jueves, 25 de agosto de 2016

Lucio Anneo Séneca - Vida y obra (4 a. C. - 65 d. C.).


Retrato de Lucio Anneo Séneca

Puede ser que sea un filósofo olvidado frente a tanta proliferación de filósofos a través de la historia del mundo. No podemos dejar de lado a un filósofo tan importante del Imperio Romano como Lucio Anneo Séneca, quien haría de sucesor de Marco Tulio Cicerón frente a las personas importantes de la filosofía romana. Aquí veremos el resurgimiento del estoicismo y del moralismo para sentar las bases y dejarlas hasta la posteridad. Séneca no sólo escribió sobre cosas morales y filosóficas, sino que también compuso un cierto número de tragedias (que no las analizaremos) como gran literato que era. Veamos la vida y obra de un hombre brillantísimo que será muy reconocido en la historia.

Referencias:

(1) Guerrera celta que se rebeló numerosas veces en contra del Imperio romano. 
(2) Nunca hubo pruebas de que estuviera implicado, sólo sirvió como pretexto. 

LVCIVS ANNAEVS SENECA

Infancia y juventud

Séneca, también llamado ''Séneca, el joven'' nació en el año 4 a. C. en la ciudad de Córdoba, Hispania en la antigua Roma, aunque la locación de su nacimiento no ha sido 100% comprobada. 

Familia

Su nombre completo como sabemos es Lucio Anneo Séneca, llamado también Séneca el joven. Sus padres fueron Marco Anneo Séneca (llamado Séneca el viejo) quien era un destacado profesor de retórica y su madre fue Helvia de excelente carácter y educación. Sus hermanos fueron Lucio Anneo Novato (más conocido como Galión)quien fuera senador gobernador de Grecia y Mela, quien si bien no se destacó mucho en alguna área en específico, fue padre del mismísimo poeta Lucano. Era una familia tremendamente distinguida en la Antigua Roma y sobre todo en el curso de la antigua Hispania. 

Educación

Sus primeros años de infancia los pasó con su tía Marcia quien lo educó y formó como orador en la escuela de Atalo, quien era un filósofo estoico con una mezcla de pensamiento basado en el neopitagorismo. 

Séneca tenía una salud delicada (padecía de asma) y cuando niño fue a sanarse a egipto con su tía, pues ella era la esposa del prefecto Gayo Galerio (quien fuera gobernador de Egipto por el emperador romano Tiberio) quien lamentablemente murió en el hundimiento de un barco. Justamente en Egipto, Séneca aprovechó de estudiar administración y finanzas para luego estudiar geografía. También se dejó llevar por los relatos místicos egipcios, al igual que por el misticismo pitagórico.

Al volver a Roma en el año 31, Séneca estudió retórica, gramática y filosofía adoptando la filosofía estoica como estilo de vida. 



Carrera política

Imperio de Calígula

Luego de terminar sus estudios en Roma, en ese mismo año emprendió una carrera en política y leyes. En el 37 año que estuvo en Roma, Séneca presenció la caída de Calígula, quien lo había condenado a muerte por conspirar contra él. Sin embargo, Calígula se abstiene de condenarlo a causa de la grave enfermedad que tiene Séneca. En pocas palabras, el emperador dejaría que la naturaleza hiciera el trabajo sucio, pues la vida del filósofo no sería larga debida a su enfermedad. 

Para ese tiempo ya era un destacado orador en el Senado, despertando los celos y el enojo de los que lo rodeaban. Por miedo a que conspiraran contra él, Séneca se retiró de la vida pública. 

Imperio de Claudio

Con el asesinato de Calígula, Claudio toma el poder (de manera obligada) en el imperio romano. Séneca seguía siendo una persona importante y con mucha influencia en política.

No pasó mucho tiempo para que Séneca fuera nuevamente condenado a muerte por el emperador. Claudio le acusó de un adulterio que jamás pudo ser probado con las hermanas de Calígula. La pena no llegó a cumplirse y en vez de ser condenado a muerte fue condenado a exilio. 

En esos años de exilio (8 aproximadamente), Séneca estudió ciencias naturales y filosofía. Escribió las conocidas ''Consolaciones'' dedicadas a su tía, a su madre y a Polibio. La esposa de Claudio llamada Agripina, ayudó a Séneca a conseguir el perdón imperial. En el año 49 ya estaba de vuelta en Roma y en el año 50 ya era pretor en el cursus honorum. 

Un año después los favores se vieron mejores porque fue nombrado tutor de Lucio Domicio Ahenobarbo, quien sería el futuro emperador de Roma: Nerón. También fue tutor de Sexto Afranio Burro, quien sería un militar comandado por el mismo Nerón

Imperio de Nerón 

Claudio es asesinado el año 54 por envenamiento de su propia esposa. Séneca y Burro tenían toda la popularidad del momento, aunque no podían ser emperadores. Finalmente, Séneca fue nombrado consejero político y Burro quedaría como oficial militar; ambos trabajando en conjunto. En ese mismo año, Nerón es nombrado emperador de Roma.

Agripina, la madre de Nerón estaba resuelta de que debía seguir influenciando las decisiones de su hijo. Muchos emperadores considerarán aquellos tiempos como los mejores del imperio. 

Séneca y Burro administraban todo en el Imperio Romano, mientras que Nerón se dedicaba al ocio y al estudio de la filosofía; aconsejado por el mismo Séneca. Introdujeron reformas fiscales y judiciales promoviendo actitudes más humanas hacia los esclavos, reprimieron la rebelión de Boudicca(1) en Britania, ganaron la guerra en contra de Armenia y derrotaron a los partisanos. 

Cambio radical en el imperio

Con el paso del tiempo Nerón se fue hartando de las enseñanzas de su consejero político y filosófico. Séneca trató de sacar todos los comportamientos y pensamientos malos a Nerón, pero fue imposible hacerlo. 

En el año 59, la madre de Nerón fue asesinada. Todo estuvo planeado por la esposa de Nerón llamada Popea Sabina (que en ese tiempo solo era una amiga), ya que le molestaba mucho la influencia que ejercía en Nerón. Siendo así, Popea convenció a su pareja imperial que asesinara a su propia madre, diciéndole que ésta conspiraba contra él. 

Nerón la invitó a un barco con la intención de reconciliarse con ella, pero lo que Agripina no sabía es que Nerón quería hundir el barco con ella. Agripina se dio cuenta de esto y huyó nadando. Nerón aprovechó esto y acusó a Agripina de conspirar contra él. Esto calzó perfectamente con el oráculo donde Agripina preguntó si su hijo sería emperador; los arúspices le dijeron que sí, pero que su madre tendría que morir, a lo que Agripina dijo: ''con tal de que reine''. 

En el año 62, Burro muere (probablemente envenenado) y Séneca sabía que ya no podría seguir gobernando. Pidió su retiro de la vida pública nuevamente para luego dedicarse a sus trabajos filosóficos. Sin embargo, Nerón comenzó a desprenderse de las ideas del filósofo y empezó a seguir a Publio Silio Rufo, quien sólo quería la destitución de Séneca. En esos tiempos, Séneca era una figura notable y con mucha influencia, incluso más que el propio Nerón

Los aristócratas y toda la clase alta de Roma estaba molesta con la dirección que llevaba el imperio. Todos veían a Séneca como el culpable, pues era el mismísimo consejero político de Nerón por lo que los enemigos de Séneca comenzaron a conspirar contra él.

