo medieval) quies media. Esta postulaba que realmente existía un reposo entre dos movimientos contrarios; por ejemplo, un objeto parte de A a C. Cuando llega a C naturalmente (si le objeto es lanzado hacia arriba) tiene que volver a A; por lo tanto, debe haber un momento en que el objeto pare en C para luego partir a A. Este reposo tendría que darse en un instante para que luego pueda devolverse a A.

No obstante, recordemos que Avicena acepta el movimiento en un instante, por lo que tendríamos que decir que no existe descanso en dicho movimiento que luego debe volver a su punto de partida. Así, para ser consecuente con la inexistencia del vacío en el instante, entonces no existe reposo en el movimiento contrario. 


Capítulo IX: El movimiento primero y otros movimientos

Otro tema que se debe analizar es si el movimiento de lugar es primero al movimiento de posición. Antes de analizar cuál es primero, deberíamos decir qué es primero entre los movimientos por ejemplo: el rectilíneo y el circular. Para Avicena, el movimiento que existió primero (e hizo existir a los demás) es el movimiento circular siendo que es infinito (y de ahí se sacan los rectilíneos). Bajo este respecto, debemos decir que los movimiento circulares son anteriores tanto al lugar como a la posición. 

También podemos establecer el comienzo del movimiento a través de lo natural y lo voluntario. Ambos comparten un concepto en común que sería la espontaneidad. También está lo natural y lo forzoso que pertenece a otra categoría, ya que el movimiento natural tendría que ser el enfriamiento de una cosa caliente, mientras que lo forzoso es el sometimiento de un estado a otro. 

¿Qué característica tendrá el primer movimiento? ¿natural, voluntario o forzoso? si tomamos en cuenta que el primer movimiento es el circular y que este es infinito, entonces deberíamos descartar el aspecto natural pues en la naturaleza nada es infinito. ¿Sería forzoso el movimiento circular? por supuesto que no en el entendido de que un movimiento forzoso necesita de algo más para ser forzoso, y en el infinito no-hay-algo-más. Lo único que quedaría sería considerar al movimiento como algo voluntario, pensando que ese sería el movimiento del creador del universo. 

Capítulo X: El espacio del cuerpo

El concepto de espacio se entiende en la naturaleza cuando sabemos que dos cuerpos contrarios no pertenecen a la misma naturaleza y por lo tanto no pueden tener el mismo espacio. Por ejemplo, el fuego siempre prevalecerá frente al aire, es decir, el fuego ganará el espacio del aire si es producido. 

En todo caso, Avicena enfatiza aquí que cada lugar se da por reemplazo tal como lo propuso Aristóteles. En este sentido, todos los objetos tienen un espacio natural que les corresponde.

Capítulos XI y XII: El espacio natural de los cuerpos

El espacio, el lugar y la forma son cosas naturales del cuerpo ya que estos son compuestos y tienen límites. Por supuesto, todos los cuerpos además tienen accidentes que les son inherentes y naturales. 

Ningún objeto de la naturaleza puede tener dos lugares instantáneamente. Esto se puede pensar incluso entre las relaciones del entero y la parte, es decir, las partes tienen su propio lugar que es el entero, así como el entero tiene su propio lugar (siendo quizás la parte de otro lugar). Por lo tanto, el espacio natural de la parte es el entero. 

Por otro lado, también cada movimiento tiene su propia inclinación que se dirige a cierto lugar (así como las piedras siempre se dirigen al centro y el fuego hacia arriba). Esto nos hará pensar que para cada cuerpo hay un lugar natural, concepto que coincide con la tradición intelectual de Aristóteles

La inclinación puede venir tanto del movimiento natural como del voluntario. Los animales tienen la inclinación voluntaria (aunque también natural), pero el resto de los seres vivos sólo tienen movimientos naturales, y por lo tanto inclinaciones naturales. 

Capítulo XIII: Movimiento accidental

El movimiento es accidental y esencial. Cuando nos referimos a un objeto, este tiene un movimiento accidental de dos modos: uno directo y otro indirecto. Cuando hablamos de movimiento directo es justamente el movimiento natural o voluntario (o a veces forzado) que tiene un objeto, y luego tenemos el movimiento indirecto; por ejemplo, cuando un hombre está en un barco y, sin ser movido, se mueve porque el barco va a alguna dirección. 

El cuerpo compuesto tiene sus partes que serían además accidentales, y que al mismo tiempo estas también tienen accidentes dentro de ellas. El alma no sería un accidente pues es la forma del cuerpo, todo movimiento que se realiza en el cuerpo es gracias al alma.

Capítulo XIV: Movimiento forzado y movimiento espontáneo

Como habíamos dicho anteriormente, el movimiento forzado sólo es posible si hay un agente externo que lo mueva. Estos movimientos se caracterizan por ser empujar y tirar; podría decirse que llevar también puede ser un movimiento forzado, pero Avicena dice que pertenece aún más al movimiento casual. 

Existe un ejemplo del movimiento forzado que se conoce son los proyectiles. Cuando se arroja un proyectil (dígase una piedra) esta debe ser lanzada por un agente, se mantiene en el aire, y con el tiempo comienza a caer, es decir, a seguir su inclinación natural que es el suelo.

Muchos dicen que lo que verdaderamente realiza el movimiento forzado es el aire, pues la mayor parte del tiempo el proyectil está en manos de este. Sin embargo, si esto fuera así, entonces el aire podría incluso atravesar un muro ya que el aire empuja objetos muy pesados; por lo tanto, si el aire es quien mueve entonces con mucha razón podrá tener la fuerza de los objetos que empuja, lo cual es absurdo. 

Capítulo XV: El agente y el paciente

Todos los cuerpos tienen un movimiento natural; muchos de ellos tienen motivos de voluntariedad mientras otros son estrictamente naturales (como la respiración). Aparte de esto, es decir, de que los cuerpos tengan este tipo de movimiento, también hay un agente externo que les da este movimiento sin ningún intermediario. 

El que es susceptible de movimiento se moverá por la disposición del agente, es decir, si el agente se mueve la mitad de una distancia, así lo hará también el agente del cual el movimiento se imprime. 

Conclusión

Este sería el último libro concerniente a la física en Avicena y no es poco lo que se ha recabado en estas páginas. Por supuesto está completamente en árabe y será labor de un traductor interesado quien pueda traducir toda su obra al español. Vemos aquí, que a pesar de que Avicena considere el movimiento en el instante, en las mayorías de las cosas el filósofo árabe coincide con toda la física aristotélica, así como también muchos de su tiempo.