martes, 8 de diciembre de 2015

Aristóteles - La Política (Libro I: Estado y esclavitud).

La política ha sido un tema de suma importancia para los países y más en específico para los pueblos que habitan en ellos. Es verdad que últimamente la política se ha visto totalmente desprestigiada por las malas decisiones que se toman, y por las múltiples injusticias que sufre la gente. La desconfianza a la política ha sido tal, que de los mismos pueblos han surgido gobiernos basados en ideologías fuertes y convincentes. En este libro veremos muchos problemas que ocurren actualmente, pero no es porque el gran Aristóteles haya sido un vidente de lo que pasaría después, sino que son problemas que los gobiernos modernos no han podido solucionar hasta el día de hoy. Veamos que nos presenta en esta obra Aristóteles y reflexionemos ante la sabiduría del maestro.

Definiciones:

(1) Crematística: es el arte de obtener riquezas por medio de la compra y venta de objetos. Una vez que se adquiere el producto, éste se revende por el comprador a otros consumidores.
(2) Lanzadera: instrumento para la confección de tejidos. 

Referencias:

(1) Esto se refiere a lo que más tarde se denominará valor de uso (uso de las cosas) y valor de cambio (intercambio o venta de cosas).
(2) Es el primer caso de monopolio conocido en la Antigüedad. 
(3) Contrario a lo que pensaba Sócrates quien consideraba que tanto el hombre como la mujer pueden alcanzar la virtud. 

La Política


LIBRO PRIMERO: LAS COMUNIDADES

Capítulo I: Los fines de la comunidad


El Estado es un tipo de asociación y toda asociación tiende a un fin con miras a un bien. Esto se debe a que el hombre siempre va en busca del bien porque su causa final es la felicidad. y ésta se considerada un bien.

Debemos pensar al Estado como una gran familia con un padre que manda (un gobernador) y el resto de la familia que lo obedece (los ciudadanos). 

Capítulo II: Origen de la ciudad

Para explicar más específicamente la descripción de la ciudad, comencemos por los orígenes de ésta. 

Primero que todo, la relación de hombre y mujer es fundamental para que la ciudad pueda existir; sin ciudadanos no puede haber ciudad. La reproducción es necesaria y no sólo un propósito para armar una ciudad, sino que también es una necesidad humana; todos los animales quieren dejar su descendencia. 

La naturaleza ha dotado a los hombres y mujeres con la capacidad de procrear para preservar la especie humana. También de esto mismo se desprende que la naturaleza ha otorgado a los seres que tienen razón y entendimiento el mando, mientras que otros deben obedecer a estos. 

Creación de la familia 

Como dijimos, hay seres que han nacido para mandar y otros para obedecer. Entre los que deben obedecer son las mujeres, los esclavos y los barbaros. De hecho, la relación esposo y mujer (amo y esclavo) forma la familia; por lo tanto, dicha relación es una cuestión de la naturaleza. Aristóteles retrata éste hecho con la siguiente cita de Hesíodo. 

''La casa, luego la mujer y el buey orador''

Es decir, primero van los asuntos de la casa, luego los esclavos porque puede suceder que el hombre sea pobre y no tenga otro esclavo que un animal. 

Creación de la aldea

Luego de que está conformada la familia le sigue la creación de la aldea. Cuando un grupo de familias se dan servicios recíprocos entre sí, podemos decir que se ha conformado una aldea. 

La aldea es gobernada por un rey que al mismo tiempo gobierna el estado. El modelo de gobierno sigue el mismo modelo de mando que hay en la familia como gobierno patriarcal; el padre manda o quien sea más viejo. 

Creación del Estado

Una vez que se establecen un conjunto de aldeas podemos hablar que se ha formado el Estado. La naturaleza se relaciona con el Estado, pues, considerando que la familia proviene de un proceso natural, entonces el Estado también lo es. 

Familia → Aldea → Estado

Esta es la mayor prueba de que el hombre es un animal político (zoión politikon) porque la sola idea de formar una familia, obliga al hombre a asociarse. Donde veamos una ciudad o una aldea, tendremos la prueba de que el hombre es un ser gregario. 

Todo hombre que no aspire a ser un animal gregario o político será desplazado a vivir solamente en guerra. Esto se debe a que este hombre no podría vivir en comunidad y por lo tanto viviría en la polémica permanente; no podría unirse a nadie y estaría contra todos.  

Origen 

Así como el hombre alejado de la sociedad no puede formar un Estado, dicho hombre será tomado por animal o por un dios (entendiendo que sólo dios es autosuficiente). Con todo esto, lo primero que existe es el Estado, pues el hombre alejado de los demás no es capaz de formar nada. Como conclusión, debemos decir que el Estado es anterior a la familia; el todo es sumamente superior a sus partes y la familia forma parte del Estado. 

Estado → Aldea → Familia

El hombre alcanza su perfección solamente a través de la sociedad civil y no a través del aislamiento de la sociedad; ahí es considerado el hombre más aborrecible de todos. 

Capítulo III: Relación amo y esclavo

La asociación del amo se remite a los padres (hombres), los reyes, los gobernadores y a todo lo que se pueda relacionar con ejercer el mando. Otros dicen que el poder del amo es injusto y va en contra de la naturaleza, pues son las leyes quienes deben determinar quién es amo y quién es esclavo.

Capítulo IV: Teoría de la esclavitud

Comencemos por hablar de la propiedad antes de hablar del esclavo en sí.

La propiedad y la crematística(1) son instrumentos propios de la familia y parte de la ciencia doméstica.  Ahora, entre los objetos o propiedades que se pueden utilizar unos son animados y otros inanimados. Por ejemplo, en un barco, el capitán considera a su timón como un objeto inanimado y al marinero como objeto animado; los dos son de su propiedad pero el marinero es mucho mejor que el timón. 

Propiedades:

Instrumentos animados: esclavo.
Instrumentos inanimados: objetos de producción. 

Evidentemente, entre los objetos o instrumentos inanimados, sólo pueden ser considerados los que producen; por ejemplo, entre un vestido y una lanzadera(2) ésta última es la que produce y la primera sólo se usa. 

No es lo mismo usar que producir. La vida del amo es usar y la vida del esclavo consiste en producir ya sea sólo, o con ayuda de un instrumento.

Capítulo V: La esclavitud como derecho natural

Veamos ahora si la esclavitud es un derecho natural, o si más bien es un hecho contrario a la naturaleza. 