Séneca fue acusado inmediatamente de haberse acostado con Agripina (lo cual era absurdo), y de otras cosas que empezaron a desprestigiar al filósofo. Trataron de envenenarlo numerosas veces, pero siendo que Séneca comía solo pan y agua, los venenos nunca pudieron surtir efecto. Finalmente, en el año 65 fue acusado de estar implicado en la conspiración de Pisón para asesinar a Nerón(2). Fue la excusa perfecta para asesinar al filósofo. 

Muerte

Los secuaces de Nerón pensaban que Séneca se suicidaría al enterarse de la noticia y en efecto así fue. Séneca sabía que Nerón lo humillaría junto con su familia; por eso, el filósofo se abrió las venas cortándose las piernas y los brazos, pero al ver que el desangramiento demoraba mucho, Séneca pidió el veneno griego: la cicuta. Sin embargo, este tampoco parecía surtir efecto y finalmente pidió que se le llevara a un baño caliente para que el humo lo matara asfixiado a causa del asma. 

Toda su familia restante se suicidó al conocer el carácter malvado que había adquirido el emperador. 

Personalidad

Ciertamente la vida del filósofo no estuvo exenta de algunas contradicciones. En sus escritos veremos que Séneca abraza la pobreza, pues lo más importante es estar bien consigo mismo sin bienes materiales. Sin embargo, fue el mismo Séneca quien vivió de la manera contraria, teniendo muchas riquezas. 

Fue influenciado siempre por religiones exóticas, quizás a causa de que vivió en Egipto y luego en Roma. Adoptó el vegetarianismo como una forma de vida saludable y acorde con los principios estoicos, donde un hombre no hace (en este caso come) más de lo necesario, y si lo necesario es natural pues entonces aún mejor. 

No obstante, hay que pensar que el filósofo nunca dice en sus escritos que se siga SUS modos de ver la vida, él sólo habla de la virtud en general. Lamentablemente, sus enemigos tomaban esto como una contradicción y empezaron a despreciarlo.

Influencia posterior

A través de la historia, una propaganda de desprestigio se ha hecho contra Séneca. No obstante, su influencia de cómo llevar el gobierno fueron claves para algunos emperadores de Roma. Se decía que su obra era profundamente cristiana y que nunca lo revelaría (por el problema que tenían los romanos contra los cristianos sobre el paganismo y el monoteísmo). Se decía que incluso conocía a San Pablo, pero esta información no es confirmada. 

Su obra moral y filosófica fue estudiada por San Agustín, San Jerónimo, Antonino, Boecio (quien usó sus consolaciones antes de su muerte en prisión), Erasmo de Rotterdam y muchos otros intelectuales de la Edad Media, así como también a los filósofos modernos como Jean Jacques Rousseau, Montaigne y Calvin. 


Obras

Las obras de Séneca se dividen fundamentalmente en tres aspectos: consolaciones, filosofía y tragedias (estas últimas no serán tratadas en el blog). La filosofía de Séneca es más bien de orden moralista y estoica, mientras que fue uno de los primeros en realizar este género de consolaciones. 

Consolaciones:

  • Consolaciones a Marcia: Un libro de consolaciones dedicado a su tía Marcia quien lo cuidaba y educaba (40 d. C.).
     
  • Consolaciones a Helvia: Libro de consolaciones dedicado a su madre mientras Séneca estaba en el exilio (41 d. C.).

  • Consolaciones a Polibio: Libro de consolaciones dedicado a un liberto del emperador Claudio (43 d. C.). 

Filosofía:

  • Sobre la ira: texto que consta de tres libros sobre el concepto de la ira (41 d. C.).




  • Sobre la clemencia: libro que trata sobre la importancia de la clemencia en los líderes (56 d. C.).

  • Sobre la felicidad: libro que trata sobre el concepto de felicidad que tenía Séneca (58 d. C.).

  • Sobre los beneficios (59 d. C.): libro que trata sobre la interrogante de que si el sabio necesita recibir beneficios.

  • Sobre el ocio (60 d. C.): libro que trata sobre el ocio y la importancia que este debe tener con la virtud.

  • Sobre la providencia (63 d. C.):libro que trata sobre la existencia de la providencia y de las dudas del hombre sobre ésta. 

Cartas:






Conclusión

Pocos filósofos han sido tan consecuentes con su pensamiento como lo fue Séneca. Quizás, Diógenes de Sinope podría compararse y ningún otro. Llevar las ideas del estoicismo era muy difícil en esos tiempos y mucho más lo es ahora. Recordemos que la dieta que llevaba Séneca, de básicamente pan y agua era un principio estoico (otros dicen que asceta), del cual se debían olvidar los placeres en su mayoría. El suicidio también era una consecuencia estoica, pues si no había nada más por vivir, el suicidio era una opción válida en esta escuela. Me parece importantísimo el aprendizaje de la moral de Séneca, sobre todo en estos tiempos donde la moral ya es cualquier cosa.

miércoles, 24 de agosto de 2016

Cayo Julio César - Vida y obra (100 a.C.- 44 a.C.).




No solamente fue un importante político, sino que también fue un gran escritor. Personaje importantísimo para la antigua Roma, Julio César quedará proclamado en la historia como uno de los mejores generales jamás vistos de la era precristiana. Cientos de obras han sido escritas inspiradas en este emperador, e incluso el mismo título de ''César'' es ocupado hoy en día para referirnos a una persona que tiene el dominio sobre algo. Hoy aprenderemos la vida de este general que vivió la transición de Roma, pasando de una República a un Imperio. Por cierto, no veremos las obras de Julio César, sino solamente su biografía. 

Referencias:

(1) Véase el apartado de Mitología Romana
(2) Por eso que en las monedas romanas, en la imagen del César aparece la imagen de Venus. 
(3) Vestimenta que usaban los niños en la Antigua Roma. 
(4) Vestimenta que usaban los adolescentes en la Antigua Roma. 
(5) Cargo correspondiente a un alto sacerdote. 
(6) Habitantes de los Alpes. 
(7) Para más información véase el Imperio Romano
(8) Recordemos que el consulado constaba de dos personas, para que una mitigara la ambición de la otra. 
(9) La frase ''La suerte está echada'' que se pronuncia en latín ''Alea iacta est''. 
(10) Conocida como la batalla de Zela.
(11) La frase en latín era ''Veni, vidi et vici''.

GAIVS IVLIVS CAESAR


Años de infancia y juventud

Descendencia

Nacido el día 13 de Julio del año 100 a. C., Julio César proviene de una de las familias más nobles de toda Roma, la gens Julia. Su hogar estaba situado al oeste del Foro (en la actual Vía Cavour). Su descendencia provenía de los mismos dioses, específicamente del dios Junio(1) de ahí su apellido ''Julio''; y por otro lado, su descendencia de madre era por parte de Venus(2). A César le encantaba hablar sobre su descendencia.

