miércoles, 15 de julio de 2020

Nicolás de Cusa - La Docta Ignorancia (De Docta Ignorantia) (Libro I: Saber es ignorar) (1440)

Image from page 80 of "The road to Oz; in which is related how Dorothy Gale of Kansas, the Shaggy Man, Button Bright, and Polychrome the Rainbow's daughter met on an enchanted road and followed it all the way to the marvelous land of Oz" (1909)

Este puede ser uno de los conceptos por los que se conozca mucho más a Nicolás de Cusa, en efecto, veremos en estos tres libros la teoría de la Docta Ignorancia. Justo cuando pensábamos que en el Renacimiento ya no se hablaría de Dios, la verdad es que el filósofo de Cusa es un gran creyente de la doctrina cristiana, sin dejar de lado sus convicciones políticas las cuales une con la religión. Sin embargo, en este libro nos enfocaremos en el concepto de docta ignorancia, es decir, en el aspecto que considera la ignorancia como una prudencia por pare de los sabios.

Referencias:

(1) Se dice que Nicolás de Cusa confundió el texto ''Antigüedades judías'' de Josefo con el libro ''Antiguedades'' de Marco Terencio Varrón.
(2) Esto fue dicho por Juan de Salisbury.
(3) Hermes Trismegisto fue un dios griego producto del sincretismo entre la cultura egipcia y la griega. Su equivalente era Hermes. 

Vocabulario

(1) Ontidad: todo aquello relacionado con el ser.
(2) Ididad: existencia de un particular.


De Docta Ignorantia


LIBRO PRIMERO

Capítulo I: Saber es ignorar



Del mismo modo que podemos observar la naturaleza podemos observar que hay un modo superior que las hace existentes, y que todos de alguna manera podemos reconocer. En este sentido, todos investigamos algo a partir de presupuestos, es decir, cosas que en realidad son ciertas. Sin embargo, con el mismo ánimo, el ser humano también desea investigar aquellas cosas que para él le son inciertas. 

Por supuesto, en el primer caso, aquellos presupuestos son fáciles de entender ya que siempre son próximos o semejantes. No obstante, en el segundo caso siempre nos encontramos con obstáculos y algunas dificultades. 

Es aquí donde Nicolás de Cusa nos presenta el concepto de ''inquisición'', en el cual se realizan las comparaciones proporcionales de fácil o difícil con respecto a lo infinito (y dice infinito porque el infinito es lo más desproporcionado) que nos es desconocido.

El número comprende todas las cosas proporcionales. En efecto, todo lo que tiene una proporción necesariamente tiene un número, tal como establecía Pitágoras al decir que el mundo solamente era comprensible a través de los números. Pero la dificultad de llegar a lo desconocido por medio de lo conocido es, en verdad, superior a la naturaleza humana.

Es así que Sócrates decía que no sabía nada y Salomón decía que todas las cosas difíciles e inexplicables se dan por medio de la palabra. 

De acuerdo con esto, Nicolás de Cusa nos dice que lo que en realidad buscamos es ser ignorantes, y mientras más busquemos esto, más doctos seremos



''Así, pues, a ningún hombre, por más estudioso que sea, le sobrevendrá nada más perfecto en la doctrina que saber­se doctísimo en la ignorancia misma''


Veamos de manera más cercana qué quiere decir Nicolás de Cusa con este interesante concepto. 


Capítulo II: Lo máximo


En primer lugar, Nicolás de Cusa señala que lo máximo es aquello por lo cual nada mayor puede existir. En ese sentido, entonces vemos que lo máximo es solo uno, es decir, está relacionado con la unidad. Por lo tanto, lo máximo es uno y en él están contenidas todas las cosas y nada se le puede oponer. También, en consecuencia, lo mínimo es parte de él en el sentido de que lo máximo es absoluto. 

Todas las cosas se le oponen, pero él no se opone a nada; por lo tanto, lo máximo también podría ser una especie de universalidad. 

En resumen, lo máximo es


  • Unidad
  • Universal
  • Nada se le opone

Una vez entendido lo máximo, lo cual se repasará en el Libro II, veamos el concepto de verdad. 

Capítulo III: La verdad es incomprensible

Como no hay proporción de lo finito a lo infinito y además, como no se puede medir aquello que es excedido, entonces no se llegaría al máximo absoluto. De este modo, no hay una igualdad de cosas, es decir, todas se diferencian cuando se toman medidas. Las cosas pueden ser semejantes, pero nunca iguales. 