La autoridad es una cuestión que existe desde el nacimiento; hay hombres nacidos para mandar y otros para obedecer. La mejor de las autoridades es la que es ejercida por hombres y no por animales, puesto que la obra es más excelsa cuando el mando del mismo agente es proporcional. 

El alma y el mando

Hemos visto incluso en Platón cómo es que el alma es la que ejerce control sobre el cuerpo (también con Aristóteles). Esta relación amo/esclavo es la misma que la de alma/cuerpo. La razón siempre debe dominar a los impulsos del cuerpo, por esta misma razón, siempre será mejor un animal domesticado que uno salvaje, pues éste último no tiene razonamiento. 

El hombres es inferior a sus semejantes cuando éste solamente tiene fuerza física a corporal, estará sometido a la órdenes de los hombres que se guían por la razón. Además dicha relación y sometimiento redundará en beneficio del esclavo porque lo que él no puede ver con el uso de sus fuerzas, el amo, quien es capaz de usar la razón se lo mostrará. 

Así llegamos a la conclusión de que el amo manda por naturaleza y el esclavo debe someterse por una cuestión natural, que a su vez lo ayudará en su propio beneficio. 

Capítulo VI: Justificación de la esclavitud

Puede ser que quienes no aceptan la esclavitud como algo natural tengan algo de razón. Esto se debe a que la esclavitud puede ocurrir producto de una guerra (los vencedores toman como esclavo a los derrotados) o producto de una convención legal. Con respecto al primero, Aristóteles está de acuerdo debido a que sería aborrecible que alguien se transforme en esclavo por el sólo hecho de ejercer violencia sobre él. 

Sin embargo, Aristóteles nos dice que la guerra puede ser ejercida con virtud, pues el mérito de ganar la batalla no está exenta de virtud. Por lo tanto, es posible que por medio de la violencia los derrotados se vuelvan esclavos, sin ningún remordimiento de faltar a la virtud. 

Todo se debe a las circunstancias; es decir, un hombre que haya salido de la nobleza y tenga más virtud que quienes lo hicieron esclavo, lamentablemente tendrá que serlo pues las circunstancias lo ameritan así. 

Capítulo VII: Clases de esclavitud

Respecto a lo anterior se puede deducir que hay dos especies de autoridad: una que es ejercida sobre hombres libres y otras que es ejercida sobre esclavos por naturaleza. 

El concepto de esclavitud tienen una ciencia. Los amos deben saber servirse de los esclavos y no solo tenerlos, aunque su deber tampoco es muy extenso, ya que solamente debe impartir órdenes a los esclavos y estos tienen que obedecerlas. 

Capítulo VIII: La propiedad

Hemos mencionado anteriormente que la propiedad y la crematística eran parte de la ciencia doméstica. Debemos ver que hay bienes que son de uso y otros de adquisición(1), la economía doméstica se refiere al correcto uso de los bienes del hogar, mientras que la crematística a la adquisición de dichos bienes.

Formas de adquisición

Las formas de conseguir alimento difieren en cada grupo de hombres; por ejemplo, los gregarios van a buscar su alimento, mientras que los sedentarios viven de la propia cosecha y del ganado que tienen. 

Si bien estas son algunas formas de adquisición de alimentos, éstas no recurren ni al comercio ni al intercambio. 


Capítulo IX: Crematística

Las propiedades en general tienen dos funciones; uso y adquisición. Esto puede ejemplificarse con lo siguiente: un zapato tiene dos disposiciones; una es de uso y otra es de intercambio o venta. 

El intercambio era el método por excelencia, puesto que todos satisfacían sus necesidades básicas con esto. Cuando se excedían los bienes, sobrantes se intercambiaban con otras personas que lo necesitaba.

El dinero

No obstante, el intercambio de objetos se volvió tan difícil (los bienes eran muy grandes o a veces intransferibles) que por dicha necesidad se debió insertar la moneda. De ahí que la crematística sea tan importante porque al ser un modo de adquisición de bienes, ahora se ha transformado en un modo de adquisición y administración de dinero. 

Para Aristóteles el uso del dinero es absolutamente superfluo porque su valor no es más que una designación por convención humana y no por naturaleza. En efecto, su valor cambiará de acuerdo con las necesidades humanas que hasta cierto punto, el dinero no tendrá valor. 

Tipos de Crematística

Aristóteles diferencia dos tipos de crematística, una referida a la adquisición de dinero y otra a la administración de este. La primera puede ser peligrosa porque la adquisición puede llevarnos al desenfreno, debido a que el deseo de riqueza llega a ser algunas veces infinito, incluso llegando a conseguir bienes a toda costa. La segunda es la más apropiada pues ya no nos ocupamos sólo de vivir, sino que de vivir adecuadamente son los bienes que disponemos. 

El peligro de la primera es procurar los bienes ya no recurriendo a la compra y venta, sino por medio del robo y otros.


Capítulo X: Economía doméstica

Estos dos tipos de crematística constituyen la economía doméstica porque se deben tanto adquirir los bienes como administrarlos. Eso sí, dichas adquisiciones y administraciones pueden tener un fin contrario a la naturaleza; por ejemplo, la usura y el interés por ser más y más rico ¿Por qué es contrario a la naturaleza? porque ésto representa el interés del dinero por el dinero y no por causas de la naturaleza como alimentar o educarse. 

Capítulo XI: Otras consideraciones

Al constituirse la crematística en dos grupos, en el de la administración se hace necesario conocer el producto en profundidad para así sacarle mayor provecho; es decir, se debe conocer de ganado, de agricultura, de peces, etc. Por otro lado, tenemos el de la adquisición que tiene que ver más con el comercio. 

Esta se divide en tres ramas:

  • Comercio: que comprende el comercio marítimo, terrestre y al por menor.
  • Préstamo e interés: se aplica a los trabajos manuales o corporales.
  • Explotación: referida a los recursos naturales.

Con respecto al préstamo e interés el trabajo corporal es el más denigrante porque desfigura el cuerpo, mientras que el manual es un poco más digno. Aristóteles no se refiere a los otros dos restantes por ser una tarea muy ardua ahondar en ellos. 

