¿Qué es el ayuno? en un sentido normal y cotidiano sería la suspensión de las primeras comidas del día, pero el ayuno también tiene una significación religiosa profunda, pues Cristo ayunó cuarenta días en el desierto. Para San Agustín de Hipona, el ayuno no es sólo una prueba de que la mente es superior al cuerpo que constantemente pide necesidades corporales, sino que también es una prueba espiritual de compromiso y voluntad.
Referencias:
(1) Una ironía decir esto cuando ya a ese tiempo existían al menos unos cuantos cismas en la Iglesia Católica.
LA UTILIDAD DEL AYUNO
PRIMERA PARTE: NATURALEZA DEL AYUNO
Alimento divino y alimento terrenal
El alimento terrenal tiene su propia vida al igual que alimento divino. El terrenal sostiene al hombre y el celestial a los ángeles, pero quien ayuna no está ni en la tierra ni con los ángeles. ¿Por qué? porque no quiera el hombre compararse son los seres divinos, pero el ayuno le ayuda a estar más lejos de los placeres de la tierra. Por lo tanto, el hambre más importante no es el de los alimentos, sino más bien el hambre de justicia que vive en cada hombre.
SEGUNDA PARTE: UTILIDAD DEL AYUNO
Carne y espíritu
Si estamos acostumbrados a quedarnos sin este alimento por las mañanas, entonces será mucho más fácil soportar las hambrunas y las calamidades que atraen los cuerpos mortales. Un hombre que se acostumbra a los estímulos del cuerpo siempre tendrá necesidades, mientras que el que vive con el espíritu no las tendrá (o al menos tendrá menos).
Aquí San Agustín anuncia un problema, ya que pareciera ser que hasta ahora la carne es enemiga del espíritu como así bien lo dicen las S.E.
''La carne guerrea contra el espíritu y el espíritu contra la carne''
(Gálatas 5:17)
Pero, como la mayoría de nosotros que hemos leído la obra de San Agustín veremos que el santo de Hipona jamás llama a aborrecer el cuerpo, pues muy por el contrario el cuerpo fue creado por Dios y por lo tanto es un bien (que se le utilice para el mal es otra cosa).
Sin embargo, ¿cómo haremos coincidir el Gálatas 5:17 con las ideas de Agustín? No sólo eso, debemos pensar en el siguiente versículo:
''Nadie odia jamás su propia carne, sino que la alimenta y la cuida, así como Cristo a su Iglesia''
(Efesios 5:29)
A este problema, San Agustín nos dice que si bien cada hombre se procura un cuidado de su cuerpo, también debe considerar que el cuerpo está más unido con lo terrenal que lo espiritual. Por lo tanto, dependerá del hombre no caer en los vacíos de la carne y acercarse más al espíritu.
TERCERA PARTE: CONCORDIA Y UNIDAD
Los cristianos no son los únicos que ayunan, sino que también lo hace los judíos y los paganos. Sin embargo, ¿por qué ayunan los paganos? ¿a quienes quieren favorecer? No pueden favorecer a Dios porque primero deben tener unidad. ¿Qué significa esto? para con los creyentes de Dios (o más bien de la Iglesia) la unidad está en el mismísimo Cristo, claro, tienen su diferencias pero Dios y Cristo lo hacen uno.
Los paganos no tienen unidad porque el politeísmo que tienen hace que entre sus dioses no exista concordia. De hecho, ya hay muchos paganos que al siempre estar en conflicto los unos con los otros(1), han dejado los estandartes paganos y se han dirigido a la Iglesia.
Conclusión
Por supuesto, aquí no hablamos del ayuno como un método para ayudar a nuestro cuerpo ni mucho menos. El ayuno, San Agustín se lo toma de forma espiritual, o, como dijimos en la introducción, como un sometimiento del espíritu (o de la mente) hacia el cuerpo. Hoyen día el tema del ayuno es muy cuestionado, pues surgen teorías de que es bueno ayunar ciertos días a la semana, y otras posturas que dicen que definitivamente el ayuno es algo malo si se toma prolongadamente. Cristo caminó 40 días en el desierto ayunando, ¿qué opinas tú del ayuno como forma de vida espiritual?