Debido a esto, el entendimiento no puede entender con exactitud la verdad de las cosas; solo las medidas, las semejanzas. Por lo tanto, el entendimiento, que no es la verdad, nunca va a comprender la verdad con exactitud, sino que solamente aquello que se asemeje a ella. 

En consecuencia, la quididad de las cosas, que bien ha sido explicada por la mayoría de los filósofos, no ha podido ser encontrada en su sustancia. Mientras más sepamos que no podemos encontrar la verdad, más doctos seremos. 


Capítulo IV: El máximo absoluto y el mínimo absoluto

El máximo, aquel que mayor nada puede haber y que es absolutamente comprensible por nosotros, pero dicha comprensión es alcanzable solo entendiendo que este es incomprensible. En efecto, lo máximo es aquello que excede a todos pero no puede ser excedido, y esto es incomprensible por el entendimiento humano. Esto es porque, de acuerdo con Nicolás de Cusa, el ser humano no puede concebir la igualdad exacta, al contrario, solo puede concebir la diferencia y la semejanza pero no la igualdad. 

Por otro lado, tenemos el mínimo que es aquel concepto del cual nada más pequeño puede existir. En este sentido, el máximo y el mínimo tienen cierta semejanza pues estos son absolutos. En este concepto absoluto, el mínimo también sería un máximo, es decir, podríamos nombrarlo como mínimo máximo. 

Por esta razón, podemos decir que el máximo no es contrario a ninguna cosa. En otras palabras, el máximo es infinito y por lo tanto abarca todas las cosas existentes. Esto nuevamente es incomprensible para el ser humano el cual no puede comprender el infinito. 

Los conceptos claves que se añaden son:


  • Infinito
  • Abarca el mínimo absoluto
  • Incomprensible para el ser humano

Podría parecer una contrariedad que el máximo abarque el mínimo, pero de otra manera no podríamos decir que es el máximo. 

Capítulo V: El máximo es unidad

A pesar de todo lo anterior, el máximo es inteligible pero incomprensible. De la misma forma, los número no son infinitos, al contrario, ya sea restando o sumando los números serían finitos. Lo único que puede representar a un mínimo y a un máximo es la unidad, en otras palabras, un número por más pequeño que sea necesita unidad y un número por máximo que sea también la necesitará. 

Sin embargo, el número no puede ser mínimo o máximo absolutamente, en efecto, porque es finito. En ese caso, el principio del número sería su mínimo y el fin de ese número sería su máximo. 

La unidad absoluta es la absoluta maximidad y esta no puede ser múltiple porque engloba a todas las cosas. En consecuencia, lo máximo no puede ser un número. De hecho, la Unidad es la condición de existencia del número, de no haber unidad no podría existir. 

Capítulo VI: El máximo como necesidad

Todas las cosas a excepción de lo uno, es finito y limitado. Teniendo esto así, entonces bien se puede decir que el máximo es el principio y fin de todas las cosas, pues es infinito e ilimitado. Si esto no fuera así, entonces nada podría llegar a ser porque carecería de principio. 

Por lo tanto, el máximo es un ser absoluto y necesario. Sin él nada de lo contingente y finito podría existir.


Capítulo VII: Eternidad trina y una

Nicolás de Cusa nos dice: 

''Nunca hubo ninguna nación que no rindiera culto a Dios y que no creyera en él como máximo absoluto''

Para esto nos presenta algunas pruebas sobre la base de algunos datos históricos que pasamos a detallar:

Marco Terrencio Varrón (116 a. C. - 27 a. C.): este militar romano decía que los sisenios adoraban la unidad como un máximo(1)

Pitágoras (569 a. C. - 475 a. C.): el mismo filósofo matemático suponía y enseñaba que la unidad era trina(2)

Para probar que la unidad es trina se debe considerar que antes de toda alteridad esta la eternidad. En efecto, todo lo que precede a lo mutable es inmutable y por lo tanto, eterno. La alteridad, en ese sentido, es posterior a la unidad. 

En consecuencia, la unidad encierra todo aquello que es mutable y además aquello que es desigual. ¿Cómo es esto posible? la desigualdad se corrige con la igualdad; además, la unidad, que es lo primero que debió existir, no podía ser comparado con algo más y por lo tanto tenía igualdad en sí misma. Luego de la unidad comienza a nacer la desigualdad. 