La filosofía como modo de enriquecerse

Otros modos de enriquecerse han sido dados de manera fenomenal en la filosofía. Tenemos el ejemplo de Tales de Mileto quien, luego de adquirir todos los olivos de las ciudades de Mileto y Quíos, y de hacer algunas consideraciones astronómicas del tiempo, pudo prever que la recolección de aceite sería abundante. Cuando los agricultores buscaron los olivos en las ciudades se dieron cuenta que ya no estaban; todos los tenía Tales quien pudo venderlos al precio que él dispuso(2)

Capítulo XII: Autoridad parental y marital

La relación de autoridad recae en tres clases de poder dentro de una familia: el amo, el esposo y el padre. El padre es el que manda a su mujer y a sus hijos que también son considerados igualmente libres. El más experimentado y el mayor tendrá autoridad por quien es más joven y menos experimentado. 

Capítulo XIII: El hombre libre y el esclavo


La administración de los hombres, que son seres animados, es mejor que la administración de las cosas inanimadas, pero debe tenerse más cuidado en la administración de hombres libres que en la administración de cosa inanimadas.

¿Puede el esclavo tener razón o llegar a tener más razón que un hombre libre? Uno puede pensar que sí porque son igualmente hombres y quizás, capaces de las mismas cosas. Sin embargo, si esto fuera así ¿en qué se diferenciaría un hombre libre o un esclavo? más aún, ¿cómo podría diferenciarse el mandar y el obedecer?

Es correcto que todos deban tener virtudes, pero esas virtudes corresponden a cada naturaleza. Es decir, al hombre libre le corresponde mandar y al esclavo obedecer. La mujer que es considerada como esclava le es preciso ser sumisa y obediente como el esclavo; a los hijos les corresponde lo mismo. Ese es el tipo de virtud que les pertenece(3)

Finalmente, la mujer se diferencia del esclavo, ya que la mujer tiene voluntad, pero no autoridad, el esclavo no tiene ni lo uno ni lo otro. El niño tiene voluntad, pero la tendrá absolutamente luego de ser hombre y ciudadano.

Conclusiones

Es increíble pensar que quien consideraba la esclavitud como un derecho y una ley natural en la sociedad, cuando llegaba la hora de su muerte haya liberado a todos sus esclavos. En efecto, dicha justificación de la esclavitud está totalmente diseñada de manera cuidadosa y meticulosa. Hoy no es aplicable este tipo de derecho natural, pues todos somos libres para educarnos y ser hombres y mujeres que mandan sin importar la circunstancia en la que se encuentren. Quizás, la esclavitud pueda extrapolarse al conocimiento, es decir, quien no busca el conocimiento está condenado o condenada al sometimiento de la ignorancia y a la falta de información.

domingo, 6 de diciembre de 2015

Aristóteles - Ética a Nicómaco (Libro X: El placer y la vida contemplativa).

No hay nada más tentador que el placer y la pasión, aunque ya sabemos que el placer es un proceso y no realmente un fin porque el placer puede ser o bueno o malo. En los libros anteriores hablamos del placer combinado con la amistad y la felicidad, pero ahora hablaremos de placer en sí y lo que nos produce al sentirlo. Cosa difícil es enfrentar el placer cuando aparece tan inexorable. Nos arrojamos como si fuéramos animales guiándose simplemente por los instintos, pero luego vienen las consecuencias. En efecto, el placer parece un arma de doble filo donde podríamos sentirnos muy bien, como en otro momento muy mal. Hagamos una reflexión sobre esto y veamos el último libro de la Ética a Nicómaco. 

Referencias:

(1) Este concepto lo veremos en La Política junto con otro concepto llamado vida práctica o política.
Ética a Nicómaco


LIBRO DÉCIMO: SOBRE EL PLACER

Capítulo I: Opiniones sobre el placer


Estos dos conceptos están muy presentes en la vida de los hombres y sobre todo en la vida de los jóvenes, pues estos deben aprender del placer y el dolor para ser bien educados.

Frente a esto hay opiniones muy divididas porque por un lado tenemos a la gente que dice que es malo debido a que los hombres ruines se dejan guiar por ellos. Otra gente dicen que es justo satisfacerse con placeres porque es la naturaleza del hombre. Veamos estas discusiones más en detalle.

Capítulo II: El placer no es un bien supremo

Según Eudoxo, todos los hombres aspiramos al placer como una especie de fin, esto va tanto para los hombres como para los animales, los dos son susceptibles de tener placeres. El placer para Eudoxo es lo más supremo porque es lo contrario del dolor, que en realidad es lo más aborrecible. 

Según Platón, en palabras de Aristóteles, el placer no es el bien supremo, pues la vida es mejor que esté unida con la prudencia que con el placer. 

Sin embargo, para Aristóteles el argumento de los contrarios (que el placer sea un bien porque el dolor es un mal) no es correcto porque el mal puede ser contrario a otro mal que no es el mismo, y de la misma manera a una tercera especie de mal que es desemejante de las otras dos. Además para que un mal sea contrario a otro mal, el contrario debe tender al bien, por lo que habrá un mal que al mismo tiempo es bien, lo cual es absurdo. 

Capítulo III: Refutaciones del placer como bien supremo

Diferenciemos un poco el bien del placer. El bien es algo indeterminado, es decir, no es susceptible a más ni menos; por el contrario, el placer es algo determinado (susceptible a más y menos). Así también conocemos a gente que es más justa y menos justa que otras, pues la justicia también es afectado por el más y el menos. No obstante lo anterior, existen placeres puros que no aceptan más ni menos, otros aceptan la mezcla. 

Movimiento y devenir en el placer

Hay quienes dicen que el bien supremo es una cosa perfecta y que el movimiento y el placer no lo son; por lo tanto, aquí se encontraría el placer. Pero esto no sería del todo cierto; es decir, es verdad que uno puede verse afectado rápidamente o lentamente por el placer, pero eso no significa que el placer sea rápido o lento.  

Tampoco puede ser devenir porque el placer no es algo divisible, al contrario, es abstracto e indivisible, así como el punto o la monada. 

¿Puede el placer ser un bien? Esto podríamos verlo en el hecho de que la persona que es buena se le elogia, pero la persona que se deja guiar por los placeres es vituperada porque su fin en cuanto a los placeres puede ser malo o bueno. 


Capítulo IV: Naturaleza del placer

La vista es uno de los sentidos por excelencia de acuerdo con Aristóteles; es perfecta, completa y no necesita algo más para ser como es. Justamente esto es el placer, pues es completo y perfecto, no carece de nada y recordemos que es indivisible. 