Dicen que el significado de su apellido proviene de la palabra cartaginesa ''caesar'' que significa elefante. Cuentan las fuentes que César peleó con un elefante y lo venció, de ahí su apelativo de ''César''.

Su familia nunca tuvo mucho privilegio y por ese motivo, siempre intentaron que algún miembro se casara con alguien que proviniera de alguna familia influyente. El abuelo de César se casó con una mujer perteneciente a la gens Marcia y de ese matrimonio nació Julia, quien se casó con Cayo Mario que a su vez dieron nacimiento a los padres de César. 

Educación
Aurelia, la madre de César, era una mujer muy influyente en política y ayudó mucho a César a ingresar a este mundo. Su educación fue dirigida por Marco Antonio Gnifón, quien era experto en literatura griega y romana. Asistía muy regularmente al Foro para escuchar a los grandes oradores. 

Su infancia terminó cuando tuvo que dejar su toga pretexta(3) para ponerse su toga viril(4), que en la cultura romana era la transición de la infancia a la adolescencia (generalmente era una ceremonia). El día 15 de Marzo del año 85 a. C. Julio César viste su toga virilis, que era la vestimenta que representaba la adultez.  

Su padre muere cuando Julio César cumplía los 16 años de edad (84 a. C.). El padre alcanzó el segundo cargo más alto del Estado, la pretura. En ese mismo año, Lucio Cornelio Cinna nombra a César como sacerdote de Júpiter, cargo que recibe el nombre de flamen dialis(5).

Situación de su familia y amigos

Al mismo tiempo de recibir el cargo de flamen dialis, César se separa de su primera esposa llamada Cosucia y se casó con Cornelia, que a su vez era hija de Cinna. De este matrimonio nace su hija Julia en el año 83 a. C.

En esos años, César soportaba el gobierno del partido opositor donde Lucio Cornelio Sila era el jefe. Éste obligó a César que se divorciara de Cornelia, a la cual César se negó. Inmediatamente, el dictador le confiscó todos sus bienes además de retirarle el cargo de flamen dialis

César que estaba enfermo huyó a las montañas, pero rápidamente fue capturado por Cornelio Phagis, quien era un secuaz de Sila. César compró su libertad por dos talentos (cantidad superior a lo que se pedía), pero aún así César siguió huyendo de sus enemigos, hasta que sus familiares (quienes ya estaban adscritos al partido de Sila para salvarse) pidieron que fuera indultado y lo consiguieron gracias a las sacerdotisas de Vesta (diosa del hogar).

Sila aceptó a regañadientes el indulto de César diciendo:


''¡Guardaos del muchacho de toga suelta! Os haré caso, pero recordad que este hombre por el que interceden pondrá en peligro nuestra hegemonía''.

Luego de esto, César no quiso quedarse en Roma y trabajo con Minucio Termes en una provincia de Asia. Combatió en el asedio de Mitilene, que era una ciudad aliada de Mitrídates, luego lo enviaron a la corte de Nicomedes IV, rey de Bitinia. Trabó amistad con Nicomedes, ayudando al mismo tiempo a la ciudad de Bitinia. Una vez que el rey Nicomedes falleció, la ciudad de Bitinia quedó incorporada a la República, como él mismo había dicho que sería heredera. 


Carrera política

Termes le concedió a César la corona cívica confeccionada con hojas de roble por haber combatido en Mitilene. Luego se dirigió a la costa sur de la Asia Menor en el año 78 a.C. Fue ahí donde se enteró de la muerte de Sila, lo que lo obligó a dirigirse inmediatamente a Roma. 

César, quien estaba adscrito al partido popular de Roma, pensó que esta sería la oportunidad para emprender su carrera política, ya que Sila pertenecía al partido opositor, los optimates. Sin embargo, el dictador Sila había dejado muy sólidos algunos preceptos para mantener a los optimates en el poder. Julio César hizo esfuerzos para hacerse la popularidad de a poco, introduciéndose en el Estado haciendo cosas administrativas. 

Aprovechando ciertas agitaciones, César acusó de rapiña a un partidario de Sila llamado Cneo Cornelio Dolabela en el año 77 a. C., enfrentándose a uno de los abogados más férreos a Sila, Quinto Hortensio. Lamentablemente, César perdió en su acusación (lo que era esperable) pero así se granjeó su prestigio como orador, abogado y político. 

Anécdota con los piratas

Luego de esta fallida acusación se dirigió a Oriente, específicamente a Rodas para estudiar oratoria a manos del orador Molón. No obstante, nuevamente hubo una desgracia para César, pues en el Mediterráneo existían piratas que lo capturaron inmediatamente. La República romana estaba obligada a rescatar a sus ciudadanos cuando eran capturados por piratas. 

César se comportó como un rey frente a los piratas, jamás se vio como un esclavo entre ellos e incluso se daba el lujo de insultarlos. Los piratas le tenían respeto y finalmente le dejaron en libertad. Pero César había jurado, en broma, asesinarlos y así fue una vez que estuvo en tierra firme. 

De vuelta al sacerdocio

Debido a esta anécdota, César no permaneció mucho tiempo en Rodas, pero por otro lado, Roma pasaba otra crisis pues Mitrídates no reconoció el testamento de Nicomedes IV de Bitinia inició una guerra contra Roma. César decidió enfrentarse con él formando tropas en Asia Menor, lo que fue un éxito rotundo. 

Pasó el tiempo y César se entera que su tío Aurelio Cota había muerto repentinamente. Su puesto como sacerdote máximo (pontífice) de Roma fue dejado a su sobrino Julio César en el colegio de Pontífices. Esto le dió una sólida posición para quedarse en Roma. 

Desde ese momento, César pudo entrar más en política teniendo una masa popular asegurada, pero el fantasma y las cosas impuestas por Sila quien ya había muerto hace mucho, aún  era u nobstáculo importante. 

La cuestura

Las reformas populares de Craso y Pompeyo fueron apoyadas totalmente por Julio César, aunque de este no se sabrá hasta el año 68 a.C., donde se convertirá en cuestor. Los cuestores tenían un trabajo asistencial en la administración de la hacienda y, si se hacía un esfuerzo, el cuestor podría llegar al Senado. Fue asignado al propretor de la Hispania Ulterior (la que actualmente conocemos como Andalucia). Lamentablemente, su esposa Cornelia muere aquel año.  

César se lamentaba mucho, pues a su edad, Alejandro Magno ya estaba en un escalafón más avanzado. 

''A una edad en la que Alejandro Magno había conquistado el mundo, yo sigo siendo un desconocido''. 

Para hacerse más exitoso, César defendió a los ciudadanos de segunda clase llamados transpadanos(6). César no paró de defender el derecho a la ciudadanía a esta clase de ciudadanos, hasta que en el año 49 a.C., esta se hizo efectiva. 

Edil curul y pontifex maximus

En el año 65 a. C., César fue asignado Edil Curul, cargo que consistía en la supervisión de los mercados y de algunos aspectos políticos. El años siguiente fue nombrado juez en un tribunal y en el subsiguiente, cuando falleció el presidente del colegio sacerdotal fue nombrado pontifex maximus, y al mismo tiempo se casa con Pompeya Sila (nieta del dictador Sila). 