Ahora, si bien la igualdad es lo primero que existe, la alteridad y la desigualdad nacen después y de manera simultánea. En consecuencia, la alteridad de un número binario es la primera desigualdad (y alteridad) que existe. 

Por otro lado, tenemos la unidad y la igualdad que también se dan simultáneamente cuando ''nacen''. Entonces, podríamos decir que hay una dualidad simultánea que se da entre estos dos conceptos, pero además en esta simultaneidad se debe dar una conexión. Dicha conexión formaría el tercer elemento de lo máximo, es decir, lo máximo sería:

Unidad
Igualdad
Conexión entre unidad

Por supuesto, lo que defiende en este sentido Nicolás de Cusa, es la teoría de la Santísima Trinidad.

Capítulo VIII: La Generación Eterna

La Unidad es llamada casi ''ontidad''(1) que en latín se dice ''ens'' y también la unidad es ser (unitas + entitas). Ahora, la igualdad de la unidad es casi igualdad de entidad (de ser o existir). En efecto, la unidad no tiene ni más ni menos, sino que representa su igualdad. 

Por el contrario, cuando surge la generación a partir de la unidad, entonces se acaba la unidad, pues la generación es repetición de una unidad. La reproducción solo se encuentra en aquellas cosas que son perecederas. 

No obstante, cuando se habla de la generación de la unidad, entonces no hablamos de cosas perecederas, en efecto, la unidad solo puede generar igualmente otra unidad. Como la unidad es algo eterno, entonces la generación de la unidad es también algo eterno. 

Capítulo IX: La Procesión de la Conexión


Cuando dos cosas iguales se extienden y esta extensión es también igual a las cosas que se unen. En este sentido, la conexión precede a la unidad, pero también debe provenir de la igualdad. 

Nicolás ejemplifica esto con las siguientes palabras en latín:
  • hoc (esto)
  • id (esto es)
  • idem (igual)


Los términos más próximo serían ''id'' e ''idem'', de hecho, de ahí que se forma la palabra ''ididad''(2). Por lo tanto, de aquí se forman las siguientes palabras a tener en consideración:

  • Unidad (hoc)
  • Ididad (id)
  • Igualdad (idem)

En consecuencia, la ididad tendría relación con la unidad, pero la igualdad designaría la unión de la unidad con la ididad. De la misma forma, Nicolás de Cusa nos dice que estos tres términos se relacionan con la Santísima Trinidad de la siguiente manera:

  • Padre: Unidad
  • Hijo: Igualdad
  • Espíritu Santo: Conexión

Capítulo X: La Santísima Trinidad

La Santísima Trinidad representa una unidad completa, una indivisión que no puede ser destruida. Si bien dijimos que era el Padre la unidad, la Santísima Trinidad representaría la máxima unidad posible. 

Capítulo XI: Las matemáticas

Las cosas visibles son imágenes de las cosas que son invisibles. Es así que el creador puede verse a través de las creaturas, casi como si fuera un espejo. Las proporciones que tienen las creaturas son inteligibles a los humanos en cuanto tratan de explicar la naturaleza. Esta proporción se trató de encontrar mediante las matemáticas; de hecho, todos los filósofos han buscado explicaciones a los fenómenos naturales y filosóficos a través de las matemáticas. 

Capítulo XII: Los signos matemáticos

Las cosas matemáticas son todas finitas. Para conocer aquellas cosas absolutas y máximas entonces tendremos que trasladar las figuras finitas a las infinitas. Es así que grandes filósofos vieron en las figuras geométricas la infinitud y la perfección; en efecto, se constató un triángulo perfecto, un círculo perfecto y por el lado de los teólogos, una Trinidad perfecta. 

Capítulo XIII: La línea máxima e infinita

Si existiera una línea infinita, entonces esta sería recta, sería triángulo, círculo o esfera. 

Tenemos primera mente una línea recta como una tangente del diámetro del círculo.





Como podemos ver, tenemos una línea recta y la línea de un círculo que la toca. La línea del círculo se volvería más y más derecha mientras más se agrande el círculo; por lo tanto, la línea curva se volverá mínimamente curva y máximamente recta. 

Ahora, ¿cómo es posible que el triángulo también sea parte de lo infinito como línea? porque un triángulo también es parte de un círculo. 