El placer puede hallarse en los sentidos y mientras más excelso es el sentido, mucho mejor es el placer; por lo que la vista es el mejor de los sentido y el que mayor placer causa. Es también el placer, algo que perfecciona la vida, una esencia que completa la actividad y que es necesaria para la felicidad. 

Capítulo V: Placeres específicos

Existe una diversidad de placeres y es necesario separarlos y analizarlos. Por ejemplo, tenemos tipos de actividades: actividad del entendimiento y actividad de los sentidos. Como estos son dos tipos de actividades, entonces tendremos dos tipos de placeres. 

De hecho, los placeres chocan entre sí algunas veces; por ejemplo, quien sea aficionado a las flautas no podrá tener una buena conversación mientras escuche a un flautista, pues pondrá su atención y su placer al flautista. Lo mismo ocurriría a los aficionados a las conversaciones. Los placeres se excluyen los unos con otros. 

Lo más importante es que los placeres, cualquiera que estos sean, deben tener fines buenos; la actividad placentera bondadosa tendrá un fin bueno y la actividad indigna (pero placentera) tendrá un fin indigno. 

Capitulo VI: La felicidad


La felicidad es una de las causas finales que tienen los hombres, pues su fin es ese, ser feliz. 

Este concepto no puede decirse que es solamente una actividad o movimiento porque si fuera así, entonces el dormir, holgazanear o sufrir penurias serían cosas que forman parte de la felicidad y eso sería absurdo. La felicidad sí es un tipo de actividad, pero una actividad que se inclina hacia el bien y hacia lo deseable, y no deseable por otra cosa sino que por sí misma. 

Por otro lado, la felicidad podría parecer lo que es de agrado para cada uno. Por ejemplo, el tirano se divierte y se alegra con los bufones o las personas que hacen cosas divertidas, quizás para él eso es la felicidad. Sin embargo, siempre lo serio será mejor que lo que causa risa, pues ésto último es sólo para algo temporal, en cambio lo serio se propone para algo importante. Por lo tanto, la felicidad consistirá más en el esfuerzo que en la diversión.


Capítulo VII: La mejor felicidad

De lo anterior se deduce que la felicidad debe estar vinculada con nada más que la virtud. Además, la filosofía también esta relacionada, pues la vida contemplativa hace que podamos ver con mayor precisión los errores que hemos cometidos y enfrentarnos mejor a los venideros. 

Ahora, si queremos tener una vida contemplativa(1) también tendremos que tener autosuficiencia. En efecto, los sabios tienen esta característica de ser autosuficiencia y por lo tanto pueden ser felices. Por cierto, esto no significa que el sabio no deba estar con amistades o acompañado, de hecho, el puede ser feliz de estas dos maneras. 
   
Capítulo VIII: La vida contemplativa

Mucho se discute si en verdad es mejor la acción que la contemplación. El hombre sabio y contemplativo no requerirá de la acción para ser feliz, pero como debe ser también virtuoso, el sabio necesita imperiosamente relacionarse con los demás y darles su consejo, lo que no significa que la acción es totalmente necesaria. 

Hasta ahora queda de manifiesto que la actividad contemplativa es la mejor, pero aún falta agregar un punto y ese es el divino. Claro, los dioses no necesitan de acciones o movimientos porque son perfectos, y como perfectos sólo les resta la vida contemplativa. Por cierto, un dios no puede estar triste ni sufrir dolores; por lo tanto, está en la completa felicidad.

El hombre y los bienes exteriores

Sin embargo, como el hombre no es un ser autosuficiente sólo con la contemplación, éste necesitará de bienes exteriores, pues su cuerpo necesita salud y bienestar (alimentaciòn por cierto). Ahora, no es necesario estar absolutamente lleno de bienes ni tampoco de honores para ser feliz, siempre se debe escoger el término medio y preferir los bienes externos con moderación.


Capítulo IX: La práctica de la virtud

Suficientemente hemos visto lo que significa la virtud, pero no sólo se obra bien conociendo lo que es la virtud sino que también hay que practicarlos una vez que se conoce. 

Hay quienes dicen que los hombres adquieren la virtud por naturaleza, por hábito o por instrucción. En cuanto a la naturaleza, èste tipo de virtud sólo se consigue producto de una herencia u otorgamiento divino. También puede adquirirse por instrucción, aunque muchas veces no basta pues el alma del alumno debe ser virtuosa a través del hábito. Por lo tanto, los hombres, para ser virtuosos, deben tener su alma predispuesta para la instrucción y la única manera de hacerlo es a través del hábito. 

Pero puede ocurrir que un alumno sin ningún tipo de instrucción sea reticente a aprender o escuchar a sus mayores. En ese caso, la legislación debe obligar a los jóvenes a instruirse desde el comienzo, de otra manera, no podrían nunca comenzar con la instrucción. Uno de los deberes de los legisladores es exhortar a los jóvenes a seguir una instrucción digna y virtuosa, premiar al virtuoso y castigar al desobediente. Por medio de las leyes nos hacemos buenos.

Conclusión

Vemos en este libro que Aristóteles no repugna ni enaltece el placer como lo hicieron sus predecesores. Por supuesto que el placer es algo necesario en términos biológicos; si tengo hambre necesito satisfacer esa demanda y cuando lo haga se convertirá en un placer. Por otro lado, hay placeres que nos hacen sentir bien, pero que no son absolutamente necesarios para la supervivencia. Además, hay que agregar a esto la virtud o más bien, hacer que la virtud misma de ayudar a las personas o ser mejor en la vida, un placer. Quizás pueda sonar ascético, pero la idea es ser virtuosos en la vida y lo mejor podría ser de esta forma.

viernes, 4 de diciembre de 2015

Aristóteles - Ética a Nicómaco (Libro IX: Sobre la amistad (continuación)).

¡Vaya! ¿qué más nos queda decir de la amistad? quizás ahora falta ver las dificultades que surgen en la amistad, ya que hemos visto al descripción completa de ella. Además, no hemos habado en profundidad de la relación de la amistad y la felicidad ¿será que somos más felices en la medida que tenemos más amigos? hoy en día este concepto que les presentamos ha adquirido otros significados más allá de lo que nos puede mostrar el gran Aristóteles. Muchas personas hacen amigos por Internet y parecen tener una amistad genuina incluso a distancia (en el mismo país o en otros países), pero, en mi opinión, siempre es mejor tener una amistad frente a frente que por medio virtuales, aunque debo decir que sí ayuda bastante.