Con todos estos nombramientos, César ya era un personaje controversial. Un contrincante suyo del partido Optimate quiso sobornarlo, a lo que César le dijo: 

¡Pediré prestado para luchar aún más contra ti!

En todo caso, César sabía que estaba en una posición difícil, pues sus opositores harían de todo para acabar con él. 

Pasaba el tiempo y ocurrió la conocida conspiración de Catilina en el año 63 a. C. Cuando se descubrió dicha conspiración, Julio César quería que los acusados tuvieran un castigo más piadoso que lo que proponía Marco Tulio Cicerón, que era la ejecución. Para sorpresa de César, la propuesta de Cicerón fue acatada. 

La pretura

En ese mismo año, César fue elegido pretor el cual era un cargo inmediatamente por debajo de Consul. En su pretura, César presenció algunos hechos controversiales como el de Publio Clodio con la casa Bona Dea(7). También se separa de su esposa Pompeya, debido a que Publio Clodio entró en su casa vestido de mujer para yacer con ella.

Al mismo tiempo seguía de gobernador de Hispania Ulterior, donde sus deudas aumentaron considerablemente. Sus superiores querían quitarlo del cargo, pero Craso lo ayudó a pagar la deuda (830 talentos). 

Cónsul de Roma 

El consulado fue una posición dificilísima para César en el año 59 a. C., pues el Senado quería mantenerlo alejado. Ya no querían que César siguiera escalando y le pusieron al mando de la administración de los montes y pastos de Italia, junto con Marco Calpurnio Bíbulo(8)

Pompeyo se encontraba en circunstancias similares porque el Senado tampoco lo quería. César y Pompeyo sabían que a única forma de seguir adelante era uniéndose, e integrando a Craso para enfrentar al partido opositor. De hecho, César quería integrar a su bando a Cicerón, pero este se rehusó. 

El primer triunvirato

La alianza de Craso, César y Pompeyo formaría lo que más tarde se conocería como ''el primer triunvirato''. Este constaba de un gobierno de tres personas, amigas del mismo partido que gobernaban solidariamente entre sí. 

Al principio, el triunvirato estaba oculto al pueblo pero, para afianzar las alianzas, Pompeyo se casó con la hija de César, Julia. Luego, el mismo César se casó con Calpurnia, hija de Lucio Calpurnio Pisón. En el año 58 a. C., Calpurnio junto con Aulo Gabinio sucedió a César y Bíbulo. 

Para César, a pesar de pertenecer al triunvirato, el Senado le hacía la vida imposible. Prácticamente no prestaban atención a lo que decía y hacían de todo para impedir cualquier acción. César emprendió algunas campañas propagandísticas, pero que no dieron resultado. 

Guerras exteriores

La guerra de las galias 

Justamente cuando deja su consulado en el año 58 a.C., César es convocado para iniciar una guerra contra los galos (actual Francia). César se enfrentó a los galos con dos legiones con su mano derecha Tito Labieno que era su compañero de lucha política en Italia. 

La población de la Galia la constituían los celtas que además habitaban en el sur de Germania, en la llanura del Po y en Britannia. En la parte central de la Galia, Roma había derrotado a los arvernos e instauró la provincia Narbonense. Sin embargo, la Galia central se tomó nuevamente por los eduos, aunque estos finalmente se aliaron con los romanos. 

Mientras las cosas se desarrollaban de esa manera, los helvecios que eran pueblos que vivían cerca del Rin planeaban tomarse nuevamente la Galia. Este plan era llevado por Orgetorix que tenía un pacto con los eduos para derrotar a Ariovisto, un líder del pueblo germánico que mantenía la alianza con los romanos. Sin embargo, Orgetorix quería quedarse con todo el poder, dejando fuera a los helvecios, pero no le resultó pues los helvecios supieron de dicho plan. 

Julio César trató de obstaculizar el camino a los helvecios para mantener la paz en la Galia. Los helvecios le pedían autorización a Julio César para atravesar el Rin, pero el dictador no se los dio. Finalmente, el dictador pudo dispersar a los helvecios y obligarlos a retirarse. 

Derrotaron a los helvecios, lo que significó la hegemonía de Roma sobre la Galia central. César quería aún más porque intentó negociar el territorio con las otras tribus germánicas, pero, al ver que estas se negaban, César luchó con ellas para hacerse con el territorio. Ahora, Ariovisto y César serían rivales a muerte. Es ahí cuando Ariovisto le pide a César que deje tranquilo a las tierras germánicas pues ningún daño les ha hecho; han cuidado la tierra yla han defendido ¿por qué se la quitan ahora los romanos? César responde a esa pregunta diciendo que esa tierra no le pertenecía del todo a él, sino que más bien al Imperio Romano.

No obstante, nuevos enemigos se aproximaban como amenaza para Roma: los belgas. Entre ellos estaban los conocidos nervios al norte de la Galia. Estas tribus no eran del todo poderosas, César podía dispersarlos fácilmente cuando finalmente los derrotaron.  Los últimos belgas poderosos eran los llamados atuatucos, quienes fueron derrotados por César cuando éste decidió usar toda una artillería contra ellos; no tuvieron opción. 

Esto le significó fama y prestigio, tanto así, que cuando Craso se enfrentó a los belgas de la costa de Bretaña, estos últimos se entregaron sin resistencia alguna. El Senado hizo una fiesta de acción de gracias por este acontecimiento; César se había ganado la confianza de estos. 

Expediciones a Britania

Una vez reforzada y controlada las amenazas en la Galia, César pretende dirigirse a la conquista de Britannia. ¿Por qué dirigirse hasta aquí? porque sus habitantes eran enemigos de la República romana. 

La primera expedición fue realmente breve por las condiciones climáticas y por la dificultad que significaba atravesar el canal de la Mancha, en el año 55 a. C. De hecho, podríamos decir que la primera expedición de César en Britania fue de reconocimiento militar. 

La segunda expedición fue más fuerte aún que la primera. Preparó cinco legiones y dos mil jinetes. En esta tuvo más éxito, pues se pudo abrir pasó por Britania hasta llegar al Támesis. Su expedición terminó cuando pudo exportar el estaño a Galia, materia prima importantísima. Esto sucedió exactamente en el año 54 a. C., donde lamentablemente muere su hija Julia, hermana de Pompeyo. 


Los galos aprovecharon esta ocasión para volverse a revelar, pero nuevamente la rebelión fue sofocada por Julio César, aunque esta vez le costó mucho más. Tuvo que formar más legiones además de pedirle a Pompeyo algunas otras. 

La batalla de Alesia

Una de las rebeliones decisivas y más difíciles de enfrentar para Julio César fue la rebelión de Vercingétorix en el año 52 a. C. Este militar estaba a favor de los galos y dieron la batalla contra Julio César.

En ese momento, Comio, quien era un rey galo aliado de César se cambió de bando en esta misma rebelión. Vercingetorix estaba aprovechando la difícil situación que pasaba Roma, pues uno de los miembros del triunvirato había muerto, Marco Licinio Craso. Pompeyo, por su parte, comenzaba a unirse al bando conservador traicionando así a Julio César.

