Esta es otra de las obras opúsculas de Santo Tomás de Aquino donde encontramos la consulta que Margaret de Constantinopla hace al aquinate con respecto a la usura de los judíos. Es increíble ver que desde distintas áreas y posturas Santo Tomás es requerido por muchos intelectuales y autoridades de la época. Si seguimos la línea de filósofos que hemos visto en el blog, entenderemos que San Agustín de Hipona aceptaba la convivencia entre judíos y cristianos. ¿Qué pensará el aquinate sobre los judíos?
Sobre el régimen judaico, para la duquesa de Brabante
Contexto de la carta
Margarita de Constantinopla era una duquesa de la ciudad de Flandes y de Henao (lo que sería hoy Bélgica, Países Bajos y Luxemburgo) entre 1244 y 1278. La duquesa mantuvo una correspondencia con Santo Tomás de Aquino sobre cuestiones morales.
Margarita muestra preocupación especialmente en la comunidad judía donde según ella se practica la usura y la venta de títulos. Para no caer en prejuicios, Margarita pide la opinión del aquinate a lo que este responde en una corta epístola.
Primera respuesta
Sobre los impuestos a los judíos
De acuerdo con la preocupación de usura que cometen los judíos, Margarita de Flandes pregunta si es lícito exigir impuestos a los judíos. Santo Tomás de Aquino responde que si la actitud de los judíos fue de usura, entonces no habría problema alguno en exigirlos. Por otro lado, si los judíos fueron usureros con las pertenencias de otras personas, entonces es necesario que las restituyan si fueron adquiridas por usura.
El dinero que se recaude de esta restitución puede ocuparse para propósitos piadosos y eclesiásticos.
Segunda respuesta
Pecado y usura
Otra de las dudas de Margarita es que si se les debiera aplicar una multa exclusivamente monetaria, ya que lo único que tenían los judíos era dinero obtenido por usura.
Santo Tomás de Aquino le recomienda que sí imponga esas multas, e incluso le incita a que las multas sean grandes.
Tercera respuesta
Entrega voluntaria de dinero
Margarita pregunta si es lícito aceptar dinero de un judío que voluntariamente ha entregado su dinero adquirido por la usura. Santo Tomás de Aquino no ve mayor problema en esto y le recomienda que acepte dicho dinero, y que restituya si es posible a las víctimas de la usura o que se ocupe para fines piadosos como lo explicó anteriormente.
Cuarta Respuesta
Los sobrantes
Los dineros obtenidos por medio de la usura suelen ser de grandes cantidades y el sobrante quedaría en las arcas de la ciudad. Sin embargo, un cristiano no debería aceptar este sobrante que ha quedado del dinero obtenido por usura; el cristiano debe rechazarlo.
Quinta Respuesta
Venta de oficios
Margarita pregunta a Santo Tomás si es legítimo vender oficios a los judíos o pedirles un préstamos para que los consigan.
- Quizás no sea muy conveniente vender los oficios ya que la mayoría de estos podría no desempeñarlo muy bien
- No es lícito pedirles préstamos para que puedan tener un oficio, ya que eso promueve el no pago y además la usura; el interés
Como ya vimos en otras entradas, Santo Tomás de Aquino no acepta la usura y la considera pecado.
Sexta Respuesta
Recaudar impuestos sobre los cristianos
Una ciudad necesita sustentar sus fuerzas económicas y políticas. Por lo tanto, mientras el impuesto sea justo, no habrá ningún problema en que al cristiano (y a todos los ciudadanos) se les imponga un impuesto.
Séptima Respuesta
Extorsión por parte de las autoridades
Si una autoridad de alto cargo recibe dinero o algún objeto producto de una extorsión de una autoridad menor no debe recibirlo, y al contrario, debe castigar severamente a quien realizó la extorsión.
''A medida que el hombre nocivo es azotado, el imbécil se vuelve más sabio''
(Proverbios 19:25)
Como claramente se puede ver, Santo Tomás no permitía la corrupción a ningún nivel.
Octava Respuesta
Un signo que distinga
Otra de las preguntas de Margarita es sobre la conveniencia de obligar distinguir a los judíos de los cristianos con un signo.
La respuesta de Santo Tomás es clara: todos los judíos deben usar vestimenta distinta a los cristianos. De hecho, su misma ley lo aclara así. Cada judío tiene sus reglas de vestimenta que difieren totalmente de los cristianos.
Conclusión
Nuevamente Santo Tomás deja en claro su posición frente a la usura para que Margarita de Constantinopla pueda establecer un buen gobierno. Vemos también la dureza con que el aquinate se refiere a los judíos, además de que se vean como seres inferiores en un reino totalmente cristiano. Parece ser que Santo Tomás guarda la misma reticencia a los judíos que San Agustín otorgaba, así como también permitía su existencia.