ADVERTENCIA: en este libro se empleará la palabra amor para referirse a los amigos y es que la amistad es entendida en esos términos. No es el amor de pareja, sino más bien un amor de amistad.

Referencia:

(1) Es decir, un animal social.

Ética a Nicómaco


LIBRO NOVENO: SOBRE LA AMISTAD (CONTINUACIÓN)

Capítulo I: Diferencias entre los amigos

Una de las cosas que pueden acabar con la amistad es la falta de proporción entre los amigos, por ejemplo, cuando el amado no corresponde al otro con el placer y uno de los dos es más amado que el otro. 

Incluso, la amistad entre los hombres buenos puede verse afectada porque muchas veces no se cumple lo que se promete. Pero cuando hay virtud entre los hombres que realizan dicha transacción, no puede haber quejas ni reclamos. 

Capítulo II: Conflictos

Hay conflictos que se presentan en la amistad que serían difíciles de solucionar. Imaginemos que hay un hijo que va a la guerra, ¿a quién le hará caso en la guerra? ¿al padre o al soldado? Si quiere seguir un modelo de virtud ¿a quién seguirá? ¿al padre o a un hombre virtuoso?

Si lo vemos desde otra perspectiva, las preguntas anteriormente hechas corresponden a una especie de ''deuda'' entre el hijo y las personas que debiera seguir o considerar. Para que no hayan conflictos el hijo debiera escuchar las dos partes, es decir, para que no quede ''deuda'' hay que seguir lo que dice el padre y seguir lo que dice el hombre virtuoso, puesto que los dos quieren lo mejor para el muchacho. 

No obstante, la fidelidad y ''pago'' de ''deuda'' al padre va corresponde primero que a cualquier otro, ya que fue éste el que nos dio la vida. 

Capítulo III: Ruptura

Ya vimos cómo se producen las rupturas en las amistades basadas en el placer y en la utilidad. Obviamente, una vez que se deshace el interés o el placer estas amistades se acaban, pero bien podría el amigo (una vez que se rompe en esta amistad) fingir que le agrada la bondad o las costumbres del otro amigo. Una vez que el engaño es descubierto, los amigos dejan de tener amistad y estará en su opción volver a intentarlo de nuevo. 

¿Conviene volver con quién ha engañado? Si dicho hombre (o mujer) es capaz de corrección se debe dar una oportunidad, pero quién se ve que no va a cambiar, entonces no. 

Amistad y madurez

Cuando una amistad es construida cuando se es niño, pero si entre los dos amigos uno crece y madura más que el otro ¿seguirán siendo amigos si ya no les gustan las mismas cosas? Aristóteles nos dice que no, pero si el maduro necesita hacer algo bueno entre dicho amigo (que ahora es pequeño) y un extranjero, el maduro entonces tendrá que hacer justicia al amigo antes que al extranjero. 

Capítulo IV: Los amigos

Es claro que el origen de la amistad es el amor que se tienen los amigos. El amigo es aquel que procura las cosas buenas al otro amigo, y además de complacerse con su compañía.

Esta característica es propia del hombre bueno, pues éste quiere o bueno y o beneficioso para sí, pero también para los otros y mucho más si son sus propios amigos. Además, dichos amigos deben tener algo semejante porque como dice Empédocles, lo semejante debe estar con lo semejante.

Los hombres malos 

En el caso de los hombres malos, estos siempre quieren estar acompañados por deben escapar de sí mismos. El hombre malo está sumido en sus recuerdos desagradables y necesita alejarse de ellos; la compañía contribuye a este alejamiento de tales recuerdos. Por lo tanto, el hombre no puede tener amor por sí mismo y debe esforzarse todo lo posible par ser un hombre bueno; sólo así podrá estar en paz. 


Capítulo V: Benevolencia

La benevolencia es distinta de la amistad porque esta se puede ejercer incluso con gente desconocida, y además puede pasar desapercibida mientras que en la amistad esto no es posible. 

Pero por otro lado, la benevolencia puede ser el origen de la amistad. Es un amor superficial que puede crecer con el tiempo, pero jamás puede significar una real amistad al instante. 

Capítulo VI: Concordia

La concordia es una especie de igualdad que se da entre los amigos. No decimos que dos personas tienen concordia porque tienen un idéntico parecer, de hecho, la concordia consiste en estar de acuerdo con las cosas prácticas y no abstractas de la vida; por ejemplo, la concordia en una ciudad consistirá en establecer la elección de las magistraturas u otros cargos. 

De lo anteriormente analizado, pareciera ser que la concordia es la amistad civil, ya que en esta se pueden dar los ejemplos de concordia. 

Evidentemente, la concordia no se puede dar entre los hombres malos porque estos siempre estarán en disputa. Del mismo modo ocurre con la amistad porque uno va a querer hacer más que el otro, por lo tanto, así no podría existir la concordia, 

Capítulo VII: El benefactor

El benefactor es aquel hombre que da dinero y se contenta con quien recibió dicho dinero. Lo mismo podría aplicarse con la amistad y decir que el verdadero amigo se alegra con amar a su propio amigo, y se contenta con más con dar que recibir. 

En efecto, esto podemos verlo en los artistas porque ellos al hacer su obra, aman más su obra que su obra lo ame a él o ella (obvio, pues una obra inanimada no puede amar y sin embargo el artista la ama sin recibir amor). 

Capítulo VIII: Amor a sí mismo

Es común que a las personas que se aman a sí mismas se les censure, pues parece ser un gesto de egoísmo y deshonra. Se dice que estos hombres son los que sólo trabajan para provecho e interés de ellos mismos. Se dice también que el hombre bueno, por el contrario, es aquel que más que preocuparse de sí mismo se preocupa siempre de los demás.  

Por otra parte, mucha gente dice también que lo que primero hay que hacer es amarse a uno mismo, ya que luego de amarnos a nosotros mismos podremos amar a los demás. 

Todas las personas debaten frente a estas dos posiciones, pero la verdad es que hay que hacer una diferencia. Quien se procure todo los bienes en perjuicio de los demás, entonces diremos que es egoísta y que lleva el amor a sí mismo al extremo. Pero quien sólo se hace justicia tanto a su cuerpo como a su mente, no puede decirse que sea egoísta ni mucho menos. Es decir, el hombre que se procura bienes pero los utiliza de forma virtuosa y justa, no será considerado como egoísta. 