César lo persiguió y lo enfrentó encarnizadamente para destruirlo de una vez por todas. Vercingétorix perdía batalla tras batalla llegando a la suma de 40 aproximadamente, siendo la causa principal la falta de abastecimiento para sus propias tropas. Vercingétorix trató de reanudar los ánimos infructuosamente; se vistió con ropas excéntricas para llamar la atención, pero finalmente, cuando se enfrentó prácticamente sólo a César, se quedó en silencio y ordenó que se lo llevaran. 

Para sembrar el terror, Julio César corto los brazos de todos los que consideraba enemigos y los galos nunca más volvieron a rebelarse, Galia se pacificó. Ya para el año 50 a. C. la Galia dejó de ser considerada zona en conflicto y pasó a ser una provincia romana. 

Guerra civil

César seguía intentando escalar entre los cargos políticos de Roma, pero cada vez se le hacía más difícil, por no decir imposible. La única forma para proclamarse gobernador de toda Roma era la revolución. 

Tenía una legión asentada de Rávena y de ahí cruzó el Rubicón: un pequeño río que representaba la frontera entre Rávena e Italia. Inmediatamente, César ocupó la localidad de Rimini, donde se encontró con los tribunos a quienes les presentó sus soldados. César había declarado la guerra a Italia. 

Dicen que cuando estaba a punto de invadir Italia, César se detuvo unos momentos a pensar la consecuencia de sus actos. Atravesar el Rubicón significaría que no hay vuelta atrás, y por lo tanto la toma del poder. Es ahí donde Julio César pronuncia su gran frase:


''Sigamos el camino al que nos empujan los dioses y la injusticia de nuestros enemigos, la suerte está echada(9)''

La fecha de la guerra está situada en el año 49 a. C., específicamente en el mes de Enero. 

Intentos de negociación

El pánico se dejó desatar en Roma y Pompeyo necesitaba despegar sus tropas para atacar a César. Si bien César tenía planeado atacar toda Italia, también quería llegar a algún arreglo con Pompeyo, pero Pompeyo no quería ninguna negociación. Una de las estrategias de Pompeyo era quedarse en Grecia, para desde ahí combatir a César; sin embargo, César insistía en sus negociaciones diciendo que si Pompeyo se acercaba a Italia podrían restablecer el gobierno en Roma; no obstante, Pompeyo dijo que era César quien debía paralizar sus tropas. 

El mismo Cicerón trató de reconciliar a los dos bélicos personajes, pero sus esfuerzo fueron infructuosos y, siendo su amigo Pompeyo, Cicerón se retiró hacia Grecia. Pompeyo reunía tropas mayormente asiáticas para protegerse de un eventual ataque de César, mientras que para César lo mejor era apoyarse en sus tropas galas. 

La guerra

Dada las circunstancias, César y Pompeyo se enfrentan desplegando sus tropas. Cabe destacar que el general de Pompeyo es el mismo Bíbulo, quien fuera compañero de César como cónsul. Julio César sufrío grande pérdidas primeramente, incluso se pensaba que César iba a perder irremediablemente, sin embargo, las tropas de Pompeyo demoraban mucho sus ataques. 

La segunda derrota de César fue una lección de vida y de estrategia, pues en la batalla siguiente (y en cierto sentido la definitiva), César aprendería de sus derrotas. 

La batalla de Farsalia

Pompeyo se vio con mucha ventaja después de dos derrotas por parte de César y confiado, aceptó encontrarse con César para combatir en Farsalia. Un factor del cual Pompeyo dependía fuertemente era su superioridad numérica, por lo cual pensaba que sería fácil derrotar a César.

Unas de las cosas más favorables para César era que tenía un ejército muy fiel, mientras que para Pompeyo, sus soldados no eran muy leales. Por otro lado, el espacio de Farsalia era muy reducido y las tropas de Pompeyo eran muy numerosas, por lo que no pudieron desplegarse muy bien. 

Pompeyo había perdido irremediablemente y huyendo a su tienda se despojó de todos sus distintivos y arrancó hacia Chipre. Desde ahí quiso huir hacia Egipto y ahí fue asesinado frente a su esposa por el rey Ptolomeo XIII. 

A pesar de la muerte de Pompeyo, César siempre en el fondo quiso reconciliarse con él. Sin embargo, la negativa constante de Pompeyo obligó a que estos hechos ocurrieran. 

Otras batallas

César pasó el invierno en Alejandría, y aunque toda Roma estuviera gobernada y tranquilizada por él mismo, Farnaces II del Ponto quiso derrotarlo. La batalla(10) fue sorprendentemente breve concluyendo con la huida de Farnaces, aunque luego fue asesinado en su propia patria. 

Es aquí donde César escribe a un viejo amigo suyo de Roma otra de sus frases conocidas:


''Llegué, vi y vencí(11)''

Todo esto ocurrió aproximadamente en el año 48 a.C., donde en Roma se hicieron grandes fiestas y, que en el año 46 a. C. muchos homenajes se harían a quien se proclamaría dictador de Roma. 

Otra victoria ocurrió al norte de África que también fue muy breve terminando con la victoria de Julio César.


Época como dictador


Julio César hizo varias reformas que ayudaron a establecer para la posteridad la cultura romana. Aumentó los días del año en 365 con la ayuda de Sosígenes de Alejandría en el año 46 a. C., y cambió el nombre del mes Quintilis (quinto mes del año) a Julius, que en efecto era su mismo nombre. 

Consecutivamente, luego triunfó con la batalla de Tapso donde derrotó a los Pompeyanos: Catón el joven y Quinto metelo Escipión. 

Finalmente, ya en el año 45 a.C., Julio César derrota a los hijos de Pompeyo: Pompeyo el grande, Cneo y Sexto en Munda (de hecho, así se llamó la batalla). 

Reorganización en Roma

Luego de estas batallas, César se empezó a reconciliar con la gente incluso con Cicerón, quien, a pesar de estar a favor de Pompeyo, fue tratado con mucho respeto por el dictador. 

Hubieron algunas molestias por parte de legiones de Roma, pero César lo solucionaba fácilmente. 

Muerte

Su muerte se debió en parte a la clemencia que tenía con sus enemigos. Tenía sobre todo clemencia con los Pompeyanos, quienes eran sus principales contrincantes. De hecho, César les dio derechos y posiciones en su régimen. Este tipo de clemencia se explicaba quizás porque los Pompeyanos eran parte de Roma, en cambio, César fue implacable con sus enemigos extranjeros (contra los galos por ejemplo). Por supuesto, estas cosas hicieron enojar a sus enemigos, añadiendo también el estado actual de la República

Un grupo de 60 conspiradores liderados por Marco Junio Bruto y Cayo Casio Longino asesinaron a César en el teatro Pompeyano en el año 44 a. C. Cabe decir que un arúspice le dijo a César que se cuidara del día 15 de Marzo, porque ahí terminaría su reinado, y justamente, así fue. 

Cuando lo asesinaron, César en su agonía vio al mismísimo Bruto quien fuera su amigo y compañero y le dijo:

''¿Y tú también Brutus?''

