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sábado, 22 de julio de 2017

San Agustín de Hipona - El Tratado contra los judíos (429).

Este es el último tratado que San Agustín de Hipona pudo escribir en vida. Este nos trae una pequeña discusión y exhortación a estar en contra de los judíos. Ya sabemos por muchos otros libros anteriores la aversión que Agustín tenía  a los judíos y aquí acapara toda su atención y fuerza en acabar de una vez por todas con todo lo que resta de esta cultura religiosa, que, paradójicamente, es tan religiosa y tan monoteísta como lo es la Iglesia Católica. Veamos la última pequeña obra de San Agustín de Hipona en estos apuntes de filosofía.

Referencias:

(1) Aunque tendríamos que decir que éste es el Salmo 45. Dejaremos de todas formas que es el Salmo 44 para respetar el texto. 

Tratado contra los judíos


Errores de los judíos

En opinión de San Agustín, los judíos han ignorado y malentendido las S.E. Los judíos indican que el A.T. no es un libro cristiano en absoluto y por lo tanto no les pertenece, dicen que es exclusivamente de ellos; y esto se debe a que los cristianos ya no observan los preceptos del A.T. 

Para probar que los judíos están completamente equivocados, San Agustín comienza a citar los textos del A.T. (sobre todo de los Salmos), para probar que el A.T. profetiza el N.T. 

Profecías del Antiguo Testamento

San Agustín recurre a los Salmos para probar que la situación de Cristo fue profetizada por el A.T. ¿Por qué San Agustín utiliza los Salmos? porque estos cantos de los salmos pertenecen al A.T., dónde se dice por los judíos que Jesús no fue profetizado. Recordemos que la vida de Jesús comienza a ser relatada en el N.T. 

Profecías de los Salmos:

Salmo 44(1)

En este Salmo Cristo es profetizado de acuerdo a San Agustín:

''Hermoso de figura sobre los hijos de los hombres''
(Salmo 44:1-3)

Que demuestra la dominación de Jesús por sobre todos los hombres que existen. 

''Ciñe tu espada junto al muslo''
(Salmo 44:4)

Por espada se quiere decir ''palabra'', con la cual Cristo respondía a sus enemigos, y muslo significa la carne, o en otras palabras ''el cuerpo'' pues Jesús vino a este mundo con cuerpo. 

''Porque él mismo es el Señor, Dios tuyo''
(Salmo 44:11)

Para que nadie pudiera maldecirlo o matarlo ''por el alma'', Jesús es el Hijo que representa la Trinidad y por eso se le dice ''Dios tuyo''. 

Salmo 68

Aquí se representa justamente la pasión de Cristo cuando sufrió la tortura de los romanos. 

''Me dieron hiel para mi comida, y en mi sed me abrevaron con vinagre''
(Salmo 68:22)

Por supuesto, esto representa la pasión de Cristo y su agonizante dolor al que fue sometido. 

''Que su mesa se convierta para ellos en lazo, retribución y escándalo. Que sean cegados sus ojos para que no vean''
(Salmo 68:23-24)

Esto representa la situación de infidelidad que tuvieron los judíos para con Cristo. 

Salmo 79

Veamos sólo una parte del Salmo para entender lo que quiere decirnos San Agustín.

''Sobre el Hijo del hombre, a quien fortaleciste para ti; sea tu mano sobre el varón de tu diestra, y sobre el Hijo del hombre, a quien fortaleciste para ti, y no nos apartamos de ti''
(Salmo 79:15-16)

Obviamente el Hijo del hombre es Jesús, mientras que lo fortalece o los que no se apartan son su discípulos y santos que lo siguieron. 

Profetas del Antiguo Testamento:

Isaías

Isaías puede ser uno de los profetas más certeros del A.T., y sobre todo un profeta que nos relata cosas muy parecidas del N.T. 

''En los últimos años se hará manifiesto el monte de la casa del Señor, dispuesto en la cúspide de los montes, y será exaltado en las colinas, y vendrán a él todas las gentes, y dirán: Venid, subamos al monte del Señor y a la casa del Dios de Jacob, y nos anunciará el camino de la salvación, y entraremos en ella; porque de Sión saldrá la ley y de Jerusalén la palabra del Señor''
(Isaías 2:2-3)

Claramente esta es una representación de lo que sería llamado en el N.T. ''el sermón del monte''. Un episodio en la vida de Jesús donde se dirige al monte a contar a sus seguidores sobre las ''bienaventuranzas''. 

''Ha sido llevado a la muerte por las iniquidades de mi pueblo''
(Isaías 53:8)

Refiriéndose a Cristo nuevamente quien fue empujado por los judíos hacia la tortura de los romanos. 

''Endurece el corazón de este pueblo, tapa sus oídos y ciega sus ojos''
(Isaías 6:10)

Por supuesto, esta es la reprobación del profeta para con los judíos quienes condenaron a Cristo. 

Malaquías

Veamos lo que dice ahora el profeta Malaquías en contra de los judíos. 

''No tengo mi complacencia entre vosotros, dice el Señor omnipotente, y no aceptaré un sacrificio de vuestras manos. Porque, desde el sol que nace hasta el sol que muere, mi nombre se ha hecho famoso entre los pueblos, y en todo lugar se ofrece un sacrificio a mi nombre, sacrificio puro, porque es grande mi nombre entre los pueblos, dice el Señor omnipotente''
(Malaquías 1:10-11)

Aquí vemos la clara reprobación de otro profeta importantísimo en el A.T. quien es Malaquías. Ya vemos desde el comienzo cuando se comenta ''No tengo mi complacencia entre vosotros'', que el Señor no los quiere consigo cuando hacen estos sacrificios carnales, junto con sus también, actitudes carnales (circuncisión).

No obstante todo lo anterior, San Agustín exhorta a los judíos a que se conviertan a las enseñanzas del N.T., las cuales, según su opinión, no excluyen las enseñanzas del A.T.


Conclusión

Esta es la última pluma que San Agustín levanta dialécticamente en contra de los judíos, sacando a relucir los pasajes de los salmos y otros del Antiguo Testamento. Nos queda por cierto, quedarnos con las buenas obras de San Agustín, aquellas que nos hacen pensar y reflexionar tanto en los fenómenos de la vida, como en la existencia de Dios y los hombres en este mundo. Este, si bien es el último libro en la obra de San Agustín, no será la última obra analizada en este blog, pues aún me falta (por descuido) escribir sobre la obra de San Agustín llamada ''Dialéctica''.