Capítulo IX: La felicidad en la amistad

Comenzando nuevamente por la opinión de la gente, Aristóteles nos dice que la opinión común dice que cuando un hombre está colmado de bienes y servicios no tiene necesidad de amistad. De ahí la frase...

''Cuando Dios da bienes, ¿qué necesidad hay de amigos?''

No obstante, ésta aserción sería insuficiente porque el tener amigos es el mejor de los bienes externos que puede tener el hombre. Sería absurdo que un hombre quisiera colmarse de placeres y bienes por la soledad, ya que como lo dice la base de la teoría aristotélica, el hombre es un animal político(1)

Dicho esto, queda claro que el hombre que se acompañe de amigos será el más feliz, en cambio, el hombre solitario no será feliz en absoluto. 

La vida del bueno

Así como el hombre es un animal político, lo bueno será estar con los amigos y compartir con ellos. Vivir es una cosa que en sí misma es buena y apacible, pues es aquí donde podemos encontrarnos con el otro. 

La vida del bueno consta de sentir y qué más agradable que sentirnos escuchados y considerados; para eso necesitamos la amistad y la presencia del otro. Esto nos dará mucha felicidad, pues la amistad es la felicidad. 

Capítulo X: Número de amigos

Para leer este capítulo debemos recordar los tipos de amistades mencionadas en el tercer capítulo del libro VIII de este tratado. Los amigos por utilidad no necesitan ni muchos ni pocos amigos porque tener muchos es cosa trabajosa y no tener ninguno es penosa. 

En todo caso, el número de amigos debe ser una cosa conveniente porque la convivencia en la ciudad se debe hacer entre muchos; para eso está la amistad. Por lo mismo, no es conveniente hacerse de muchos amigos porque con unos habrá que estar bien y con otros se tendrá que comparecer, por eso, sólo necesitamos los amigos que sean necesarios para la convivencia. 

No obstante todo lo anterior, parece ser que hay personas que tienen muchos amigos pero más que amigos, se mantiene una ''amistad'' con muchos por una cuestión de cortesía. Realmente, dichas personas tendrán un número reducido de amigos verdaderos. 

Capítulo XI: Amigos en las buenas y en las malas

¿Cuándo se necesita a los amigos? ¿en las buenas o en las malas? En ambas se necesita porque en momentos de debilidad debemos sostenernos con alguien más, mientras que en las buenas se necesitan porque como amigos se deben conceder favores y hacer el bien con quien lo necesita. 

Sin embargo, debe admitirse que se necesitan más en las malas que en las buenas. Es preferible que en momentos de debilidad el amigo sea alguien útil para que ayude de manera significativa, pero por otro lado la sóla presencia de amigo es preferible a no tener amigos que puedan ayudarnos. 

La sola presencia de un amigo puede ayudar en sentirnos bien y si dicho amigo es virtuoso como aquel que lo necesita, entonces la amistad será mucho mejor. En toda circunstancia es valiosa la presencia de los amigos. 

Capítulo XII: La convivencia

El sentido de la existencia es en sí algo agradable y mucho más si contamos con la presencia de alguien. Es siempre preferible que la comunidad tenga hombres de bien porque de otra manera, los hombres se comunicarán lo malo y podría ser que se conspire contra la comunidad y sus ciudadanos. 

Conclusión

Es curiosa la forma de ver la amistad en cuanto a la deuda y la paga. Mientras exista este equilibrio existirá la amistad, pero también es algo que se desarrolla mucho más allá  que una simple deuda en mi opinión. Creo que hoy en nuestra sociedad hay quienes parecen estar felices en la soledad; por ejemplo, los ermitaños o quienes deciden vivir fuera de la sociedad por X razón. El término de felicidad se ha vuelto cada vez más subjetivo en nuestra sociedad, y parece ser que la amistad es un concepto excluyente. Esperemos que no sea así y sigamos los consejos de Aristóteles para no estar nunca más solos. 

jueves, 3 de diciembre de 2015

Aristóteles - Ética a Nicómaco (Libro VIII: Sobre la amistad).

La amistad es un tema transversal en los niños, adultos e incluso ancianos y como vemos, no era un tema excluyentes entre los grandes pensadores griegos. En efecto, ya Platón nos habló de la amistad en el diálogo Lisis analizado en este blog. ¿En qué se funda la amistad? ¿en el placer? ¿en el interés? ¿en el amor? Las respuestas las veremos en éste libro y quizás se formulen más preguntas y más respuestas todavía porque el libro IX de la Ética a Nicómaco, también se trata sobre la amistad. ¿ Lo ven? el tema de la amista cobra vital importancia para el Estagirita. Veamos que nos puede decir el gran Aristóteles sobre la amistad.

ADVERTENCIA: en este libro y en el siguiente se empleará la palabra amor para referirse a los amigos y es que la amistad es entendida en esos términos. No es el amor de pareja, sino más bien un amor de amistad

Definiciones:

(1) Timocracia: tipo de gobierno donde sólo los ciudadanos con propiedades pueden votar.

Referencia:

(1) Lo que quiere decir éste proverbio es que debe pasar mucho tiempo para realmente conocer a alguien.  La sal es una de las cosas que más difícilmente se acaba en un hogar.


Ética a Nicómaco


LIBRO OCTAVO: SOBRE LA AMISTAD

Capítulo I: Naturaleza de la amistad


Podríamos decir que la amistad es un tipo de virtud o que por lo menos está unida a ella. Nadie querría vivir sin amistad aunque tuviera todas las riquezas que quiera; siempre se va a preferir la amistad. 

De hecho, a mayor riqueza mayor peligro de que ésta desaparezca, por eso, cuando no queda más de aquella estarán los amigos para dar consuelo y refugio. 

La amistad en los hombres

Como dijimos en la introducción, los hombres necesitan la amistad no sólo en una etapa de sus vidas sino también en otras.

Jóvenes: tienen necesidad de amigos para no errar en las cosas (el aprendizaje como algo social).

Adultos: tienen necesidad de amigos para realizar acciones ilustres (el compañerismo en la batalla).

Viejostienen necesidad de amigos para que los asistan en lo que ya no pueden realizar.

La amistad no es un fenómeno que sólo ocurre con los hombres, pues estos son amistosos con su propia raza, así como los animales también lo son entre ellos. 

Los hombres que más necesitan amistad son los legisladores porque las ciudades que se tienen enemistad viven en gran tensión. 