Muchos dicen que esta frase no fue dicha en latín (Et tu Brutus?), sino más bien en griego y además añadiendo que le dijo ''hijo mío''. 

Personalidad

Cuando su padre falleció y tuvo que deshacerse de su toga pretexta, César era considerado una persona que no le gustaba las obligaciones sociales. Tenía un aspecto un tanto afeminado, pues no le gustaba llevar la toga muy apretada, contrario al prototipo de hombre de la antigua Roma. Por otro lado, César era siempre preocupado de su apariencia física, haciendo mucho deporte para mantenerse en forma. 

Le gustaba andar bien vestido y su calva le molestaba enormemente, tanto, que se peinaba hacia adelante para ocultarla. De ahí que la corona de laurel lo hiciera muy feliz al esconder aún más su calvicie. 

En la política era muy hábil, nunca desaprovechó un momento para escalar posiciones. Tenía un compromiso inquebrantable a su partido,pero también buscaba satisfacción personal. Siempre era muy cuidadoso de tener estas dos cosas en cuenta: la satisfacción personal y la lealtad al partido. 

Literatura

Otra de sus aficiones era el gran amor que tenía a la lectura y la escritura. Su escritos sobre la guerra de las Galias, si bien era propagandístico, tienen un mérito literario increíble. Esta experiencia de las Galias resultó sublimada en aproximadamente 60 libros. 

Vitalidad

Mucho se decía de su incontinencia sexual, de hecho, se decía que en su viaje al Este tuvo relaciones con el rey Nicomedes de Bitinia. El hecho no es probado, pero los expertos dicen que sí es probable, aunque para César esas cosas significarían temas superfluos. 

Conclusión

Sin duda, una de las figuras más increíbles del mundo romano. Su paso por la historia significó el conocimiento de las guerras más importantes de Europa y de su organización política. Costará a la historia que aparezca un personaje que se le iguale en ambición y que al mismo tiempo tenga cierta clemencia con sus enemigos. Quizás, uno de los personajes de la historia que se le podría igualar sería Napoleón, aunque más por las tácticas que por personalidad. Necesitábamos mostrar la figura de Julio César quien no puede pasar desapercibido en estos apuntes. 

lunes, 22 de agosto de 2016

Marco Tulio Cicerón - Filípicas (44 a.C.).

La palabra ''filípica'' no significa más que una acusación o un discurso pronunciado en contra de una persona. Fue empleado por primera vez por Demóstenes; filósofo griego quien reprochaba en sus escritos al rey Filipo II de Macedonia, luego de que Atenas y Macedonia habían firmado la paz. Demóstenes en sus filípicas trataba de advertir a los atenienses de este rey quien quería apoderarse de toda Grecia. Éste mismo término será empleado por Marco Tulio Cicerón.

Éste libro contiene una serie de discursos en contra del político y militar romano Marco Antonio, quien a su vez fue colaborador de Julio César en la Guerra de las Galias. La razón de por qué escribió estás filípicas, era debido a que Marco Antonio se había tomado el poder tras la muerte de Julio Cesar en el año 44 a. C.

El libro fue escrito el año 44 a. C. justo el año en que Julio César había sido asesinado en el Senado.

Glosario:
  • (1) Supplicatio: Ceremonia realizada para dar gracias a los dioses por las victorias del Impero Romano.
  • (2) Marco Antonio quería que los delincuentes tuvieran la oportunidad de ser absueltos por la medida ''ad populum'' que significa ''apelación al pueblo''
  • (3) Septenviro: Magistrados que conducían las colonias, y distribuían las tierras.




Primera filípica


Cicerón luego de llegar a su república, comienza el discurso hablando del templo de Telus (donde se escondieron los que asesinaron a Julio César) y del discurso que el mismo Marco Antonio había pronunciado. En él, hace la primera acusación diciendo que una vez ocurrido el asesinato de Julio César, Marco Antonio se apoderó de todos sus registros y antecedentes, agregando además, luego del asesinato, que no se pronunciara ninguna gracia ni decreto que hablará del antiguo cónsul de Roma.


Marco Antonio abolió el cargo de dictador de la república, dando así más liberta a Roma aunque ésta había servido en algunos momentos del Imperio Romano. Sin embargo, el Senado se vio inmovilizado, ya que era Marco Antonio quién hacía y deshacía, cayendo en total contradicción.

-Cicerón había sido invitado por Marco Antonio a asistir al Supliccatio(1) en el Senado por las victorias de Julio César, dándole así, la connotación de un Dios. Pero Cicerón no asistió debido a que el viaje lo había cansado; por lo tanto, considerando que su presencia en el Senado no sería una cosa relevante, no asistió a ella; aunque existía una multa para el Senador que no se presentase.

Por ésta razón, Marco Antonio amenazó Cicerón de ir con albañiles a derribar su casa. Sin embargo, Cicerón no pensó que era correcto dar culto a Julio César, debido a que el culto corresponde a los dioses.

Por otra parte, Cicerón acusa a Antonio de no publicar las actas de César y de tener la intención de deshacerse de ellas. Lo único que se encuentra de César en Roma son sus leyes. 

Además, Cicerón desaprueba totalmente la apelación al pueblo por parte de los condenados a delitos de lesa majestad, debido a que esta puede provocar que los jóvenes tengan más justificación(2) de cometer delitos en al República; y aún más importante, las leyes de Julio César se verían abrogadas. Cicerón exhorta al pueblo romano a que no se promulgue la ley.


Segunda filípica


En ésta segunda acusación, Cicerón relata la amistad que hubo entre Marco Antonio y él antes de que pasara la muerte de Julio César. Cicerón aduce la falsa amistad y benevolencia que Marco Antonio ha tenido con él. Culpó a Cicerón de escribirle una carta con acusaciones cuando en verdad, solo eran elogios (cosa de la que Cicerón se arrepiente).

Por otro lado, Marco Antonio culpaba a Cicerón de la muerte de P. Clodio (político romano) cuando el mismo Marco Antonio lo perseguía con una espada en el Foro. P. Clodio fue muerto por los hombres de Milón, supuestamente, bajo consejo de Cicerón. Además, se menciona un posible engaño entre la esposa de Clodio (Fulvia) y Marco Antonio.

Muchos políticos involucrados en la muerte de Julio César querían culpar a Cicerón de la muerte, aduciendo a que fue él quien la aprobó. Entre los asesinos, Marco Junio Bruto, quien fuera uno de los conspiradores en el idus de marzo del 44 a.c., fue premiado por Marco Antonio después de la muerte de Julio César con aumento de legados, gobiernos de provincia y le rindieron honor en los juegos olímpicos.

Otra acusación está relacionada con la incitación de Marco Antonio de iniciar la guerra civil que produjo Julio Cesar la cual es considerada la segunda guerra civil del Imperio Romano.




Tercera filípica

En ésta filípica se acusa a Marco Antonio de intentar apoderarse de la provincia de las Galias cuando Décimo Bruto gobernaba la parte Cisalpina de dicha provincia. Así, en otras provincias armaba ejércitos con la intención de lograr supremacía sobre los otros terrenos conquistados por Julio César. Sin embargo, la mayoría de los soldados se negaron a seguirlo.

