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sábado, 24 de febrero de 2018

Averroes - La destrucción de la destrucción (Libro I: La eternidad del mundo (Cuarta prueba))

Seguimos con la cuarta prueba sobre la eternidad del mundo. Esta prueba será un poco más extendida que la que vimos previamente. Lo que nos trae ahora Averroes es un poco más aristotélico, ya que es el mismo Al-Ghazali quien juega con conceptos como ''materia'', ''forma'' e ''intelecto. Difícilmente se puede refutar teorías filosóficas basadas en el razonamiento aristotélico, por lo que los religiosos tendrán un gran trabajo que hacer frente a este filósofo, que de todas formas es musulmán.

Referencias:

(1) Para mayor información sobre la discusión de los Universales véase ''El problema de los Universales''.

La Destrucción de la Destrucción



Primera discusión: La eternidad del mundo

Cuarta prueba

El sustrato y la materia

El tema comienza con una reflexión de Al-Ghazali:

''Al-Ghazali dice: los filósofos dicen que nada puede estar libre de la materia, ya que todo es precedido por la materia. Lo que en realidad cambia (según ellos) es la forma y los accidentes de cada cosa, y por supuesto, es la forma lo que determina si un ser es posible, imposible o necesario.

Si esto es así, entonces un ser nunca podría cambiar primigeniamente, sin embargo, sí lo hace. Por ejemplo, el ser se vuelve caliente, frío, cálido, etc. Estas son características de la materia más que de la forma. Por lo tanto, lo que está en la materia es el atributo y no en la forma. Si algo es posible, entonces puede ser creado.  

Si el ser creado está lleno de posibilidad (dice Averroes) ¿qué pasará con el agente? el agente en este sentido tendría las mismas posibilidades. La creación del ser es imposible sin sustrato, y como el sustrato siempre debió existir (porque siempre estuvo la posibilidad de ser creado), entonces podemos decir que la materia es infinita y eterna

Todo lo que es hecho, es hecho por alguien más en un regreso infinito de agentes y de materia. Sin embargo, debe haber un movimiento que haga no tanto existir a las demás cosas sino que más bien cambiarlas, producir una especie de intercambio. Por lo tanto, hay un sustrato principal que es el que se encarga de generar este intercambio. 

Posibilidad, imposibilidad, necesidad e intelecto

Tornamos con lo dicho por Al-Ghazali con respecto a la posibilidad e imposibilidad.


''Al-Ghazali dice: los conceptos de posibilidad, imposibilidad y necesidad son solo conceptos creados por el intelecto, y no tienen aplicación a la realidad. 
La prueba de esto es la siguiente: si la posibilidad necesita una existencia a la cual ser relacionada, la imposibilidad necesitará las mismas características. Sin embargo, ¿cómo podremos decir que la imposibilidad tiene existencia? Esto prueba que estos conceptos sólo existen en el intelecto. 

Que la posibilidad demande una materia existente es claro. Cuando hablamos de que algo puede ser posible, tenemos que entender que esta posibilidad necesita algo donde poder existir. 

Al-Ghazali es realmente sofístico cuando dice que lo imposible no exige un sustrato. Esto se debe a la relación de contrariedad que posee la dicotomía posibilidad/imposibilidad; en otras palabras, el sustrato de la posibilidad es contrario al sustrato de la imposibilidad. Si no existiera sustrato en la imposibilidad, no podríamos ni siquiera hablar de imposibilidad. 

Un ejemplo podría ser el siguiente: se dice que els espacio vacío es imposible debido a que la independencia dimensiones internas o externas a un cuerpo son imposibles. Otro ejemplo sería la imposibilidad de que dos cosas sean una al mismo tiempo; por ejemplo, si no existiera la imposibilidad de que el número dos sea tres, entonces dos y tres serían lo mismo. 

En resumen, el sustrato de la imposibilidad es necesario para dar existencia a los contrarios (que sin duda existen). 


''Al-Ghazali dice: el intelecto es el único que puede hacer posible que el blanco y el negro existan antes de ser posible su existencia. Como el blanco y el negro no son posibles por sí solos, estos son sólo posibles en un cuerpo. Sin embargo, nosotros (Al-Ghazali y sus adeptos) seguimos la idea de que el negro y el blanco sí pueden existir por sí mismos. 

De acuerdo con Averroes, todo lo dicho aquí por Al-Ghazali es un sofisma. La no-existencia es una especie de entidad que es contraria a la existencia, pero se suceden continuamente. La existencia no puede por sí misma convertirse en no-existencia, y la no-existencia no puede convertirse en existencia por sí misma. ¿Qué es aquello que logra cambiar la no-existencia en existencia y viceversa? Averroes nos dice que es la posibilidad. 

No-existencia → Posibilidad → Existencia
Existencia → Posibilidad → No-existencia

De aquí tenemos lo que habíamos hablado anteriormente, este ser que produce el intercambio es la misma posibilidad. 

Almas y sentidos

Ahora hablamos sobre las almas y los sentidos:


''Al-Ghazali dice: los filósofos dicen que el alma puede subsistir por sí misma, sin necesidad de un cuerpo o de materia. No sólo eso, el alma tampoco tiene esencia por lo que viene al caso la pregunta ¿de qué depende el alma?

Averroes dice no tener conocimiento de ningún filósofo que haya postulado tal argumento. 


''Al-Ghazali dice: el conocimiento depende de la posibilidad, pero el objetivo del conocimiento no. Si el objetivo del conocimiento desaparece, entonces también desaparecerá el conocimiento en sí mismo. 

En todo caso, todo lo que envuelve al conocimiento como los conceptos de posibilidad, imposibilidad y necesidad no existen en la realidad, sólo en el intelecto. En lo único que podría decirse que los filósofos están bien es en que los universales son los únicos que se entienden por el intelecto. 
Que los universales sólo existen en la mente no es tan cierto. Los universales existen en la mente realmente, como existen en la realidad pero sólo de manera posible(1)

''Al-Ghazali dice: que los universales no existen en la realidad es muy fácil saberlo. Una vez que un ser es destruido su posibilidad universal, y todo los concepto que involucra este ser individualmente habrán desaparecido. Esto prueba que los universales sólo existen en la mente. 

Este argumento de Al-Ghazali puede ser uno de los más débiles, pues se está diciendo que gracias a la existencia de un ser natural los universales pueden existir en la realidad, así como también en la mente. 

Conclusión

Sin duda que Al-Ghazali se entrampa a sí mismo con sus razonamientos sobre los universales. En todo caso, este Problema de los Universales (que hemos analizado en el blog separadamente) fue una discusión de muchos años que aún suscita reflexión y debate entre los más sabios. Sea como sea, la discusión sobre la eternidad del mundo queda hasta aquí con muchos puntos a favor de Averroes, quien, si bien no afirma la eternidad del mundo, tampoco está a favor de las teorías de Al-Ghazali

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