Recordemos que mientras más se expanda la curva, entonces esta será menos curva y más recta por lo que procederá a convertirse en un triángulo. Imaginemos que en este dibujo de arriba, el punto B se mueve hasta el punto C como si fuera un reloj. Al moverse hasta el punto C se estaría creando un triángulo, pero si el punto sigue su curso hasta volver a B, se formaría un círculo. 

Por lo tanto, tanto las líneas del triángulo como las lineas del círculo son potencialmente infinitas. 


Capítulo XIV: La línea infinita es triángulo

Se ha probado que la línea verdaderamente infinita de un triángulo serían los puntos BC de la línea anterior. Pero la verdad es que si un lado del triángulo es infinito, forzosamente los otros también sería infinitos. Por lo tanto, no solo no habría un solo ángulo, sino que todos los ángulos de ese triángulo serían infinitos. 

Capítulo XV: El triángulo es un círculo

Supongamos que tenemos la siguiente figura:



Para realizar esta forma, primero que todo debemos suponer el punto a estático. Luego, una línea recta terminaría  en un punto B. Si este punto B se tuviera que mover infinitamente, entonces este debería hacerlo mediante una curva; claro, siendo una línea recta no podría llegar hasta el infinito, pues no formaría un círculo. 

En este sentido, BC es parte de un arco infinito del círculo. Como todo lo que es finito está dentro de lo que es infinito, entonces los puntos BC son tan infinitos como la circunferencia completa. En efecto, los puntos ABC son un círculo en potencia. 

Esta línea que es al final un triángulo, es también círculo, y por lo tanto es también infinita. 


Capítulo XVI: El máximo y su relación metafórica con todas las cosas

De esto se desprende que el máximo está en todas las cosas. El mínimo está dentro de lo máximo, no se le opone, y así todas las cosas particulares están dentro de él por muy mínimas que sean. Esta es una metáfora que puede vincularse a Dios; en efecto, como diría Salomón, las ciencias están en Dios

Capítulo XVII: Otra doctrina profunda acerca de ello

Lo infinito es razón de aquello que es finito, así como la línea infinita es razón de la línea finita. Es así que la razón es parte del infinito entendimiento de Dios, en otras palabras, el razonamiento humano participa de la infinitud del pensamiento de Dios. Ahora, puede decirse que este razonamiento humano siempre es distinto, y en efecto, lo es, pero solo porque en la realidad la igualdad no es posible como lo hemos demostrado en capítulos anteriores. 

Capítulo XVIII: Entendimiento de la entidad

No obstante todo lo anterior, sobre todo con el capítulo 15, puede decirse que lo curvo está expuesto a lo más y a lo menos, a lo mínimo y a lo máximo, lo cual no ocurre con una línea recta. 

Sin embargo, Nicolás de Cusa nos dice que lo curvo es justamente curvo por su participación en lo recto. Por lo tanto, cuando una curva es menos curva, más va participando de aquello que es recto. En termino aristotélicos, podríamos decir que la recta es la sustancia y lo curvo su accidente. 

Capítulo XIX: Del triángulo a la Trinidad

Se ha probado que la línea, el círculo y el triángulo son infinitos. El máximo estaría representados en aquellos y así la Trinidad también, puesto que la unidad es trina. Como la Trinidad no contradice la unidad simplísima, es que entendiendo esta así como es podemos llegar a la verdad. No cabe al entendimiento humano enumerar la trinidad pues de ese modo no llegará a la verdad. Como diría el mismo San Agustín de Hipona: 

"Cuando empiezas a numerar la trinidad te apartas de la verdad"

La distinción y la indistinción como cosas contrarias en las cosas divinas deben concebirse en su principio más prístino, no sobre la base del entendimiento humano. Es así que la esencia de la Trinidad (que nos pudiera parecer triple por su palabra) es la mísma unidad; por lo tanto, la unidad es Trinidad.

Capítulo XX: La imposibilidad de la cuaternidad en la Trinidad

El triángulo es la mínima figura poligonal y ahí está su perfección que también comparte con el círculo. El triángulo coincide con todas las otras figuras poligonales y es por eso que cualquiera que supere al triángulo como figura poligonal, en realidad sería pluralidad y ya no unidad.

Capítulo XXI: Tránsito del círculo infinito a la unidad

En efecto, todos los filósofos anteriores a Nicolás de Cusa han acordado que el círculo es infinito y como tal representa una sola unidad. 

Capítulo XXII: La providencia divina une las cosas contradictorias

Dios es la complicación de todas las cosas, dice Nicolás, por lo tanto abarca todas las cosas existentes no solo en el presente sino que también en el futuro.