Entre las acusaciones, Cicerón menciona el escrito que Antonio había hecho a Quinto Cicerón, sobrino de Cicerón e hijo de su hermano Quinto Tulio Cicerón, del cual se hablaba que presagiaba la muerte de su padre (Quinto Tulio Cicerón) y su tío (Marco Tulio Cicerón). Cicerón por lo demás defiende a su sobrino calificándolo como intachable e su comportamiento y sus costumbres (Estas alabanzas no están acorde a otros escritos de Cicerón donde su sobrino no se ve muy beneficiado).

Finalmente, Cicerón se queja de lo militarizado que se ha vuelto Roma al tener soldados por todas partes; desde el Senado, hasta las calles.

''Por esto, padres conscriptos, en el día de hoy (el primero que hemos podido, gracias a él, reunirnos y gozar del beneficio de expresar libremente nuestras ideas), debemos concederle autoridad para que pueda defender la República, no por espontanea protección suya, sino por encargo nuestro''.


Cuarta filípica

Cicerón ruega a los padres conscriptos que las armas se depongan, ya que Marco Antonio tiene sus soldados en toda Roma. Por otro lado, reclama la contradicción de éstos al enviar legiones a Antonio y a su vez premiar a los que han tomado las armas contra este. Aclara además, que la amistad que se tenga a Antonio, no puede ser pretexto para no proteger la República; es decir, antes de la amistad de Antonio, esta la República y su salvación.

¿Daréis a un malvado, a un perdido, un ejercito de galos y germanos, dinero, infantería, caballería, grandes medios de hacer la guerra? Y no vale como excusa decir -es mi amigo-. Hay que hacerlo con referencia a la patria.

Todas la leyes que regían a Roma en ese tiempo, han sido impuestas por la violencia sin jurisdicción previa, ni consultando a la ciudadanía. La excusa para esto según Cicerón, es para que no vuelva a suceder la dictadura vitalicia (dictator perpetuus) que proclamó Julio César luego de ganar la guerra civil.

Las acusaciones contra Antonio en ésta filípica van desde:
  • Venta de falsos decretos.
  • Venta de reinos.
  • Venta de derechos de ciudadanía.
  • Venta de privilegios.
Todos estos negocios que conciernen a la República eran hechos en la casa del mismo Antonio. Del mismo modo, llevaba el calculo de dinero de todos los ciudadanos y anotaba las posesiones que estos tenían Además, su mujer se encargaba de subastar los reinos que quedaban y repatriar a los desterrados sin decretos que lo ordenasen.

En la parte final, Cicerón menciona una carta enviada a un septenviro(3) colega suyo diciendo que no se angustiara por su carencia de riqueza, justificándolo con esta oración: ''Ve lo que quieres, porque seguramente lo que quieres lo tendrás''   Aquí se quiere mencionar que esa vez que Antonio tenía la posesión e información de todas las provincias y tierras del Imperio Romano, todo lo repartía entre su familia y amigos.

Cicerón exhorta a los padres conscriptos a no demorar la declaración de guerra contra Antonio.


Quinta filípica

Se comenta la poca fidelidad de algunos soldados contra Marco Antonio y como algunos soldados de César pudieron acabar con la armada de Antonio (por ejemplo, la caballería de Hircio).

Cicerón trata de establecer la denominación de emperador (Imperator) definiendo éste en los siguientes términos.

''Ante todo, llamaré ''Imperator''a aquellos cuyo valor, prudencia y fortuna nos han librado de los grandes peligros, de la esclavitud y de la muerte''.

Así, Cicerón menciona dos caudillos del Imperio Romano que hicieron frente a Marco Antonio como Pansa (cónsul de la república romana y partidario de Julio César), Hircio (político y militar romano amigo de Julio César)y el mismo Julio César; junto con mencionarlos, Cicerón dice que son ellos los que merecen el título de imperator mucho más que Marco Antonio, ya que ellos han protegido mucho más la República que el mismo Antonio (quién al contrario, la ha perjudicado al acaparar toda la riqueza del imperio y utilizarla en beneficio personal).

Finalmente, Cicerón ruega a los padres conscriptos darles el título de Imperator a estos 3 generales del Imperio Romano


Conclusión

Desde el comienzo se puede deducir que éste escrito de Cicerón, no pretende ser un libro filosófico, sino más bien, una acusación perteneciente a un determinado contexto histórico; en éste caso, el gobierno de Marco Antonio. La retórica que contiene éste libro (sobre todo la segunda filípica) y otros como Catilinarias, dieron paso a las distintas estrategias de la retórica que siglos más tarde se emplearán como ejemplo en los discursos públicos y sobre todo en las defensas de los acusados.  

Lamentablemente, ninguna de estas acusaciones pudo hacer que Antonio no llevara a cabo sus acometidos, ya que el 7 de Diciembre del año 43 a.c., Cicerón es proscrito y asesinado bajo el acuerdo de los cónsules (en su mayoría partidarios de Marco Antonio). A la hora de su muerte, Cicerón la acepto sin hacer resistencia, de aquí, su postura estoica y correcta de la vida que pasará de generación en generación. Ya vemos como en la historia evolucionó el estoicismo: Zenón de Citio, Séneca, Cicerón, Montesquieu, Imannuel Kant y Martín Heidegger.

Sin duda, un libro para conocer en detalle el Imperio Romano. Lo más curioso del Imperio Romano, es que a pesar de tener una independencia total sobre sus enemigos, de tener uno de los ejércitos mas poderosos del mundo antiguo, es que siempre fueron muy dependientes de la cultura de la Grecia Antigua; véase este mismo libro usando el mismo término de Demóstenes, véase el politeísmo que hicieron al romanizar los dioses griegos. Si bien pudieron ser dueños de Europa por mucho tiempo, de acuerdo a Edward Gibbon (hisoriador del Imperio Romano), fueron dependientes de su filosofía y cultura.

Marco Tulio Cicerón - De Officiis (Sobre los deberes) (Libro III: Entre lo útil y lo honesto) (44 a. C.).

Este vendría siendo el último libro sobre lso deberes y con esto también sería el último libro filosófico de Marco Tulio Cicerón antes de su muerte. Nos queda claro que la honestidad nos hace mejores, así como también la práctica de la virtud; que en todo caso, no solo nos servirá de manera particular, sino también para tener una mejor ciudad, una ciudad bien constituida. En este tercer libro veremos la posición entre la utilidad, la virtud y la honestidad. 

Referencias:

(1) Lo que Cicerón llamaba ''otium cum dignitate''.
(2) En el imperio romano, matar a un tirano no era considerado un crimen. 

Advertencia:

Léase en este apunte la palabra honesto puede estar relacionada como algo ''bueno'' y no en el sentido de algo ''verdadero''.

De Officiis

LIBRO III: ENTRE LO ÚTIL Y LO HONESTO


Dudas entre lo honesto y lo útil

Primero que todo, Cicerón nos habla sobre su soledad comparada con la soledad de su amigo Africano. Por supuesto, el tiempo de ocio hay que aprovecharlo con dignidad(1) no haciendo cualquier cosa, sino más bien filosofando. La soledad de su amigo Africano no era la misma pues este no filosofaba en absoluto, sólo se dedicaba a sus tareas básicas como ciudadano. 

