Terminando el tema de la verdad en Santo Tomás de Aquino, ahora nos enfocamos con todo lo concerniente al conocimiento de Dios. No es un tema fácil pues muchos filósofos han intentado descubrir si Dios tenía alguna especie de intelecto, o si acaso era algo que iba mucho más allá que este. La respuesta es difícil pero con el aquinate al menos podremos tener una aproximación a lo que pareciera ser este conocimiento inaccesible.
Conocimiento de Dios
¿Hay conocimiento en Dios?
Sí hay conocimiento en Dios pero de diferentes maneras. Se dice primeramente que el intelecto está en Dios así como si fuera una especie de esencia, pero esto no es cierto; de ser así, entonces Dios tendría que tener accidentes lo cual es absurdo. Dios comunica el conocimiento a sus criaturas y tiene el conocimiento, pero eso no significa que conozca.
Orígenes y Agustín decían que Dios era el ''conocedor'' de las criaturas, pero esto no es cierto ya que Dios no tiene la propiedad de conocer porque para él todo está en su entendimiento. En otras palabras, el conocimiento es su esencia, no una característica (accidente).
¿Se conoce Dios a sí mismo?
Considerando que Dios se encuentra enteramente libre de cualquier potencialidad y de la materia, se puede decir que él es el máximo conocimiento. Por lo tanto, Dios sí se conoce a sí mismo porque su naturaleza es el conocimiento puro.
¿Conoce Dios otras cosas a parte de sí mismo?
Indudablemente Dios no sólo se conoce a sí mismo sino que también a las demás cosas. Esto se puede probar ya que Dios es el que ha implantado la tendencia, el apetito natural de todas las cosas. Sin embargo, una cosa no puede tender a un fin si primero no es conocida, y como Dios es el creador de todo, entonces sí conoce las cosas que son a parte de sí mismo. Similar a un artesano, Dios conoce en profundidad todas las cosas que existen en los seres particulares.
¿Conoce Dios los futuros contingentes?
Existen dos problemas presentes en el futuro contingente:
- Si Dios no conoce los futuros contingentes, entonces no puede conocer la suerte humana.
- Si Dios los conoce, entonces no puede existir el libre albedrío.
Esto lo resuelve Santo Tomás diciendo que como su conocimiento es eterno, entonces todos los actos del tiempo los ve en presente, es decir, lo que para los humanos es presente, pasado y futuro, para Dios son todos actos presentes. Que Dios pueda ver todos los tiempos en el presente se debe principalmente a que él está presente en la eternidad.
La dificultad que siempre se presenta para saber si Dios conoce el tiempo presente, es cuando nosotros aplicamos nuestra percepción del tiempo a la ''percepción'' del tiempo a Dios.
¿Conoce Dios el mal?
Todo aquel que conoce una cosa de manera absoluta, conoce al mismo tiempo la diferenciación que tiene de otras. Esto implica que cualquiera que conozca la afirmación de algo, también conoce la negación de lo mismo. Como Dios conoce a todas las criaturas y a todas las formas, entonces es claro que si conoce el bien también puede conocer el mal que se distingue.
Conclusión
Debido al poco tiempo que me queda, he realizado esta parte del conocimiento de Dios bastante resumida. No me queda mucho tiempo y además voy a empezar otra carrera por lo que pido disculpas por la brevedad de mis escritos. En general, la visión de Santo Tomás no me sorprende del todo, ya que en su concepción de la verdad se puede anticipar varias de sus teorías. Sin embargo, me quedo bastante conforme. Me aclaró que la omnipotencia de Dios llega hasta los límites del tiempo, es decir, los supera a pesar de ser difíciles. Creo que más que agregar una nueva teoría, Santo Tomás da una nueva mirada a todo.