Capítulo II: Lo que se ama


No cualquier cosa se puede amar, sólo se aman las que son..

  • Dignas de amor
  • Lo bueno
  • Lo apacible
  • Lo útil


No obstante, es plausible preguntarnos si en realidad el hombre busca lo bueno en sí mismo, o en realidad sólo busca lo que a él le parece que es bueno.

En otras palabras, surge una discrepancia entre la objetividad y la subjetividad de la cosa amada. Sin embargo, Aristóteles indica que no habrá ninguna diferencia entre amar lo uno o lo otro, pues lo que es amado por sí mismo (objetivo) también coincidirá con lo que es amado para sí (subjetivo), al menos de forma parcial.

Capítulo III: Clases de amistad

A partir de la relación expuesta anteriormente se pueden destacar por lo menos tres clases de amistad:

Amistad recíproca

Cuando la amistad entre dos amigos es mutua, entonces estamos hablando de una amistad recíproca. Esta amistad surge por los sentimientos correspondidos entre los dos hombres (o mujeres, o mujeres y hombres) donde no hay ninguna clase de interés ni utilidad. 

Este es el tipo de amistad que más perdura en el tiempo porque dichos hombres se desean el bien los unos a los otros. 

Los hombres tendientes a éste tipo de amistad son los hombres buenos y virtuosos. Son los hombres que se asemejan en bondades y cualidades.

Amistad por utilidad

Aquellos que se aman de ésta manera no se aman recíprocamente, es decir, en si mismos. La amistad solo se mantiene por el provecho de algún bien o utilidad. 

En esta parte la amistad sólo se enfoca en el interés sin tener en cuenta con quien se es amigo. Por esta misma razón, la amistad por utilidad es de poca duración y fáciles de romper porque dura hasta que dura el interés. También puede deshacerse ésta amistad cuando al amigo que esta interesado le interesa otra cosa.

Los hombres que prefieren este tipo de amistad son los viejos, pues ya no quieren un amigo sino les da provecho o utilidad alguna. También es un tipo de amistad que se da entre el ciudadano y el extranjero. 

Amistad por placer

Es un tanto parecida a la anterior, pues el interés se dirige a lo placentero que es estar con dicha persona. Por ejemplo, puede estar con una persona porque le gusta su conversación o su compañía.

Similarmente a la amistad por utilidad, el placer no está enfocado en el amigo sino que en el placer en sí mismo. Así como los placeres pasan, éste tipo de amistad igual pasa. 

Los hombres que tienden a tener este tipo de amistad son los jóvenes porque viven conforme con sus afectos, y siempre quieren experimentar placeres nuevos. 

Por supuesto que la mejor de las amistades es la recíproca porque es la más duradera y la que pertenece a los hombres buenos y virtuosos. Por lo demás, ésta es una amistad de muy rara frecuencia, ya que necesita de tiempo para realizarse. De ahí el dicho proverbial citado por Aristóteles.

''Nadie puede conocer a otro hasta haber terminado una bolsa de sal(1)''.

Capítulo IV: Hombres buenos y hombres malos

La amistad surgida por el placer tiene cierta semejanza con la amistad recíproca. Un ejemplo de esto recae en que el amor que también el amor que se tienen recíprocamente es provechoso y placentero, además de que puede ser útil. 

Sin embargo, al acabarse el interés y el placer en esa amistad recíproca, puede ocurrir que el amor termine, es decir, si está más enfocado en el placer y el interés más que del amor en sí. Por otro lado, sólo los hombres buenos pueden ser amigos entre sí y en ciertos casos también de los malos, pero los malos no pueden ser amigos entre sí porque no soportarán hacerse daño entre ellos. Quizás, lo que puede mantener la amistad en los hombres malos puede ser el provecho y el interés.

En resumen, los hombres malos sólo serán amigos por interés y provecho mientras que los hombres buenos lo serán por la amistad y el amor en sí mismo.


Capítulo V: Correspondencia

De esta amistad caracterizada como mutua podemos decir que dicha amistad es correspondida entre los dos individuos; sobre todo si estos amigos se encuentran cerca y pueden compartir sus bienes. Sin embargo, también tenemos personas que son amigos, pero que viven muy lejos el uno del otro. En este caso, la amistad no deja de ser porque la distancia no impide la amistad, sólo su práctica. 

Los hombres y los viejos de mal humor no tienen la tendencia a tener muchas amistades, pues nadie quiere estar con personas que inspiren tristeza o enojo. Sólo se está con quien produce placer su compañía. 


Capítulo VI: La igualdad en la amistad

No es posible que la amistad perfecta o recíproca se halle en muchas personas, como tampoco es posible amar a muchos y corresponderlos.

No obstante, los hombres que son amigos por placer y utilidad parecen tener muchos más amigos, pues es una persona puede ser atractiva para muchas y se corresponden sólo en cuanto a placer. Cuando el atractivo acaba, la amistad por placer también porque éste es el objeto de la amistad. 

Los hombres que son frívolos solo tienen amistad con hombres que les son de utilidad o que sean apacibles con ellos, pero nunca serán amigos alguien que reúna las dos características al mismo tiempo. 

Estos tipos de amistades junto con la amistad de los hombres buenos y virtuosos son amistades basadas en la igualdad. Esto se debe a que las amistades dan una cosa por otra, utilidad por provecho, provecho por utilidad, etc. 

Capítulo VII: La desigualdad en la amistad

La desigualdad se crea en las relaciones donde hay alguien que manda y otro que obedece. Por ejemplo, padre e hijo, marido y mujer, joven y anciano, etc. 

Hay ciertas excepciones como por ejemplo, cuando el hijo cumple los mandados del padre y obedece en todo, ahí la amistad será buena y duradera. 

La amistad y la justicia

Los términos justos en estos dos conceptos no son iguales. Por ejemplo, en la justicia, el primer paso que necesitamos para alcanzarla es el mérito y la virtud, luego viene lo cuantitativo (premios, honres, o votos en el caso de la democracia). En cambio, en la amistad es todo al revés, lo cuantitativo va primero que el mérito; por ejemplo, primero vemos el interés (pues no podemos ver si es virtuoso o no a primera vista) y luego nos fijamos si es virtuoso o vicioso. 

Capítulo VIII: La base de la amistad

Hay hombres que prefieren siempre ser adulados y tener los máximos honores. Esto no es precisamente la amistad, pues en ella debe haber amor. Por ejemplo, el amor que una madre tiene a su hijo es un tipo de amistad, no es adulación, sino más bien preocupación y cariño por el crío.