Hay veces que lo útil se puede confundir con lo honesto; por ejemplo, si se le da muerte a un tirano que resulta ser un familiar ¿será honesto (bueno) matarlo?(2) Cicerón nos dice que si la respuesta es positiva; entonces la utilidad está por encima de la honestidad y viceversa. 

Convivencia humana

El pilar de la sociedad se destruye de manera muy fácil pensamos solo en nuestro beneficio. En efecto, si perjudicamos a alguien por nuestro propio beneficio, la convivencia humana se destruirá y nadie podrá vivir plenamente. 

En este tema entra a colación el derecho natural, pues la convivencia humana es algo que va acorde a la naturaleza. Las leyes están para darle reglas que cumplir al hombre, y así la sociedad pueda seguir avanzando. Es por eso que se debe seguir la naturaleza, porque esta sigue los preceptos naturales y divinos del ser humano. 

Pueden existir situaciones como por ejemplo, si un sabio tiene hambre y para no tenerla necesita robar comida a otro hombre, ¿no lo hará? Pues no debería si quiere ser honesto y si el sabio siempre busca el bien tampoco lo hará. 

Sólo puede haber un caso en el que un hombre puede arrebatar algo a otro, y este es solo cuando esta acción beneficia al Estado (o a un gran número de personas). 

Unión entre lo útil y lo honesto

Cicerón postula que la utilidad es honesta así como también lo honesto es utilidad. Cualquier acción mala nunca va a ser útil, por más beneficios que se extraigan de aquella ¿cómo? por ejemplo, si cometo un robo en beneficio propio, ningún hombre podrá confiar en mí, lo cual implicaría huir de la sociedad (la cual es imprescindible para sobrevivir en la vida). Así, como de alguna manera lo decía el viejo Sócrates, la injusticia es inútil. 

Es definitiva la frase de Cicerón en el mismo libro:

''¿Hay algo que sea tan precioso, o un interés tan deseable
que perdamos por él el prestigio y la gloria de hombre de bien?''

Las malas acciones, sobre todo las más viles, nos llevarán siempre a alejarnos y a huir permanentemente de la justicia, y así como la justicia es preferida por todos, la injusticia nos dejará solos. 



Conclusión

Me parece que el pensamiento ciceroniano es tremendamente noble y conforme con la justicia. La unión de la utilidad y la honestidad es definitiva, nada puede ser útil si no es honesto. ¿Queremos una mejor convivencia en la sociedad? entonces debemos guiarnos por la luz de la justicia y la honestidad, de lo contrario, caeremos en la vieja frase en latín ''homo homini lupu est'' (el hombre es el lobo del hombre. Pero tampoco se puede ser tan benevolentes, pues como lo dijo Cicerón ''La sanción hace al hombre justo''. Estas fueron las últimas reflexiones filosóficas de Cicerón

Marco Tulio Cicerón - De Officiis (Sobre los deberes) (Libro II: La utilidad en la vida) (44 a. C.).

Marco Tulio Cicerón no era alguien que se conformará con una sola posición, sino que también era sumamente crítico a las posturas filosóficas. En todo caso, recordemos que este libro está dedicado a su hijo Marco Tulio ¿Qué le dirían ustedes a sus hijos si quieren recomendarles qué pasos seguir en la vida? seguramente serían sumamente cuidadosos y escépticos para que no caigan en conceptos equivocados. Veamos de qué va esta utilidad de la vida de la que nos hablará el orador. 

De Officiis

LIBRO II: LA UTILIDAD EN LA VIDA

La honestidad y la utilidad

Ya habíamos visto suficientemente en el libro anterior lo que era la honestidad, ahora veamos este mismo concepto unido con la utilidad. 

Nada más útil existe que la filosofía, pero esta utilidad se ha confundido con el concepto de honestidad. Es decir, se han dicho tres cosas en cuanto a estos dos conceptos:

  1. Lo honesto en sí
  2. Lo honesto que no es útil
  3. Lo útil que no es honesto

De lo honesto en sí ya podemos diferenciarlo del libro anterior y en el tercer punto podemos nombrar muchas cosas. Las cosas útiles y que no son honestas son por ejemplo, los acueductos, los diques y las grandes estructuras. El segundo punto es cuando seguimos la moral, pero que a la vez, de esta no resulta nada en provecho o útil para nosotros mismos.  

Consejo para los gobernadores

Los gobernantes suelen dirigir sus ciudades a través del terror y así mantener a los ciudadanos seguros. Otros son déspotas, pero tarde o temprano son derrocados por las ansias de libertad de la gente (que también florece tarde o temprano). 

El gobernador que entrega benevolencia al pueblo siempre será recordado y además logrará todo lo que se propone.

La gloria  

La gloria siempre debe estar aclamada por todos, no solo por los particulares. Para lograr esto, debemos ver al mismo tiempo las formas de alcanzar la benevolencia:

  1. Con beneficios
  2. Buena disposición para hacer el bien
  3. Demostrar honestidad en los actos

La honestidad sigue siendo un punto importante, pues cuando se es inteligente y astuto pero no honesto, se puede ser el ser más odiado por todos. Es la honestidad la que genera confianza entre los ciudadanos. Es fundamental para esto tener de parte del gobernador la justicia, este concepto será clave para merecer el afecto de todas las personas. 

Ni siquiera los malvados podrán sobrevivir sin justicia porque la injusticia es perjudicial. Los ladrones no pueden robar a su propia cuadrilla ni los piratas podrán repartir el botín desproporcionadamente (pues sus mismos tripulantes lo matarían). 

Una de las cosas con las que más se consigue gloria siempre será la defensa. En efecto, siempre es más fácil atacar a las personas que defenderlas en sus posturas, así lo demostró el mismo Cicerón cuando defendió a más de una veintena de clientes a los que se consideraba imposible defender. Cuando los defendió exitosamente, su fama se acrecentó y por supuesto se convirtió en la persona que ya conocimos en esos años. 

Benevolencia y generosidad en los actos

La benevolencia no puede ser a cualquier persona, siempre debe ser para beneficio de las víctimas y los más necesitados. Se debe ser muy lúcido para saber a quién se va a dar cierto beneficio, procurar que la persona realmente lo merezca. 

Beneficiar a una persona buena no es sólo beneficio de esa persona, sino que para todos pues nunca será desperdicio que esa misma persona pueda ayudar a otras. También puede ser generoso renunciar un poco al derecho propio para seguir beneficiando a otro. 

Por otro lado, una vez que se haya realizado la transacción de cualquier beneficio, nunca pedirlo de vuelta o quitarlo de manera brusca, pues, en palabras simples ''lo que se da no se quita''. 

Conclusión

Más recomendaciones de carácter moral para que Marco Cicerón no caiga en los engaños de la gente. Ciertamente, de alguna manera me parece que Cicerón va más allá de sus antiguos predecesores a la hora de establecer los deberes. Me parece que aquí hay muchas cosas que se le han escapado a Platón y Aristóteles, pues esto mismos hablaban de conceptos, aunque Cicerón los une de alguna manera para darle sentido a otras cosas.