En ese sentido, Dios puede prever muchas cosas que no previo ni preverá. En efecto, todo está implícito en la providencia de Dios como podemos ver en el siguiente ejemplo cusano:

La naturaleza humana es una:


  1. Si naciera un hombre que nunca se esperaba que naciera, nada se añadiría a la naturaleza humana, sería un hombre y ya. Lo mismo ocurriría si no naciera. 

Existen muchos tipos de materia que no tienen lugar en nuestro mundo, pero sí en la providencia de Dios. Y, en ese sentido, estas se encuentra en acto en la providencia de Dios. 

Como Dios es parte de todas las complicaciones de la realidad, él puede preverlo todo así como también puede prever lo que no puede prever. Luego, haga lo que haga el ser humano esto será previsto por la providencia de Dios.

Capítulo XXIII: Tránsito de la esfera a la infinitud de Dios

La esfera es la última perfección de las figuras mayor de la cual no hay otra, y así Dios también es el ser máximo y supremo. Es así que en la esfera y en Dios, todo movimiento que se produzca en realidad es reposo. En efecto el máximo reposo es la medida de todos los movimientos. 

Capítulo XIV: Sobre el nombre de Dios y la teología infinita

Hermes Trismegisto(3) decía lo siguiente con referencia al nombre de Dios. 

''Dios es la universalidad de las cosas, no hay ningún nombre que sea apropiado para él, ya que sería necesario o que Dios fuera designado con todos los nombres, o que todas las cosas se designaran con su nombre, por complicar él mismo en su simplicidad la universalidad de todas ellas''

Por lo tanto, su nombre nos sería inefable ya que sería imposible descubrir un nombre que comprenda lo infinito. Por lo tanto, los nombres que pongamos (como Dios) solo hacen un aporte muy pequeño a descubrir su verdadera esencia. Los nombres de Dios son creados para que pueda entrar en nuestro entendimiento. 

En efecto, si se dice que es la virtud, surge el vicio; si se dice que es la verdad, surgirá la falsedad. Su esencia encierra todas las cosas y por ello es que no podría pronunciarse verdaderamente sin que surja algún defecto. 

Es por eso que a Dios solo se le puede llamar como tal respecto a una relación. Es decir, Dios es un ser distinto a nosotros. 

Capítulo XXV: Los paganos usaban el nombre de Dios

Los paganos utilizaban los nombres de Dios con relación a las cosas que observaban en la naturaleza. Las que les causaban más impresión recibían el nombre de un Dios correspondiente. Esto era en realidad una forma de referirse a Dios de maneras distintas, es decir, cuando se referían a uno o más dioses en realidad se referían a un solo Dios. 

Capítulo XXVI: Teogonía negativa

La sagrada ignorancia nos lleva a afirmar que Dios es inefable. Normalmente, todos entendemos a Dios por medio de una teogonía positiva, es decir, Dios es todo; pero otros afirman que en realidad Dios no es ninguna cosa porque es un solo infinito; por lo tanto, no podría ser singularizado en una cosa solamente. 

En la teoría de la negatividad, Dios no sería ni lo uno ni lo otro, ni trinidad ni materialidad, pero esto solamente es posible pensando en que el infinito es un concepto negativo, es decir, abarca todo y por lo tanto, es imposible que Dios sea algo en concreto, sino más bien sería propio simplemente decir que es infinito. 

Como dice Nicolás de Cusa, las negaciones son verdaderas y las afirmaciones insuficientes para describir a Dios. En otras palabras, es más fácil decir lo que no es que lo que es. 

Conclusión

Este concepto de docta ignorancia es tremendamente revelador para su época, aunque hay que decir que éste ya se encontraba en los cimientos de la filosofía con nuestro querido Sócrates. Recordemos como a través de la máxima ''Solo sé que nada sé'' se comprendía que ser conscientes de la ignorancia que tenemos nos volvemos más sabios. Veamos que nos trae en el siguiente libro el filósofo Nicolás de Cusa. 

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1 comentario:

  1. Adjunto este tema; " ENTREVISTA A PABLO ROMERO: LOS EFECTOS DEL ANALFABETISMO FUNCIONAL- escrito por-Rompkbzas el 18 junio 2020" que dice mucho sobre los niveles de ignorancia que posee cada estudiante,partiendo de las políticas nacionales de Educación que se arrastran por décadas en cada país de Latino América.

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