Además, la amistad consiste más en amar que en ser amado, por lo que el adulador no podrá conseguir una buena amistad porque necesita amar también. 

Capítulo IX: Amistad y justicia

Sí podemos encontrar la amistad y la justicia entre comunidades que comparten responsabilidades, y mucho más en comunidades donde sus miembros son semejantes (filósofos, soldados, científicos, etc.). Entre ellos hay amistad y procuran ser justos entre ellos. 

La injusticia hará que cualquier comunidad se destruya puesto que aquellas están construidas por la amistad y la justicia. 


Capítulo X: Formas de gobierno

Según Aristóteles, las formas de gobierno son tres: 
  • La monarquía
  • La aristocracia
  • La república (o también llamada timocracia(1))


De estas tres Aristóteles considera que la monarquía es mejor, mientras que la peor es la república. 

Desviaciones de las formas de gobierno

Y así como hay tres formas de gobierno, sus desviaciones también son tres: 

  • Monarquía - Tiranía
  • Aristocracia - Oligarquía
  • Timocracia - Democracia

La primera desviación es la tiranía y consiste en que un tirano se apropie de todos los bienes de la ciudad. El traspaso de  monarquía a la tiranía ocurre cuando el rey gobierna de una manera deficiente. 

La segunda desviación es la oligarquía y tiene que ver con que los aristócratas que gobernaban anteriormente se comienzan a repartir los bienes entre ellos, sin atender a las necesidades del pueblo. 

La tercera es la democracia, ya que ésta permite que todos puedan elegir al representante del país sin importar los patrimonios o propiedades que éste tenga.

Formas de gobierno en la vida diaria 

Cada forma de gobierno corresponde a un determinado estilo de vida, en realidad, Aristóteles trata de alcanzar una similitud entre ellos. 

La monarquía podría verse reflejada en el gobierno del padre sobre el hijo. La tiranía corresponderá a la similitud que hay entre el amo y el esclavo, pues el esclavo debe velar por los beneficios  y provechos del amo. La aristocracia se ve retratada en la relación del marido con la mujer, pues el hombre es mejor que la mujer en la concepción aristotélica. La oligarquía se verá reflejada en el absolutismo del marido sacando provecho de toda situación en su propio beneficio. La timocracia se ve presente en la relación entre los hermanos si estos tienen la misma edad, si no la tienen entonces no habrá parecido. La democracia es representada por las casas donde no hay señores y todos son iguales, nadie manda a nadie.

Capítulo XI: Las formas de gobierno y la amistad 

Ya habíamos dicho que la monarquía se asemeja a la relación entre padre e hijo. De hecho, es esta la forma en que se tiene amistad en la monarquía porque el rey manda a sus ciudadanos, tanto como el padre manda a los hijos. 

Las mismas especies de amistades ocurren en cada una de las formas de gobierno, tal y como lo describimos con la monarquía. 

En la tiranía no hay amistad en absoluto debido a que el mandato absolutista o la relación amo/esclavo no representa una relación de amistad. Donde más puede darse la amistad es en la democracia, pues en esta forma de gobierno son todos iguales. 

Capítulo XII: Amistad entre parientes

Esta amistad de alguna forma es recíproca pues los padres aman a los hijos tanto como los hijos aman a sus padres, aunque los hijos se demoren más en amar porque estos solo pueden hacerlo cuando tienen razón y discernimiento. 

Los hermanos también se quieren en cuanto que son de la misma sangre y nacieron del mismo padre. Una de las cosas más importantes para la edad entre hermanos es que estos sean de la misma o casi la misma edad; esta es la amistad que más se asemeja al compañerismo. 

El marido y la mujer tienen una amistad recíproca, pero el marido se preocupa más de la casa que de las cosas políticas o de otra índole; además de tener hijos con su mujer.

Capítulo XIII: Amistad entre iguales

La amistad recíproca nunca va a estar expuesta a quejas porque nadie puede enojarse con quien quiere de verdad. Por el contrario, las amistades basadas en el provecho y la utilidad tienen muchas quejas de por medio, nunca se queda satisfecho con la utilidad ni el placer que se mantiene, siempre se quiere más. 

Otra de las amistades que existe es la amistad legal. Esta comprende el intercambio en las relaciones mercantiles (compra /venta). Esta es una de las amistades que prospera siempre y cuando se mantenga fidelidad en la transacción, es decir, que se cumple con o acordado en la venta. 

Pero surge una dificultad en este tipo de amistad porque no se sabe si dar estimación al favor sólo por el provecho, o dar estimación porque el favor es una voluntad bondadosa de quien lo entrega. Los que argumentan a favor del provecho dicen que aquel favor es algo que cualquiera podría hacer, mientras que los otros agradecen profundamente la voluntad del que está haciendo el favor. 

Evidentemente, si la relación entre los dos hombres es de una amistad recíproca se agradecerán mutuamente y se considerará la voluntad de quien hace el favor, por el contrario, si la amistad está basada en la utilidad entonces sólo se verá el favor y no a la persona. 


Capítulo XIV: Amistad entre desiguales

La amistad puede acabar a causa del exceso que se produce en la ascensión a la superioridad, es decir, cuando el amigo se cree superior a su otro amigo. ¿Cuándo pasa ésto? cuando dicho amigo considera al otro como poco útil y que ya no merece más atención, mientras que el otro amigo le dirá que tiene que cumplir con su deber, pues el superior debe ayudar al inferior.

No obstante lo dicho anteriormente, la amistad entre desiguales puede darse sin problemas, siempre y cuando el deudor pueda devolver el favor con lo que él pueda, porque la amistad en sí misma no consiste en sólo recibir, sino que también en dar (y dar siempre será mejor que recibir).

Conclusiones 

Realmente, un compendio completo de lo que se trata la amistad y su breve relación con las formas de gobierno. Sin embargo, aún nos espera la segunda parte de lo que se trata la amistad, pues el próximo libro también trata sobre el mismo tema. Hay una duda que me surge después de leer todo esto ¿habrá sido Aristóteles de la misma manera? es decir, ¿habrá sido tan consecuente con su filosofía? No habría como saberlo a ciencia cierta, pero no hagamos ad hominem y consideremos las palabras del maestro porque, al fin y al cabo, nada hay de malo en considerar la amistad como algo recíproco que se da entre los buenos.